Otra más de la CGT en pandemia y van…
Además de reunirse virtualmente con los principales capitalistas del país, esos que aparecen en la Revista Forbes como que tienen en el exterior cerca de 50.000 millones de dólares, para pedir en conjunto que le bajen los impuestos, el 23 de julio la conducción de la CGT aceptó prolongar otra rebaja, esta vez en los salarios de los trabajadores suspendidos.
Como se ve, la semana que terminó fue “agitada” para estos dirigentes.
Firmaron un nuevo cheque en blanco a las cámaras empresarias para que los trabajadores que dicen representar, que además de la angustia de la pandemia y la suspensión de sus tareas, resignen un 25% de salario por un periodo indeterminado que podría prolongarse automáticamente mientras duren las medidas de aislamiento o el cierre parcial o total de las empresas en las que trabajan. En principio este acuerdo no necesita de homologación y regirá durante agosto y septiembre.
Pero el acuerdo que acaba de renovarse está vigente desde el 1 de abril y ya lleva cuatro meses de aplicación. Para evitar tener que legalizarlo frente al Ministerio de Trabajo de la nación, la última extensión no le puso fecha de vencimiento.
Además del millón de despidos que según la consultora Ecolatina y el observatorio de la UCA se han producido desde el inicio de año, 1.200.000 trabajadores vienen sufriendo suspensiones y por lo tanto cobrando un cuarto menos de ingresos desde los meses de abril y mayo.
En realidad las patronales sólo estarían haciéndose cargo de un 25% total de los salarios ya que el programa ATP instrumentado por el gobierno se hace cargo de una parte sustancial de los salarios de los trabajadores. Así mientras entre todos cubrimos el 50% de los salarios de los que deben hacerse cargo gente como Bulgheroni, Roca o Magneto entre otros, con esta ayudita de sus amigos de la CGT los empresarios apenas tienen que desembolsar un 25% de la carga salarial que le provocan sus trabajadores.
Un año donde prácticamente no hubo paritarias. Con una inflación que difícilmente sea menor al 40%, donde la amenaza de cierres y despidos planean sobre las familias trabajadores, la CGT continúa dando muestras cabales de su enorme disposición de apoyo a las patronales. Es que ellos sí tienen una larga tradición y experiencia en la entrega de los derechos de los trabajadores.
Carlos Miranda