El nuevo frente MST-MAS se abre camino. Izquierda al Frente por el Socialismo
La debacle de todos los partidos del régimen es notoria. La ilusión de Macri y Cambiemos se evapora al ritmo del ajuste, la inflación y la recesión. El kirchnerismo como oposición hizo agua y cada vez más sus honestos simpatizantes ven los límites del “proyecto”. Si se pregunta “a quién votarías en las próximas elecciones”, aparece un desencanto general y una gran incógnita.
El vacío político y las decepciones constantes con lo viejo o lo reciclado dejan cada vez más al descubierto la necesidad de que surja algo nuevo de verdad. Las grandes mayorías populares hoy no se identifican con ningún proyecto político. Este quiebre de miles y miles de trabajadores, mujeres y jóvenes con “la clase política” es la primera condición para que algo nuevo surja.
Desde el Argentinazo, del que se cumplen 15 años, han pasado de largo varias oportunidades de que emerjan proyectos de cambio, distintos a los partidos del sistema. La primera fue la corriente que representaba Luis Zamora. Después de la importante votación porteña de 2001, ese proyecto fue naufragando por su negativa a disputar en las presidenciales de 2003 y por su discurso descalificatorio contra todo el resto de la izquierda. A su vez, el PC rompió Izquierda Unida -el frente formado con el MST- para integrarse sin críticas al gobierno K.
Luego surgió una corriente en base a un programa transformador y emancipador: Proyecto Sur, que en 2010 hizo una buena elección en Capital. Pero luego Pino Solanas también se negó a dar batalla a nivel nacional, se fue cada vez más al centro-derecha y se alió a Elisa Carrió, lo que terminó de volatilizar el reconocimiento popular que supo tener.
El tercer intento fue el FIT, que al inicio capitalizó el giro electoral hacia la izquierda. Pero en vez de ampliar el frente al conjunto de la izquierda política y social para ser una opción poderosa, tal como les reclamamos una y otra vez desde el MST y el Nuevo MAS, su sectarismo y autobombo los han ido llevando a una dinámica de estancamiento y choques internos.
En este contexto, Izquierda al Frente por el socialismo se postula para conformar una referencia de izquierda amplia, de la que la unidad entre el MST y el Nuevo MAS a nivel nacional es un primer paso. Este nuevo frente de izquierda que hemos conformado se basa en el apoyo militante a todas las luchas y causas justas, en una declaración política de actualidad y en un programa de 40 puntos por la independencia de la clase trabajadora y por una perspectiva de cambio antiimperialista, anticapitalista y socialista.
Si solés leer nuestro periódico sabés que no somos una izquierda testimonial; que no somos una “oposición para equilibrar el sistema”, sino una izquierda comprometida con las luchas de cada día y a la vez con los cambios de fondo. Y como somos consecuentes, creemos necesario formar un gran polo de referencia de toda la izquierda y el activismo, sin sectarismos, poniendo por delante los acuerdos y no las diferencias. Izquierda al Frente por el socialismo nació para asumir ese desafío.
Este polo hace falta para hacerle frente en mejores condiciones al gobierno macrista y a todos los partidos del sistema. Sabés que por eso mismo somos muy críticos del otro frente, el FIT, porque desperdició una gran oportunidad y se quedó en la chiquita.
Ahora hemos dado un paso político muy importante al formar Izquierda al Frente por el socialismo. Te invitamos a fortalecer esta unidad y ampliarla, haciéndola conocer a tus amigos, compañeros de trabajo o estudio, a tus vecinos, a tu familia, personalmente y a través de las redes sociales. Ayudamos a difundir las ideas del frente, el programa y la declaración política. ¡Vos mejor que nadie para llevar esta tarea adelante!