COVID en la 202: ¿Quién cuida a choferes y pasajeros?

 

Los 12 casos confirmados de choferes infectados en la línea 202 que une La Plata y Berisso, demuestran que los protocolos sanitarios y de prevención no se cumplen en el transporte. Al conocerse estos casos, la empresa salió a la ofensiva contra los choferes, haciendo circular rumores contra ellos, diciendo que eran los responsables de no cuidarse y propagar el contagio. Incluso planteó una denuncia penal contra algunos.

No es de extrañar esta reacción de una patronal como la de Osmar Corbelli, titular de la empresa Unión Platense que nuclea a varias líneas de la ciudad y la región. Un verdadero monopolio. Es tristemente conocido entre laburantes del sector, al ser Corbelli la familia que viene haciendo negociados con todos los gobiernos.

Son los que despiden trabajadores y cuando los laburantes se organizan por reclamos esenciales como pedir baños y una reducción de la jornada laboral que era de 16 horas al día -el recordado conflicto de la Línea Este, en acuerdo con el gobierno y la burocracia de la UTA, mandó a reprimir a los choferes y a encarcelar injustamente a cuatro de ellos. Por quienes luchamos incansablemente y sigue pendiente el desprocesamiento y su plena libertad.

Para intentar lavarse la cara, esta patronal suspendió los recorridos de la 202 hasta nuevo aviso. Pero al día de hoy siguen sin cumplir las normativas de bioseguridad en ninguna de sus líneas. Y esta situación es similar en todo el transporte de La Plata y la región.

Hoy los choferes deben circular en unidades que no tienen garantizado el aislamiento completo de la cabina, apenas una especie de cortina hasta la mitad del espacio. No les brindan sanitizantes ni alcohol en gel a quienes conducen y trabajan, mientras que las unidades solo se higienizan y desinfectan una o dos veces al día, al principio y final de la jornada. Cuando pasan por cada colectivo muchísima gente que puede estar contagiada y no saberlo.

Esto denuncia uno de los choferes, quien además nos agrega: “Al principio vinieron y se sacaron fotos mostrando como que respetaban los protocolos. Y la municipalidad apareció un par de veces a hacer controles, pero enseguida algún arreglo hubo porque se dejó de controlar todo. Nos hacen subir hasta 30 pasajeros al micro y nos dicen que no controlemos nada. Encima las líneas están estalladas porque la frecuencia es de sábado o domingo, sobre 70 y tantos coches que debería haber en la calle, apenas hay unos 30 o 40 circulando. Y la orden que recibimos es que suban hasta completar el coche”.

Y no solo esto sino que nos agrega: “No limpian el coche en cada recorrido, en los baños no hay elementos de limpieza y son un desastre en sus instalaciones más que defectuosas y contaminantes. Tampoco tenemos lugar de descanso y, encima, las empresas se acoplaron a los ATP que da el gobierno, pero nos desdoblan los pagos de sueldos. Y seguramente pase lo mismo con los aguinaldos”.

La 202 o Plata Bus: Nuestras vidas y empleos, no sus ganancias

 

Claramente estamos ante una patronal que demuestra que la vida de los trabajadores no le importa absolutamente nada, y refuerza eso con el ajuste salarial, en las condiciones de trabajo y en el deficiente servicio que prestan hacia la gente de los barrios que utiliza las unidades.

Esta situación de desprecio por los trabajadores y el pueblo no es exclusiva de Corbelli y Cía. También se puede ver en la empresa Plata Bus, que ha decidido no renovar los contratos de alrededor de 140 choferes en las distintas cabeceras, según nos denuncia uno de los choferes afectados por esta situación.

“Estos son despidos encubiertos –nos comenta-, aprovecharon la excusa de la pandemia y dejaron un montón de compañeros en la calle, sin perspectivas y diciendo que no pueden pagar los salarios porque están afectados por la crisis, pero ellos cobraron los subsidios y la crisis la pagamos nosotros. Y tampoco es nuevo esto, antes de la cuarentena ya nos jodían con los viáticos, que nos pagaban menos de la mitad de lo que nos correspondía y también pasaba con los aportes previsionales. Cuando vas a averiguar para jubilarte o ver cuánto tenés aportado, resulta que la empresa nunca puso su parte y la UTA, bien gracias… Nunca vinieron al conflicto en Plata Bus ni se pusieron en contacto con los trabajadores  y despedidos”.

Ante esto, desde ANCLA – Agrupación Nacional Clasista Antiburocrática y el MST, exigimos a la patronal de Plata Bus y al gobierno de Kicillof que intervenga ya que, supuestamente, los despidos están prohibidos. Se abran los libros contables y se reincorpore a todos los choferes despedidos, restableciendo su salario y que la empresa realice los aportes previsionales y de la obra social correspondientes. Y que la UTA acompañe y organice una acción de solidaridad para lograr que en Plata Bus estén todos adentro.

En el caso de la Unión Platense, exigimos que la empresa cumpla todos los protocolos sanitarios, que incorpore nuevas unidades para garantizar el transporte con la higiene adecuada de los coches. Que se incorporen más trabajadores para contar con todos los choferes que sea necesario para cubrir los recorridos. Junto con la entrega de todos los elementos de bioseguridad necesarios y un control de trabajadores y usuarios sobre su efectiva provisión y uso.

Pero también reclamamos al gobierno municipal de Garro, al provincial de Kicillof y al de Alberto Fernández que se hagan las inspecciones necesarias para ver y hacer cumplir todas las disposiciones y normas vigentes.

Para evitar los contagios, mantener el servicio de calidad y seguro, garantizar empleos, salarios y condiciones de trabajo, habrá que aplicar también las sanciones necesarias sobre toda empresa que no cumpla. Y si no lo hacen, que las mismas pasen a manos del Estado, controladas por sus trabajadores y usuarios. Para terminar así con el lucro y la ganancia desenfrenada de los empresarios del transporte a los que poco y nada les importan las vidas de usuarios y laburantes.

 

Juan Bonatto, ANCLA

Agrupación Nacional Clasista Antiburocrática

MST en el Frente de Izquierda Unidad