Derechos sociales y derechos democráticos El ajuste no pasa sin represión

No por repetida, la afirmación del título es menos cierta. Lo confirma una vez más la dura represión policial del miércoles 24 en Congreso, con gases, balas de goma, palos y casi 30 detenciones,con tal de imponer el Presupuesto 2019 de Macri y el FMI. Estamos frente a un avance cualitativo en materia de ataque a las libertades democráticas, lo que requiere de la mayor unidad de acción posible para resistirlo e impedirlo.

 

• En Capital, un agente de Prefectura asesina a sangre fría con su arma reglamentaria a un conductor en un peaje de la Autopista Illiaen el marco de una discusión de tránsito.
• En Mar del Plata, un policía increpa violentamente a un juez que cuestiona su accionar en un procedimiento. A los días,es recibido por la ministra Bullrich y ascendido.
• En La Plata, un grupo pro-vida irrumpe en un colegio y al grito de “si sos mujer tenés vagina y sisos hombre tenés pene” intenta impedir una clase de educación sexual.
• La empresa Metrovías, concesionaria privada del subterráneo,avanza en un nuevo intento de desafuero a Néstor Segovia, dirigente de los Metrodelegados.
• En Pcia. de Bs. As. imputan por coacción agravada a Oscar De Isasi (Sec. General de ATE) y a Francisco Banegas (ATE Ensenada). criminalizando la movilización de los trabajadores de los Astilleros.

Todas estas y otras situaciones similares ocurrieron en estemismo mes de octubre. ¿Es una casualidad? ¿Será que la primavera hace florecer la mano dura y las actitudes fachas? Definitivamente, no. Es evidente que estamos ante un avasallamiento creciente a los derechos democráticos y las garantías constitucionales, que va de la mano con la aplicación del plan económico del gobierno macrista, los gobernadores y todos sus cómplices políticos y sindicales.

Luz verde desde arriba

Lejos quedóel tiempo en que Macri prometía “pobreza cero” o que el salario no pagaría Ganancias. Ya no hay bailes ni globos.Ya meses atrás les hizo concesiones a las FF.AA., dándoles injerencia en la seguridad interior. Y a medida que profundiza el rumbo económico de ajuste y entrega, profundiza también el ataque a los derechos democráticos. Que lo digan si no los estudiantes cordobeses, entre ellos militantes del MST, injustamente procesados por la toma pacífica de una facultad durante el conflicto universitario.

Por ejemplo, en estos días se mediatizó un procedimiento de gendarmes requisando a los pasajeros en un trasporte público, excediendo inclusolas facultades legales de dicha fuerza represiva.Pasa en cualquier barrio del país, en cualquier andén o estación, sobre todo temprano. Con la excusa de “identificación de personas” se monta un aparato cotidiano de intimidación y control social hacia los trabajadores, la juventud y los sectores populares.

Además, este autoritarismo e impunidad desde el poder, a menudo con el falso argumento de “combatir el narcotráfico” o “la inseguridad”, tiene consecuencias nefastas a nivel social. Desde el respaldo de Patricia Bullricha la Gendarmería asesina de Santiago Maldonado hasta su mamarracho llamado “doctrina Chocobar”para blanquear el gatillo fácil policial, y desde la campaña clerical contra la “ideología de género” hasta el latiguillo de que la crisis se debe al “alto costo laboral” argentino, el discurso derechista de estegobierno y sus aliados da rienda suelta a acciones violentas de sectores sociales reaccionarios.

León herido, más peligroso

Este gobierno no es todopoderoso. Inclusive tiene líos con los agentes de la Federal que rechazan pasar a la fuerza policial de la CABA y acaban de condenar a cadena perpetua al policía porteño que asesinó a Cristian “Paragüita” Toledo. Al mismo tiempo, su mayor problema es que las luchas sociales no ceden ni un tranco. Y el retorno a las relaciones carnales con el FMI, la devaluación o el intento de cobrarnos a los usuarios un aumento retroactivo de gas hacen crecer la bronca popular.Aun así, ya no solamentepersigue a lxsluchadorxs -como también ocurría bajo gobiernos anteriores-, sino que ahora encima a través de la justicia adicta pretendecriminalizar y disciplinar a las organizaciones a las que pertenecen.

Por estas razoneses necesario unir fuerzas sin ningún sectarismo para resistir esta ofensiva represiva y antidemocrática que encabezan Mauricio Macri y su ministra Patricia BullrichLuro Pueyrredón. Por la libertad de Milagro Sala, Daniel Ruiz y todxslxspresxspolíticxs. Por el cese de la represión y las persecuciones. Por el respeto a todas las libertades democráticas que este pueblo, con tanta lucha, supo conseguir.

Oscar Charrutti,

abogado del CADHU-MST