Santa Cruz: Alicia profundiza el conflicto con ataques en lugar de solucionarlo
El gobierno provincial de Alicia Kirchner, a través de los funcionarios del Consejo Provincial de Educación ha desatado en la última semana una campaña de ataques a la lucha docente en los medios de comunicación y redes sociales. En lugar de buscar una solución, el gobierno profundiza el conflicto con la única intención de quebrarlo para poder hacer pasar el congelamiento salarial a todos los trabajadores y trabajadoras de la provincia y preparar el terreno para un ajuste mayor después de las elecciones.
Frente a la masividad y fuerza del reclamo, decidido y sostenido por masivas asambleas, los funcionarios intentan reducirlo a una acción de unos pocos compañeros y compañeras fogoneados por el MST y el PO llevando adelante escraches mediáticos a militantes y dirigentes sindicales y de la izquierda.
El colmo de esta campaña desquiciada fueron las declaraciones del vicepresidente de la cartera educativa Ismael Enrique, quien comparó a los docentes que ocupan hace una semana las instalaciones del CPE con los torturadores de la dictadura y a los funcionarios atrincherados con los presos políticos. La caradurez no tiene límites. Los funcionarios no están privados de su libertad sino que han decidido permanecer en las instalaciones por voluntad propia, y son ellos los que atentan contra los derechos de los trabajadores tal cual lo hacían los jefes de los torturadores. Los docentes vienen reclamando desde hace cuatro meses por salarios y condiciones laborales en una provincia que es la única del país que no ha ofrecido ninguna recomposición salarial y no garantiza ni el estado de los edificios educativos, ni la salud, ni la obra social, ni el agua.
Las declaraciones de Enrique desnudan una vez más que para el kirchnerismo los DDHH sólo fueron una movida de especulación política. Por eso al mismo tiempo que se realizan este tipo de declaraciones se conocen los procesamientos por luchar de dirigentes sindicales de Vialidad, ATE y SITRAIC .
El gobierno provincial debería dejar de echar nafta al fuego y brindar soluciones para destrabar un conflicto que lleva más de cuatro meses y tiene a la provincia de Santa Cruz sin haber iniciado el ciclo lectivo.