Salta y el claro retroceso de PO-FIT; algunas conclusiones
Las elecciones de Salta con el triunfo claro de Urtubey y el segundo lugar para el romerismo, trajo a la vez un dato importante: el marcado retroceso de PO y el Frente de Izquierda (FIT) que pasó de ganar la Capital en las elecciones anteriores con cerca del 30% a diputado nacional-provincial-senadores y más del 20% a intendente; cayendo ahora al 12% quedando ubicado tercero y muy lejos de las dos primeras fuerzas en el resultado final, sin ninguna chance de disputar el gobierno; objetivo que el propio PO había puesto como central en toda su campaña. En la Capital, PO perdió más del 60% de los votos que había sacado en el 2013.
A la vez, PO también tuvo un notorio retroceso a nivel provincial; en el 2013 con el 19% logró un diputado nacional, una senadora y varios diputados provinciales, ahora sacó el 7%. Es decir, retrocedió provincialmente más de 12%, pasando de disputar el primer lugar provincial a ser terceros, a escasos votos de la 4º fuerza.
Frente a los resultados y la caída pronunciada del PO y el Frente de Izquierda, había dos caminos que se podían tomar: uno era partir de la realidad y sacar conclusiones, para ver donde estuvo el problema, ver que se hizo mal, para perder semejante oportunidad. El otro camino, que creemos muy equivocado, es hacer lo que está haciendo PO; ignorar la realidad evidente y simular un festejo bajo el slogan “somos tercera fuerza en Salta”, como rezan sus afiches.
Algunos olvidos de PO; sus propias palabras y materiales públicos
Como si nada hubiera pasado en Salta, PO motoriza una campaña pública, tratando de confundir a la población de CABA con el dato “somos tercera fuerza en Salta”. ¿Qué cosas pasa por alto PO en su campaña?
Lo primero que oculta, es que antes de festejar “ser tercera fuerza” en 2015 publicaba en su prensa del 14 de noviembre de 2013: “El Partido Obrero ganó las elecciones en Salta”. Es difícil entender por qué alguien festeja ganar una provincia y dos años después, dice festejar que retrocedió al 3º lugar. En otro artículo de su prensa, de noviembre de 2013, bajo el título “Elección histórica” el electo diputado nacional Pablo López, cuenta que: “El hecho más importante es la llegada del Partido Obrero, por primera vez, al Senado, con Gabriela Cerrano con el 27,14%”: Y luego agrega para que no haya dudas: “En la categoría de diputados, la lista encabezada por Claudio Del Plá aseguró cuatro diputados, con el 26,7%, superando al PJ”.
Lo otro que tampoco dice PO, es que anunció que ganaba la capital salteña. Altamira estuvo en Salta días previo a las elecciones y dijo frente a todos los medios: “En Salta se discute la posibilidad de un gobierno del PO”. Su dirigente provincial de Salta, Del Pla, el día de la votación dijo: “La gente espera que hoy sea una visagra histórica”. Y en la prensa de PO del 9 de abril, tres días antes de las elecciones, PO dice que: “todos atacan al PO. Es un claro síntoma del temor que existe a la posibilidad de que podamos obtener un nuevo triunfo… Esta última semana redoblamos el esfuerzo frente al gran desafío de ganar la ciudad”.
Como puede verse, PO fue primera fuerza en Salta en 2013 y ahora predijo por todos los medios posibles que se preparaba a ganar la Capital. No lo logró y sufrió un duro retroceso. Que lo quiera ocultar detrás de la campaña “somos tercera fuerza” es algo ajeno a la realidad.
Los motivos del retroceso de PO y el FIT
En política, todo tiene una explicación racional, si se parte de la verdad de los hechos. Salta, expresaba una oportunidad histórica para una fuerza de izquierda, de hacerse con el gobierno de la Capital. Eso era además una responsabilidad para el PO que tenía dos caminos; abrirse a una gran confluencia para el objetivo de ganar la intendencia, o encerrarse en la autoproclamación de creer que PO; por sí mismo, podía lograrlo. Como siempre, optó por este último camino sectario; y sin además demostrarle en hechos concretos a la población de Salta que estaba preparado para cambiar las cosas y gobernar. Los resultados están a la vista. Un retroceso notable que lamentablemente termina siendo funcional a los partidos del régimen que retomaron los primeros lugares.
Desde el MST, tanto en Salta, como en todo el país, reiteradas veces hemos dicho que la izquierda, en todas sus variantes, tiene que conformar una gran confluencia política que se juegue a gobernar y disputar realmente el poder. La prueba de Salta muestra que ese camino es una necesidad inocultable. Y lamentablemente también muestra que el camino auto-referencial y el sectarismo, a la larga lleva a la pérdida de oportunidades. En nuestro caso, en la provincia de Salta hemos superado las PASO y venimos de a poco avanzando, mientras hacemos este planteo unitario y de nueva izquierda.
Este domingo 19 de abril, también se vota en Mendoza, donde el PTS y el FIT vienen de sacar más del 14% en las elecciones provinciales previas. Allí también el FIT se ha negado a conformar un frente y unidad más amplia como propusimos desde el MST. Y ahora estará ante el mismo dilema ¿Podrá por su propia cuenta seguir avanzando? ¿O estaremos ante un nuevo retroceso del FIT? Lamentablemente, es muy posible esta última variante de un nuevo retroceso.
Hace falta una nueva izquierda
Ya es hora de sacar profundas conclusiones políticas y animarse a un proyecto de izquierda sin esa cerrazón que al final, le hace el juego a los partidos del régimen. El debate sobre la importancia de conformar una gran coalición de toda la izquierda sigue abierto hacia las elecciones nacionales, donde también será una necesidad. Mientras hacemos una vez más este planteo unitario, seguimos construyendo, en todo el país, una nueva izquierda que de verdad quiera pelear por ser opción de poder para derrotar a los partidos del régimen.
Como parte de esta construcción ahora estamos desplegando con toda nuestra fuerza esta propuesta también en la capital del país, con Alejandro Bodart y todas/os nuestros candidatos. En esta pelea que tiene su primer episodio el 26 de abril con las PASO, también somos optimistas del avance de una nueva izquierda que es muy necesaria frente al macrismo y sus cómplices, y que crece por encima de los límites de la izquierda sectaria, que va dejando de ser novedad.
Invitamos a todas y todos los trabajadores, vecinos y a la juventud, a que se animen a darle su apoyo a esta nueva izquierda que frente al PRO y sus cómplices, es muy necesaria en la ciudad.
Sergio García