MEGACAUSA III: ¡Impulsemos juntes las mateadas por la memoria!
El pasado 6 de mayo se dio inicio a la MegaCausa III, otro de los grandes juicios de lesa humanidad en la provincia, que tienen como imputados al ex Jefe del Ejército César Milani, el ex Juez Federal Roberto Catalán, Miguel Ángel Chiarello, Ángel Pezzeta, José Féliz Bernaus, Miguel Eliberto Goenaga, Leónidas Carlos Moliné, Alfredo Solano Santacrocce, Carlos Rodríguez Alcantara, entre otros imputados que son juzgados por crímenes de lesa humanidad perpetrados durante la última dictadura militar. Con más de 40 testigos, se espera que en tres meses aproximadamente se dicte la sentencia.
Luego del vergonzoso y repudiable fallo del Tribunal Oral en lo Criminal Federal en la sentencia de la Megacausa II, donde se absolvieron a 7 genocidas bajo el “beneficio de la duda” y sólo se condenaron a 4 – la gran mayoría de ellos también imputados en esta MegaCausa como Goenaga, Bernaus, Moliné, Chiarello, Santacrocce- queda demostrada la necesidad de seguir presionando a la Justicia, que a más de 43 años del último golpe cívico militar, sigue beneficiando a los genocidas y a sus cómplices civiles y eclesiásticos. Quizás una de las victorias más recientes del movimiento de derechos humanos de la provincia, fue la revocatoria de la prisión domiciliaria del ex Juez Federal Roberto Catalán, antes del 24 de Marzo, que demuestran que la única garantía de justicia que tenemos para terminar con la impunidad de los crímenes del terrorismo de Estado es seguir con la presión social. Es por esto que con la militancia de la Juventud Socialista acompañamos cada audiencia, convencidos de que la Memoria, Verdad y Justicia son una bandera que debemos llevar en lo más alto, inclusive les más jóvenes militantes que gracias a esta lucha pueden conocer el capítulo más negro de nuestra historia contemporánea como país.
Contra el negacionismo y las políticas de reconciliación de ayer y de hoy
Desde 1983 a la fecha han sido innumerables los intentos de la democracia de los partidos tradicionales de reconciliarnos con el terrorismo de Estado, desde las leyes de Obediencia Debida y Punto Final de Raúl Alfonsín, los indultos de Menem y más recientemente el nombramiento de César Milani al frente del Ejército por Cristina Fernández de Kirchner, a sabiendas de su rol en la inteligencia y las denuncias que ya tenía desde 1979, y en 2017 el infame 2×1 de la Corte Suprema de Justicia que cristalizaba la política de Macri en cuanto a Derechos Humanos se refiere, derrotado en las calles por la movilización popular.
A esto también le sumamos que a la vez que se intentó resguardar a los responsables y cómplices de los crímenes de lesa humanidad de la última dictadura militar, se dejó casi intacto el aparato represivo, lo que permitió que personas como Milani o Jaime Stiuso siguieran haciendo inteligencia dentro del Estado, hasta hace muy poco tiempo. Otras formas de terrorismo de Estado se mantienen hasta el hoy como el gatillo fácil y la doctrina Chocobar de Patricia Bullrich y también, en su momento, de Sergio Berni.
Otro de los nefastos legados del terrorismo de Estado es la continuidad del modelo de miseria planificada y la deuda externa sextuplicada a su término, como así también las relaciones carnales con el FMI que planean continuar tanto Macri como Alberto Fernández, el sucesor de CFK. Contra todos estos legados le oponemos una alternativa y una salida que rompa con este mecanismo de sangría de nuestros recursos al servicio de una minoría privilegiada. ¡Animate a fortalecerla con nosotres!
Milani, ascenso y caída de un genocida con privilegios
César Milani, es imputado en esta causa por el secuestro y torturas de Pedro Olivera y de su hijo Ramón en marzo del 77, y el de Verónica Matta. También se encuentra imputado por el encubrimiento de la desaparición del soldado conscripto Alberto Ledo, hijo de la titular de la filial riojana de Madres de Plaza de Mayo, Marcela de Ledo, ocurrido en Tucumán en 1976.
Durante casi 40 años Milani permaneció impune, mientras ascendia sin obstáculos en su carrera militar. Llegó a la cima de su carrera durante el kirchnerismo, siendo nombrado como Jefe del Ejército por la ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner, en 2013 hasta 2015. Su caída comenzó luego de su retiro en 2015 y desde febrero de 2017 se encuentra detenido desde febrero de 2017 en Campo de Mayo.
Por el verdadero Nunca Más, Impulsamos las Mateadas por las Memoria
Desde la Juventud Socialista, estamos convencidos de que ningún genocida debe quedar suelto e impune y por eso queremos desplegar una campaña para que se convoquen más compañeres a las audiencias de la Megacausa III, lamentablemente muchos sectores han dejado de participar por su filiación k y es una claudicación que no podemos permitir. Queremos una verdadera reparación histórica y por eso te invitamos a que te sumes a las mateadas por la memoria, todos los viernes a las 10 hs, contaremos con la participación de los ex presos políticos y de referentes de la lucha por los derechos humanos.