Voces del Encuentro Internacional de jóvenes socialista
Awais Qarni (La Lucha, Pakistán)
Me gustaría agradecer a la LIS y en especial a los camaradas del MST Argentina, que tomaron esta tarea y dirigieron esta conferencia.
Con la cuarentena y el aislamiento se expuso la brutalidad del capitalismo: millones de personas sin acceso a la salud, a refugios, y a la vez multimillonarios que gastan sus fortunas. Los economistas hablan de una próxima depresión. Nunca vimos una crisis tan grande.
En Pakistán la situación es drástica. La burguesía es la más incompetente para responder a esta crisis. Recortan los presupuestos en educación y salud. Y están los bombardeos, bombas atómicas, misiles, pero no hacen nada para satisfacer las necesidades de las personas. En los estudiantes hay ira porque el gobierno no los defiende en la pandemia, sacaron a millones de niños de las escuelas y muchos están recogiendo basura.
Hemos hecho protestas masivas. Los estudiantes se movilizan y se expresan de manera más militante y violenta que el resto de la sociedad. La crisis emergió en Pakistán. Estamos viendo grandes cambios en la sociedad y las políticas, en el régimen y el servicio militar, que pierden sus batallas contra los estudiantes y otros partidos políticos. Van a más privatización y millones no pueden acceder a la comida ni a la salud. La juventud no desiste en su esfuerzo por derrotar a este régimen. Pakistán tiene el ejército más brutal y ahora salen una vez más con violencia.
En el pasado la tarea de la revolución socialista no fue completada. Esta vez, la juventud tiene la responsabilidad en sus hombros. Si hay algún movimiento de trabajadores jóvenes, no habrá opción más que destruir este sistema y construir la revolución socialista.
Emrecan Konyali (SEP- Turquía)
Voy a empezar compartiendo cuál es la atmósfera actual en Turquía. Los últimos años hemos tenido el mismo régimen, con políticas de explotación parecidas al resto del mundo. Millones de trabajadores en todo el planeta han perdido sus trabajos. Abrieron empresas y lugares de entretenimiento para garantizar la ganancia de la clase dominante. Se ha creado una energía conjunta en contra del gobierno, sin embargo esta energía no se ha convertido en un levantamiento social todavía. Nuestro movimiento da una lucha en contra del sistema judicial, y todos los trabajadores luchan en contra de las condiciones de esclavitud y la precariedad en el lugar de trabajo. La juventud se organizó en boicots y en reacciones importantes en contra del régimen. Además también luchan en contra de la destrucción ambiental y en contra de los proyectos mineros. También tenemos que hablar del pueblo kurdo, que son oprimidos y han sido asesinados por décadas. Las políticas del gobierno crean este tipo de atmósfera y el maltrato a los inmigrantes sirios.
Nosotros, los jóvenes revolucionarios seguimos luchando contra todas estas opresiones al pueblo kurdo, contra opresores y explotadores. Luchan por derechos democráticos, por la crisis política y por la crisis económica. Una de cada 4 personas no tiene trabajo, la juventud no ve un futuro aquí. Las condiciones de este sistema expusieron problemas que vienen de hace tiempo, pero también exponen el potencial y la energía que hay por un cambio concreto. Y eso es lo que intentamos hacer en Turquía: luchar contra la influencia de las posiciones burguesas y en contra de la oposición electoralista que no tiene nada que ver con la juventud.
Es necesario organizar en este tiempo con nuestras ideas revolucionarias. El cambio viene de la unidad de la juventud y las luchas. Seguiremos luchando en contra del capitalismo así que invitamos a muchos jóvenes a sumarse a nuestras organizaciones. Mientras la opresión siga en todos los espacios, la revolución va a seguir latente. Es muy importante tener la capacidad de construir y expresar nuestras ideas. Es necesario generar un levantamiento de masas. Es importante que la juventud se siga levantando por todo el mundo.
La pandemia llevó al gobierno a tener mayores políticas de austeridad, y causa que millones de personas se enfrenten al desempleo. Los gobiernos, en medio de la crisis capitalista, están haciendo estas condiciones mucho más difíciles para las juventudes, millones no están ni siquiera insertos en el sistema educativo. El régimen es de los principales enemigos de la juventud y del movimiento de masas. Podemos ser la chispa en esta atmósfera revolucionaria que dispare un verdadero cambio. Si hay una razón para vivir es la realidad de que podemos y de que debemos cambiar esta situación, si no, no hay ninguna salida para la humanidad.
Luis Meiners (LIS, EE.UU.)
En las últimas tres semanas hemos visto una rebelión masiva desarrollándose en contra del sistema racista y en contra de la violencia policial. El racismo tiene raíces muy profundas en la tradición capitalista estadounidense, que fue construido sobre la base de la explotación esclavista. Por eso es que estamos hablando de un racismo sistémico, que tiene raíces profundas en la matriz económica del capitalismo en EEUU. El capitalismo necesita al racismo como una justificación para los blancos poder seguir explotando a una pequeña parte de la población. La lucha en contra del racismo está bien conectada con la lucha en contra del sistema capitalista. Hemos visto todas las contradicciones que tiene el sistema capitalista. Millones de personas perdieron su trabajo, hay una enorme y creciente pobreza. Así es que cientos de miles de personas no tienen acceso a un sistema gratuito de salud. La pandemia ha golpeado de forma mayor a los sectores vulnerables y a las comunidades oprimidas. Para entender por qué esta rebelión se da justo en este momento debemos entender que hay también una crítica tremenda a cómo se manejo la pandemia desde el gobierno de Trump.
Trump ha intentado paralizar esta rebelión con represión, pero ha fracasado totalmente. Ha querido, a través del Partido Demócrata, cooptar el movimiento. Pero el movimiento solamente crece. Hemos tenido en las últimas tres semanas más de 500 huelgas y diferentes acciones de la clase trabajadora. Los trabajadores han logrado paralizar 29 puertos en la última semana. Esta nueva insurrección está liderada por el movimiento de afroamericanos. ¿Qué es lo que viene después? Aquí y en el mundo, la estabilidad ya no existe. Los gobiernos necesitan imponer ajuste a través de represión. Pero está chocando con las enormes rebeliones en contra de la violencia policial y de estas políticas de opresión. Por eso es tan importante que los revolucionarios del mundo podamos construir esta corriente internacional para organizarnos en todo el planeta. Esa es la dirección que seguimos.
Mohamad (Movimiento por el Cambio, Líbano)
En el tiempo donde todos los países y los sistemas capitalistas se están juntando para oprimir al pueblo, tenemos que pelear codo a codo y trabajar juntos porque la lucha de clases es internacional y no podemos dividirnos.
El MJC se fundó en 2015, al calor de las marchas en Beirut, que explotó por la crisis de la basura. El pueblo salió a la calle también por los problemas económicos. Así se fundó esta organización marxista de compañeros que salieron del PC tradicional para construir otra alternativa. Los partidos tradicionales fracasaron. No tenemos el mínimo de servicios accesibles, no se produce nada y se importan la mayoría de las cosas.
En 2019 el gobierno declaró un nuevo ajuste, con fuertes impuestos a whatsapp y al petróleo. Gran parte del pueblo bajo a las calles. El grito más fuerte fue porque hay 30 años de políticas que nos llevaron a esa crisis. El pueblo estaba indignado de todos los partidos. El gobierno retiró los impuestos, pero el reclamo popular era Abajo el gobierno. Pedían un gobierno de transición con planes para frenar la crisis, con reformas opuestas a lo que se hizo por 30 años y una ley electoral porque acá se realizan según la religión.
Después de un mes, pusieron otro jefe de gobierno tratando de mostrar que estaba por fuera de los partidos tradicionales y para trabajar por el pueblo. Pero era cercano a la presidencia y a Hezbolá. Éste es un partido muy fuerte, tiene muchas armas y un rol muy importante en la lucha contra Israel, pero también protege a los corruptos del gobierno.
Los partidos tradicionales hicieron un nuevo gobierno, que desde el primer día aclaramos no tenerle fe. Con la pandemia, la intensidad de las protestas bajó y el gobierno sacó todas las carpas del centro de la ciudad. Con la reapertura estamos viendo manifestaciones aún modestas. Pero luego la moneda nacional cayó más y con ese proceso hubo muchas marchas. Ese colapso va a ser más fuerte y el gobierno no tiene ninguna opción para sacarnos de eso.
Ahora las manifestaciones que empezaron el 16 de octubre están siguiendo. Esa revuelta es una oportunidad para poder acercar más jóvenes a nuestra organización y para decir que nuestra lucha es una lucha de clases. Por eso nuestras acciones eran más intensas enfrente de los bancos y nuestra consigna principal es Abajo el gobierno del capitalismo. Vamos a seguir luchando contra el capitalismo en todo el mundo.
Chaia Ahmed (Unión de Jóvenes Saharauis, Sahara Occidental)
La educación siempre fue fundamental en nuestra lucha, pero debido al coronavirus la única gente que puede hacerlo es con clases on-line. Estamos en un refugio del desierto al sur de Argelia, cuya conexión es mala. Por eso hay retraso educativo. La juventud saharaui pasa años estudiando y luego venimos al refugio donde no hay posibilidades de trabajo.
En las zonas ocupadas, las y los jóvenes son torturados: les violan, les pegan y les matan. Una situación muy difícil, ante un silencio mundial que no da atención a esta causa justa y pacífica. La única solución es el referéndum, poder elegir la vida que queremos, la soberanía en nuestra tierra. El capitalismo nos está haciendo la vida imposible. Hago un llamamiento a todas las organizaciones. Basta ya, son más de 40 años, queremos nuestra libertad.
Haris Qadeer (La Lucha, Cachemira)
En Cachemira estamos en medio de la pandemia, con una crisis política tremenda, que deja un montón de pobreza, desempleo, racismo, fascismo. El peso de la crisis se descarga sobre la clase trabajadora de todo el mundo. Y como pasa en cada crisis, los gobiernos tratan de distraernos. Ahora tratan de inventar un conflicto entre Pakistán e India. El representante de Cachemira intenta distraer a los pueblos mientras aplica una política hostil para precarizar más, como pasa en el resto del mundo.
Creemos que no hay espacio para reformar el capitalismo, ni el neoliberalismo, ni el neofascismo. La única solución depende de que podamos abolir el capitalismo y no sólo en unos pocos lugares, sino en todo el mundo. Sobre todo desde las juventudes, contra la brutalidad, la represión, el ajuste. Por eso invitamos a la clase trabajadora en todo el mundo a seguir dando esta pelea. Para construir el mundo que queremos, sin capitalismo, para las juventudes y la clase trabajadora, sin opresión, para la gente de apie, para los sectores populares. ¡Viva la revolución! ¡Viva la unidad internacional de les revolucionaries!
Jordan Humphreys (Alternativa Socialista, Australia)
De manera general, debería decir que Australia está en una transición. Venimos de una década con problemas que afectan a jóvenes y de años de protestas. Ha habido una gran campaña en contra del gobierno conservador que intentaba desregular la tarifa para los estudiantes. Y ahora las protestas por el cambio climático y los incendios. Sin embargo a pesar de estos problemas, una de las características de la política australiana es la estabilidad. Esto es un gran golpe a la economía del capitalismo aunque no vemos un colapso económico como en 2008. Han habido algunas protestas, pero no al nivel de las de los incendios. El movimiento en este momento es débil. El impacto del coronavirus en Australia está comenzando a cambiar eso. Se reporta que Australia va a ser uno de los países con un mayor impacto por esta recesión global, y muchas personas perderán sus trabajos. Los que trabajan en turismo van a ser afectados, específicamente la gente joven. Y los jefes piden reformas para precarizar a los trabajadores, para garantizar sus propias ganancias.
La juventud está más vulnerada frente a la explotación y la precarización. Uno de los sectores más afectados son las universidades. Ha bajado el número de estudiantes nacionales, han bajado también el nivel de las ganancias y han perdido millones de dólares por esta pandemia. El gobierno hace dos días ha autorizado el aumento de las tarifas un 130%. Los políticos están presionando para que se aprueben recortes de presupuesto en la educación y la juventud está comenzando a darle pelea. Tenemos una base estudiantil bastante radicalizada que se ha construido en los últimos años, así que estamos involucrados en esta campaña en contra del aumento de las tarifas a los universitarios.
También estamos trabajando en la formación marxista revolucionaria y darles una perspectiva política del lugar que toma la clase obrera en una situación revolucionaria. Parece que las cosas comienzan a cambiar acá e internacionalmente. Si vemos la historia de los movimientos radicalizados, después impactaron en Australia. Por ejemplo, el movimiento Black Lives Matter, ha interpelado a un sector de la juventud y tratamos de conectarlo con los problemas de acá. Habiendo construido el marxismo en la juventud durante estos años, podemos comprender las luchas australianas y del mundo. Tratamos de acercarnos a los camaradas de todo el mundo para ver como resuelven y qué políticas se dan en sus situaciones y cuales son las políticas revolucionarias que tenemos que llevar adelante.
Mariano Rosa (MST, Argentina)
En primer lugar, quería transmitirles un especial saludo en nombre de Alejandro Bodart por la Coordinación de la LIS y propiciar un potente evento internacionalista de la juventud. La pandemia está provocando cambios en el mundo y nada será igual. Los capitalistas preparan su salida: más explotación, desocupación y miseria; más racismo, opresión a mujeres y disidencias; más represión estatal y destrucción de la naturaleza.
Una pregunta que muchos se hacían era «si la pandemia iba a congelar las luchas, rebeliones y revoluciones. ¡Y llegó la rebelión en el corazón del imperio, en EEUU para contestarla! ¡Y volvieron a las calles con furia las masas del Líbano, en Francia, en Brasil, y en toda América Latina empiezan a moverse los pueblos; nuestras luchas no se toman cuarentena!
Destacamos el protagonismo de la juventud: lucha ocupando este presente y se prepara para construir otro futuro, opuesto al que le puede ofrecer el capitalismo.
Los que mandan en el mundo nos quieren hacer creer que hay una versión buena de capitalismo. Que lo que está fracasando es la versión «neoliberal». Pero que existe un modelo «progresista», «humano». La típica campaña ideológica en momentos de crisis para confundir a la juventud que se radicaliza, que es instintivamente anticapitalista por su experiencia, para que no adhiera a las ideas del cambio social, de la revolución, del socialismo. Pero lo único que tienen para ofrecernos son discursos. Tienen miedo, por eso resucitan las viejas ideas reformistas del capitalismo con rostro humano. Esa es la verdadera utopía, la lucha por cambiar el mundo de base, es la más realista de todas las propuestas. Y ese es el principal propósito que tenemos para plantear: dar vuelta absolutamente todo.
Queremos proponer a este Gran Encuentro Internacional, varias ideas para discutir. Así como la juventud está siendo protagonista de las principales rebeliones en el mundo, creemos que tiene que ser protagonista en organizarse políticamente, por fuera de todo lo conocido, con las banderas de nuestras principales luchas.
La lucha contra la precarización laboral, en defensa de la educación pública, contra el racismo, contra las opresiones, nacionales y principalmente, contra de las opresiones hacia las mujeres y disidencias. Incorporar la bandera contra toda represión estatal y las expresiones de fascismo. Luchar contra la depredación de la naturaleza del modelo capitalista de producción y consumo. El apoyo a las luchas obreras y populares, internacionalista, para unir por encima de las fronteras, lo que los capitalistas quieren dividir.
Estas banderas pueden ser la base de un verdadero programa para reorganizar todo sobre bases nuevas y construir organizaciones militantes en cada región del mundo y una enorme organización internacional, haciendo de la LIS punto de partida a una verdadera herramienta de todos los explotados y oprimidos.
Nuestra organización internacional está abierta para todas y todos. Hay muchos jóvenes independientes que están participando y les queremos proponer estos desafíos y construir juntos.
Alexandre Pacheco (Lucha Socialista, Brasil)
La pandemia acelera un proceso que ya venía, de crisis económica, política, social y ambiental, aumentando la desigualdad. Y estamos en el peor momento de la crisis ambiental. Las poblaciones indígenas mueren por coronavirus y el Amazonas es devastado. El gobierno de Bolsonaro vive de crisis en crisis, ya cayeron 12 ministros y su quiebra es muy posible.
Ha habido luchas inmensas pese a las condiciones que impone la pandemia. Si no fuera por eso, por la fuerza del pueblo movilizado Bolsonaro ya habría caído. Queremos fuera Bolsonaro y fuera su vice Moreau. Los gobiernos que pasaron, incluso con promesas como el PT, ninguno aplicó un programa que permitiera un cambio significativo. Sólo será con un gobierno de los trabajadores. ¡Marielle Franco y George Floyd, presentes!
Verónica O’Kelly (Alternativa Socialista, Brasil)
“El pueblo brasilero se despertó”, escribimos en una nota. y de verdad es muy emocionante ver cómo el miliciano, xenófobo, machista y racista Bolsonaro está por caer. Y la pregunta es por qué no cae. Una vez más, la razón está en las direcciones. El PT, que dirige gran parte de las direcciones sindicales y principales centrales, apuesta a la salida electoral. Esa es una de las razones principales y por eso hoy es tan necesario poner en pie una alternativa política de los trabajadores y trabajadoras, feminista, anticapitalista y ecosocialista.
Conchi Martínez (Socialismo y Libertad, Estado español)
Los gobiernos del Partido Popular, ahora del PSOE con Unidas Podemos, los partidos como Ciudadanos o la ultraderecha de Vox, tienen diferencias, pero las eliminan a la hora de defender al régimen, recortar libertades y negar la autodeterminación catalana.
España integra la UE, un bloque imperialista al servicio de una minoría de bancos y empresarios. Con la pandemia, los jóvenes y la población lo sufrimos en carne propia. La UE también se ensaña con los inmigrantes. Repudiamos los discursos xenófobos y racistas, y consideramos a los inmigrantes como nuestros hermanos y hermanas. Contra todo este desastre capitalista nos organizamos en SOL y la LIS.
Maura Gálvez Bernabé (Movimiento Anticapitalista, Chile)
Hace ocho meses, la rebelión vino a cuestionar el andamiaje de los últimos 30 años de herencia dictatorial. El desborde de las calles fue permanente, con autoorganización en asambleas. El proceso presionó a fondo a toda la institucionalidad del capitalismo y a sus representantes: la socialdemocracia y la derecha, junto a sus nuevos socios de la izquierda parlamentaria, el PC y el Frente Amplio. Nuestra joven organización se forjó al calor de la rebelión, dando saltos a nivel de cantidad y fortaleza militante, interviniendo en las asambleas, estando en las calles junto a la juventud que se enfrentaba en primera línea a las fuerzas represivas. Llegó la hora de romper con todo lo viejo. Hay que fortalecer nuestras herramientas políticas; con el impulso de nuestra organización internacional. Queremos invitarles a que se sumen a esta tarea. Para luchar, luchar con rabia hasta triunfar.
Juliana Hernández (Impulso Socialista, Colombia)
Por sus políticas neoliberales, el gobierno paramilitar de Duque tiene una desaprobación de 71%. Su paquetazo combina una reforma tributaria, otra laboral y otra pensional. Además, hay asesinatos de líderes y lideresas sociales, y retroceso en lo conseguido en los acuerdos de paz con las FARC. Se podría avanzar mucho más si la burocracia sindical, estudiantil y las direcciones reformistas no se encargaran de impedirlo. Por eso necesitamos avanzar en la construcción de una dirección revolucionaria, un partido encabezado por la clase trabajadora, las y los campesinos pobres, las comunidades negra e indígena y donde las mujeres y disidencias sexuales podamos militar un feminismo para el 99%. Creemos que es posible. Nosotros somos la prueba viviente: Impulso Socialista está construido por jóvenes luchadores decididos en construir esta alternativa tan necesaria. Y esperamos seguir aprendiendo y trabajando codo a codo con esa construcción internacional que es la LIS.
Karen Ochoa (Activista y referente de la Universidad Central del Ecuador)
La situación del mundo, el machismo, racismo, xenofobia, no ocurren por malas decisiones de nuestros gobiernos: es la consecuencia del sistema capitalista. Acá los estudiantes vimos la necesidad de repotenciar la educación. Desde 2017 las medidas neoliberales han sido las más salvajes, con el pago de la deuda al FMI como prioridad.
Lo estudiantes fuimos los primeros en salir a manifestarnos por encima de las medidas de aislamiento, y luego se unieron trabajadores, servidores públicos, manifestantes. La situación de los sectores populares empeoró y eso encendió la chispa de revolución desde octubre de 2019. La crisis se repetirá hasta que no redirijamos la mirada hacia la cuestión social. Para eso es necesario que empecemos a tejer redes y me parece super importante este espacio creado por la LIS.
Rocío Uceda (La Commune, Francia)
Francia es un país en total crisis sanitaria y económica que ya cuenta 30 mil muertes oficiales y podrían ser más. Hay ajuste, despidos, una salud en crisis, hambre y miseria. Culminó 2019 y empezó 2020 con una huelga general de más de 60 días, de las más grandes. Este país de los chalecos amarillos lucha desde hace meses.
Este mes hubo movilizaciones masivas por Floyd, por derechos del personal de la salud y volvieron las marchas de los sábados. Es la respuesta al gobierno de Macron, en su discusión con Merkel, que tienen un plan de precarización y ajuste para la clase trabajadora y la juventud de toda la UE.
La situación de la juventud es complicada. Más del 60% de quienes estudian lo sostienen con su trabajo. El “plan de continuidad pedagógica” empeoró las condiciones de estudio. Y recrudece la represión, sobre todo en los barrios empobrecidos. Ante la decadencia capitalista, las centrales sindicales y estudiantiles y los partidos están al servicio de la contención social. Nos comprometemos a la construcción de la LIS y de la juventud de La Comuna.
Elmer Rosales (Alternativa Anticapitalista, Nicaragua)
En 2018, las juventudes nos levantamos en protestas contra el régimen dictatorial de Ortega y Murillo. Hoy, en pleno pico de la pandemia, el gobierno sigue negando la letalidad del virus. Llama a sus militantes a reuniones masivas, acosan y despiden personal médico; más del 70% de la población ve disminuir sus ya precarios salarios; los patrones suspenden sin goce de salarios. Además, nos siguen depredando y asesinando a nuestras hermanas y hermanos campesinos, indígenas y afrodescendientes; más de 40 mujeres han sido asesinadas por la violencia machista en 2020 y hay más de 86 presos políticos.
Pero seguimos en pie. Tenemos todo por ganar y ninguna solución vendrá de los gobiernos capitalistas. Organicémonos por una alternativa política internacionalista, ecosocialista, feminista, democrática, para poder darle vuelta todo. Es inmenso nuestro reto y nuestra pasión.
Nicolás Germanier (Alternativa Socialista, Paraguay)
La juventud soporta desde hace varios años, de gobiernos colorados y liberales e incluso del falso progresismo, una precarización laboral progresiva, pérdida de derechos sindicales y despidos masivos. El gobierno utilizó la pandemia para lanzar una campaña nacionalista, sacar el ejército a las calles y la brutalidad policial. Ante esta situación aparecen las ollas populares. La lucha contra el hambre conmueve al país y casi 45.000 personas comen allí. Jóvenes de distintos movimientos y partidos, y muchos independientes, salen a apoyar las ollas, también nosotros.El 22 de junio se hace una movilización nacional en el marco de una histórica alianza de todas las centrales obreras, unificando todos los puntos y vamos a participar. La juventud va a estar al frente y nosotros con ellos y el pueblo trabajador. A muchos jóvenes las luchas de estos años los empujaron a ser militantes resueltos. Alternativa Socialista se formó con jóvenes que salimos a luchar por causas justas y confiamos que si el presente es de lucha el futuro es nuestro.
Sergey Rozanov (LIS, Ucrania)
Represento a Ucrania dentro de la LIS. Ha habido un levantamiento importante de estudiantes y profesionales universitarios. La educación pública no tiene fondos para implementar sus programas. Uno de los principales problemas de la gente joven es que cada año cientos o miles de universitarios no encuentran trabajo.
Hay abogados obligados a trabajar en McDonald’s o con un salario muy bajo o precarizados y con la pandemia se han perdido muchísimos empleos y se violan los derechos laborales.
A la vez, el sentimiento nacionalista de la burguesía se nota en la educación. Glorifican al capitalismo ucraniano. Los héroes en los libros para niños son demócratas o nacionalistas de los 60 y 80. Muchos revolucionarios comunistas son nombrados como traidores. El mayor objetivo de la política es ganar cada vez más dinero.
En conclusión, el mercado y la economía, este patriotismo y nacionalismo, sólo empeoran la vida de los jóvenes, destruyen la educación y dan lugar a la discriminación social.