Toma en Guernica: “Solo quiero un lugar para mis hijos»
En el día de ayer salió publicado en Infobae, una entrevista a Miguel Angel Pichetto, referente de Juntos por el Cambio, donde en referencia a las tomas de tierra, entre otras cosas dice: “es peligroso pensar que las tomas son por necesidad”. Este personaje derechista, político privilegiado acostumbrado a una vida de lujos al amparo del poder político, alienta de esta manera una salida represiva frente a una crisis social que pone en evidencia la falta de políticas de Estado frente a la pobreza creciente y la falta de vivienda digna para millones.
Lo que dice Pichetto indigna. Pero no se diferencia mucho de las declaraciones de un Berni, Frederic y otros funcionarios del Frente de Todos, que han unificado el mensaje los últimos días, declarando ilegal toda toma y anunciando que serán desalojados, es decir, serán duramente reprimidos. Ese duro mensaje, no se les escucha nunca hacia grandes empresas corporaciones, empresarios y la Iglesia que tienen cientos de miles de hectáreas y propiedades a su nombre, muchas de ellas compradas por dos pesos en oscuros negociados con funcionarios de Estado. Esos son los verdaderos “ocupas” a quienes habría que desalojar para poner todas esas tierras en función de un plan nacional de vivienda y trabajo digno. Pero no, todos ellos viven al amparo de los gobiernos, y siempre encuentran un Berni o Pichetto que centre el discurso represivo hacia miles de pobres que, desesperados, muchas veces tienen que ir hacia un terreno vacío, con su bolso e hijos a cuestas, a la búsqueda de un lugar descampado y frío donde tratar de vivir.
En los últimos meses, al calor de la crisis sanitaria, económica y social pegó un salto cuantitativo la toma de tierras y la lucha de miles de personas por acceder a un derecho esencial como es el derecho a una vivienda digna. Los medios de comunicación masivos vienen reflejando la postura Anti-tomas de todo el arco político tradicional que propone resolver esta problemática a punta de garrote y represión.
Hoy la toma más grande del país y la que más visibilidad logró, es la que están realizando más de 2500 familias en Guernica, partido de Presidente Perón, en zona sur del GBA. Esta toma abarca 100 hectáreas o cuatro barrios popularmente conocidos como La unión, San Martin, 20 de Junio y La lucha, que al parecer la Intendenta del FR-FdT Blanca Cantero quiere utilizar esas tierras para el negocio inmobiliario y no para resolver el problema habitacional en su distrito.
Reflejando una situación que es igual a la que viven miles de familias desesperadas, nos llegó este mensaje de Soledad, desde adentro del asentamiento de Guernica, donde varias miles de personas hoy son asediadas por la policía bonaerense. Ella, cuya familia integra el Movimiento Sin Trabajo “Teresa Vive” nos dice lo siguiente: “Hola. Mi nombre es Soledad. Quería contarles un poco lo que nos está pasando. Soy mamá soltera, mi marido falleció hace dos, desde ese momento tuve que salir a buscar trabajo. Empecé limpiando casas para poder pagar el alquiler y poder comer. Cuando empezó lo de la cuarentena se me terminó el trabajo y me echaron del alquiler, me encontré totalmente en la calle con mis dos nenes. Una vecina me aviso de unos terrenos supuestamente fiscales. Cómo pude me lleve una carpa y me instalé. Solo quiero un lugar para mis hijos. El municipio de Presidente Perón se enteró de las familias que ocupamos el lugar y mandó a la policía a detener todos los días en las entradas del predio. El municipio quiere construir unas canchas de golf y nosotros solo queremos un pedazo de tierra para vivir”.
Tal como se refleja en este mensaje, también lo denuncian las demás persona en la toma, la única respuesta concreta que recibieron por parte de las autoridades del municipio son la presencia de cientos de policías en los alrededores para hostigar a la gente e impedir que les llegue comida, materiales o herramientas para el mejoramiento en el acampe, por eso es que en los últimos días aumentaron la detención de personas y la cantidad de policías tal como se lo pidió Blanca Cantero a Kicillof.
Soledad recibe la solidaridad y el apoyo de su familia así como también el de los compañeros de nuestro movimiento. Como pueden, superando los obstáculos represivos, mantienen contacto con ella tratando de que no le falten alimentos ni a Sole ni a sus hijos. Lo que debiera garantizar el Estado, como muchas otras veces, lo hace la solidaridad popular.
Frente a esta crisis social, solo personajes nefasto de las castas políticas que nos gobiernan, pueden pasearse por los medios reclamando represión o diciendo que “no hay una necesidad”. Sencillamente dan asco con su discurso de clase burguesa acomodada.
Lo que estamos viendo es la realidad, es la salida a la luz de un drama social masivo; la falta de vivienda, de trabajo, de alimentos para una vida digna. Es la situación desesperante la que lleva a una madre o a un padre sin trabajo, a arriesgarse a poner una carpa o un techo precario armado a las apuradas, en medio de una tierra vacía, sabiendo que la represión puede llegar en cualquier momento. Este drama masivo hay que atender, más allá que, como siempre sucede, aparezcan algunos tramposos oportunistas y mafiosos que usan la crisis social para hacer negocios.
Por eso, desde el MST “Teresa Vive” este jueves vamos a ser parte de la movilización a las puertas de la municipalidad para exigirles a las autoridades del municipio y de la gobernación que cesen con las amenazas y amedrentamiento a estas familias, que se mantenga la mesa de diálogo y decirles no al desalojo. Como así también, nos parece importante exigir que se incorpore a todas las familias a un plan de asistencia social urgente y de ingreso a programas de trabajo genuino.
Nahuel Orellana