Los jubilados en peligro
La semana pasada, a partir del suicidio de un jubilado en la sede de ANSES de Mar del Plata, se destapó un fuerte debate sobre la situación que están atravesando millones de jubilados y pensionados ante un sistemático ataque a la seguridad social en la Argentina que el gobierno de Macri, a través de sus funcionarios viene profundizando.
Entonces que está pasando con los jubilados y pensionados en la Argentina?
Para respondernos lo primero que tenemos que saber es que entre el Pami y el Anses juntos se manejan un billón de pesos que es saqueado sistemáticamente por los gobiernos de turno para juntar plata para deuda y políticas clientelares. Así tenemos una amplia mayoría de jubilados que cobra la “mínima” de $6.300 y si sumamos los que llegan a 9.300, como cree Macri que es la mínima, nos encontramos con casi el 75% de las jubilaciones y pensiones. Es decir, que la inmensa mayoría de los adultos mayores son directamente pobres y dependientes de familiares, amigos y si la consiguen de alguna ayuda que le da el Pami u otro organismo.
Pero el Pami no se queda atrás, venía atravesando una fuerte crisis con el gobierno de Cristina ya que su política de “inclusión” con las llamadas jubilaciones a las amas de casa, medida correcta pero con jubilaciones por debajo de la mínima, se hizo incluyendo un millón y medio de jubilados para ser atendidos por los mismos prestadores que hasta ese momento daban ya prestaciones deficitarias a los 4 millones que gozaban del beneficio.
Pero el gobierno de Macri en este tiempo decidió seguir “achicando gastos” y eliminó prestadores clínicos, mantuvo congelados los subsidios a veces indispensables para los abuelos y abuelas que no cuentan en la cruda realidad que les toca vivir con la ayuda de su familia. Así recortó el servicio de urgencias médicas, la entrega de medicamentos gratuitos, prótesis, pañales, bolsas de ostomia y un largo etc. que aumentaron las penurias en algunos casos de forma desesperante.
A modo de ejemplo este recorte, si tomamos un servicio sensible como el de urgencias médicas, provoca que además de altas demoras en la atención se han visto casos de afiliados que estuvieron hasta doce horas arriba de la ambulancia porque las clínicas y hospitales desbordados, se negaban a recibirlos.
Este es el contexto en el que este jubilado de mar del Plata, que cobraba una buena jubilación, se suicidó al grito de “estoy cansado de pelear”, y no casualmente en una sede de ANSES que tranquilamente podía haber sido del PAMI u algún edificio de gobierno.
Hoy el manejo del gobierno de la seguridad social en la Argentina hace que los jubilados y pensionados estén en peligro y hay que rodear de solidaridad y acompañamiento a esos valientes “viejos” que siguen en la lucha por el 82% móvil para acceder a una vida mas digna, que siguen luchando por recuperar las prestaciones médicas y sociales del PAMI y que pelean para que los gobiernos de turno saquen sus manos de estos organismos normalizando el PAMI para ponerlo junto al ANSES en sus manos y de los trabajadores.
Jorge Núñez – Delegado ATE Pami – Agrup. Desde Abajo