Córdoba marchó contra el Abuso Sexual Infantil
El miércoles 25 se llevó a cabo la primera movilización contra el Abuso sexual durante la Infancia (ASI) en Córdoba.
La marcha, que comenzó en Colón y General Paz y se dirigió hasta el Patio Olmos, convocó a cerca de 500 personas y fue organizada por la asamblea Ni Una Menos en conjunto con las familias que impulsan estos reclamos.
«Sus llantos ahora serán nuestros gritos. Basta de Abuso sexual en la infancia y adolescencia. El Estado es Responsable» decía la bandera que encabezaba la movilización, sostenida por familiares de víctimas de diferentes casos de abuso sexual infantil de nuestra provincia: madres y padres de niñes de Collegium, de El Hornerito de Barrio Villa Corina y la mamá de Sathya, una adolescente que se suicidó el año pasado porque la justicia no actuaba ante la denuncia que se animó a realizar contra su padre[1].
Entre los principales reclamos de la convocatoria estuvo la exigencia de la destitución de Jueces y Fiscales Machistas, dirigido especialmente contra Alicia Chirino e Ingrid Vago que son quienes están a cargo de la Fiscalía de Instrucción de Delitos contra la Integridad Sexual y han sido las encargadas de archivar la mayoría de las causas de abuso de nuestra provincia, sobre todo en estos casos resonantes.
Las cifras alarmantes del ASI
- Según la Organización Mundial de la Salud 1 de cada 4 niñas y 1 de cada 13 niños han sufrido abuso.
- Según las estadísticas del 0800 nacional, perteneciente al Programa “Las víctimas contra las violencias”[2], el 73% de los abusadores pertenecen al ámbito familiar de la víctima y el 89% son varones. El 53% de los casos ocurre dentro de la propia casa.
- En Córdoba solo el 3.8% de las causas llega a juicio.
La carta machista del falso SAP
El bajo nivel de elevación a juicio de las causas o el alto nivel de archivo de las mismas, y en consecuencia, la impunidad de los agresores, pederastas y abusadores, se debe a la aplicación de los argumentos de una pseudo teoría: el SAP.
El Síndrome de Alienación Parental es una teoría rechazada por la psicología, las ciencias jurídicas y por todas las organizaciones internacionales, pero cuyos argumentos y formas son frecuentemente utilizadas, de manera especialmente tendenciosa, en el marco de la aplicación machista y patriarcal de la justicia, para deslegitimar la voz de niños, niñas y adolescentes en casos de abuso.
Según esta teoría, uno de los padres -en general las madres- realiza un “lavado de cerebro” para que los niños, niñas y adolescentes acusen a sus padres de abuso. Con estos argumentos se mantiene la impunidad y la falta de acceso a la justicia. No sólo se perpetúan los abusos hacia los niños, niñas y adolescentes, sino que se ejerce violencia hacia las mujeres al tratarlas de “vengativas” o “revanchistas” por denunciar el abuso que sufren sus hijes.
Con el impulso de organizaciones feministas, la legisladora Luciana Echevarría, del MST en el FITU, presentó un proyecto para rechazar el uso del SAP y todos los argumentos que lo componen en el ámbito Judicial.
Estremecen los relatos del abuso, indignan la violencia institucional y la impunidad, pero también conmueven la decisión y el coraje con el que estas familias salen a dar pelea. Desde el movimiento feminista y la izquierda abrazamos esta causa y nos organizamos exigiendo justicia y cambios de fondo para frenar toda esta cadena de violencias.
Maru Acosta
[1] https://eldoce.tv/el-doce-y-vos/piden-justicia-tras-suicidio-una-joven-19-anos-violada-por-su-padre-sathya-aldana_95017
[2] https://www.argentina.gob.ar/abusosexualinfantil/estadisticas