Suspensión de Bolsones, marcha atrás y una cruda realidad: El hambre que no espera
La situación en Santa Fe es alarmante. El número de niñes que asisten a los comedores escolares aumenta y el número de familias que depende de un bolsón de alimentos también.
Es que a la crisis económica que ya sufríamos les trabajadores, se le sumo el parate de empleos informales debido a la pandemia. Ante este panorama tan duro, el gobierno provincial no tuvo mejor idea que suspender la entrega de bolsones esta semana, lo cual generó mucha bronca que rápidamente se hizo sentir en los grupos de whatsapp. La rápida denuncia desde Amsafe Rosario y las denuncias de la comunidad educativa en redes obligó al gobierno a dar marcha atrás, entregando al día hoy los bolsones en una parte importante de escuelas y comprometiéndose al reparto en el resto.
Lo cierto es que muchos comedores escolares han dejado de cocinar y en su “reemplazo” se entregan bolsones que a todas luces son insuficientes. Ya era miserable el presupuesto para cocinar con $17,36 por niñe/adolecente según el último registro público a través de los medios de comunicación (Vía Santa Fe 22/08/19) monto con el cual es imposible incorporar todos los nutrientes esenciales que debe ingerir una persona diariamente (proteínas, vitaminas y minerales)
Estos bolsones están constituidos por muy pocos productos, con los que apenas se pueden elaborar comidas para 2 o 3 días y su entrega es semanal. Muy poco para familias que están en una situación desesperante, golpeadas por la desocupación y casi sin otro recurso.
Estos hogares (muchos de ellos numerosos) no pueden vivir con dos bolsones de alimentos al mes y $10 000.
Datos que asustan
Según datos oficiales, en marzo de 2020, una familia tipo (integrada por 4 personas dos mayores de edad y dos menores) necesita aproximadamente $42 000 para no ser pobre.
En Santa Fe se registraron: (segundo semestre de 2019):
· 182.000 personas pobres, que corresponden al 34,4 % de la población santafesina.
· 37.000 personas indigentes, que corresponde al 7% de la población santafesina.
Si tenemos en cuenta la cantidad de trabajo precario, despidos y desocupación generados recientemente, estos números serían mayores. Aproximadamente el 50% de les santafesines estarían por debajo de la línea de pobreza.
A su vez, el cuidado de la salud en tiempos de pandemia resulta dificultoso ya que la entrega por ahora, en un bolsón mensual de artículos de limpieza e higiene es escasa. El gobierno “hace” como que nos provee de alimentos y nos cuida pero la realidad es otra. Nos hambrea y juega con nuestra salud.
¿Qué proponemos desde Alternativa Docente y el MST?
Ante los dichos de los ministros y el gobernador asegurando no contar con más presupuesto, desde nuestra agrupación docente y nuestro partido somos claros:
· Suspensión de todo pago de deuda provincial.
· Mayores impuestos a las empresas millonarias y cerealeras.
· Suspensión de todo subsidio a la Iglesia y escuelas privadas
Que toda es plata vaya a resolver la situación alimentaria de la población más humilde, urgente aumento de presupuesto a comedores y cobertura con subsidios a toda familia que lo necesite.
El hambre no espera!
Noelia Rodríguez, Profesora de Biología de Santa Fe
Facundo Fernandez, Maestro e integrante de Comisión Directiva Amsafe Rosario
Alternativa Docente Santa Fe / ANCLA, MST