Reporte Covid: 12.625 casos nuevos positivos y 424 personas fallecidas.

Según el Ministerio de Salud de la Nación, en el día de hoy se contabilizaron 12.625 casos nuevos positivos de Covid 19 y 424 personas fallecidas.

El total de infectados en todo el país asciende a 664.799. Los fallecidos suman de 14.376 fallecidos.

El 66,2% de los contagiados corresponde a la circulación comunitaria.  Actualmente hay 3.511 personas internadas en Unidades de Terapia Intensiva. La ocupación de camas en dichas unidades es del 60% a nivel nacional y 65,6% en el AMBA.

Las decisiones del gobierno argentino no fueron muy dispares de las tomadas por los gobiernos del mundo: privilegiar las ganancias por encima de la salud, flexibilizando así el aislamiento cada día y abriendo actividades que de esenciales tienen poco o nada. La circulación de las personas que debieron salir a trabajar provocó una rápida propagación del virus y queda más que claro con la inmensa cantidad de contagiados: más de 600 mil. No hubo medidas económicas serias que garantizaran que las familias pudiesen quedarse en sus casas, así cuentapropistas, empleados de comercio, trabajadores de la construcción y obreros de más del 90 % de fábricas abiertas salieron a las calles sin remedio a enfrentar un virus que no perdona. Al mismo tiempo se negaron a hacer testeos masivos y no se fortaleció el sistema de salud que fue desfinanciado por éste y todos los gobiernos anteriores. El proyecto de unir el sistema público y privado en uno solo duró sólo unos minutos porque inmediatamente “se llamó al orden” al Ministro Ginés y jamás se volvió a hablar de ello. Hay provincias con un índice de ocupación de camas de terapia intensiva que van desde el 85 al 100%. Ya se han presentado dramáticas situaciones en las cuales son los médicos quienes deben elegir a quién salvan y a quien condenan, porque los respiradores son insuficientes.

Son los y las trabajadores los que todos los días ponen el cuerpo en la calle y en los puestos de trabajo y quedan así a expensas de un virus potente, que hace carne de cañón de cuerpos estresados, mal alimentados y cansados.

Según estudios realizados por la Universidad Tres de Febrero, como resultado del promedio hay un contagio cada 6 minutos y medio en algún lugar del país y no se ha llegado aún al pico.

La cantidad de muertos alrededor del mundo a causa de la pandemia de coronavirus, que se originó a fines del año pasado en China, ronda el millón de personas y los contagiados son más de 30 millones. Estados Unidos lidera el ranking de naciones con mayor cantidad de casos (cerca 7 millones), le siguen India y Brasil. América es el continente con mayor número de infectados y víctimas fatales.

Argentina es el cuarto país a nivel mundial en cuanto a nivel de fallecidos y está en el puesto número 10 de países con mayor cantidad de infectados. Hay provincias muy complicadas, como el caso de Córdoba, Tucumán, Mendoza, Santa Fe, Jujuy, Río Negro y Neuquén que ya están al borde del colapso tanto en el sistema público como el privado.

El Ministro Ginés García, presentó hoy las pruebas de antígenos para SARS-CoV-2 que permitirán obtener un resultado entre 15 a 20 minutos en personas que presenten síntomas compatibles a la enfermedad COVID-19. Pero sigue lejos de los test masivos que se necesitan y sólo se realizan si se presentan síntomas. No alcanza.

El personal de salud fallecido asciende a más 120, siendo más de 32.000 los que han contraído el virus en todo el país. Informe que data de más de una semana atrás. El número crece exponencialmente poniendo en peligro la atención en el sistema. El cansancio extremo hace que nuestros trabajadores hospitalarios estén al borde de sus fuerzas, ante jornadas largas y extenuantes, con dos o más guardias por semana para reemplazar a los compañeros que están en cuarentena u hospitalizados. También quienes tienen poliempleo, que debido a los magros salarios hay por ejemplo enfermeras que tienen 4 ó 5 empleos, como lo expusieron en el acto llevado a cabo el 17 de este mes por el sindicalismo combativo y parte de la izquierda revolucionaria. El personal de enfermería es el más afectado: 30 %, médicos 20% y luego siguen camillerxs y personal de limpieza.

¿Y el aumento para los trabajadores de la salud?

De eso no se habla y de hecho las enfermeras que intentaron entregar un petitorio en la legislatura porteña fueron duramente reprimidas y hubo varias trabajadoras lesionadas en la cabeza. Sí hubo dinero para engrosar fuertemente los bolsillos de la policía, a quienes necesita para reprimir cualquier resistencia o protesta de un pueblo cansado de que los gobiernos prometan y no cumplan. ¿De qué otra manera puede entrar el ajuste si no es con una desenfrenada represión?

Nueve laboratorios son los que están en la loca carrera de quién concluye antes la vacuna y puede sacar mejor tajada. El gigante farmacéutico AstraZeneca junto a la Universidad de Oxford en Gran Betaña son los que venderán la vacuna a Latinoamérica, pero a pesar de que Fernández anunció que estaría para fin de año, los científicos corrigieron esto, ya que aún faltan muchos meses más de lo esperado.

El reporte nacional es el siguiente:

Buenos Aires (5389), CABA (929), Catamarca (6), Chaco(86), Chubut (203),  Córdoba(1435),  Corrientes(-45), Entre Ríos(118), Formosa (1), Jujuy (230), La Pampa(15), La Rioja (48), Mendoza(528), Misiones (4), Neuquén (176), Río Negro(272), Salta(347), San Juan(19), San Luis(62), Santa Cruz(114), Santa Fe(1682), Santiago del Estero(108),  Tierra del Fuego(79) y Tucumán(819).

A 187 días del comienzo de la cuarentena desde el MST seguimos insistiendo denodadamente que es imperioso que el gobierno tome las medidas económicas pertinentes que necesita la población para poder quedarse en casa y realizar así una cuarentena real con las necesidades vitales cubiertas, sin la preocupación de salir a la calle a ganar el sustento diario. Sin dilaciones se debe atacar de lleno la curva de contagios, cerrando toda actividad no esencial, testeando ampliamente y unificando el sistema de salud público y privado en uno solo de excelencia. Triplicar el presupuesto de salud en todas las jurisdicciones, subsidio universal al desocupado y monotributista de $ 50.000, prohibición de despidos con penalizaciones fuertes para quienes no lo respeten. Aumento de salario urgente para los y las trabajadoras de salud, aumentar los planteles sanitarios, elementos suficientes de protección, licencias para el personal de riesgo y reconversión industrial para proveer insumos y respiradores. Todas acciones más que posibles, si dejan de pagar la fraudulenta deuda o ponen un serio impuesto a la riqueza, no el chiste del “aporte solidario” a sólo 12.000 personas. Basta de mentiras y falsas soluciones. Las responsabilidades no son individuales, son del Estado. Estado ausente para les trabajadores y bien visible para las corporaciones y los capitalistas deberá dar cuenta de todas las acciones y de las omisiones también. “Lo que no se invierte en salud, se paga con muertes” y esto es rigurosamente cierto.

 

  Ingrid Fernández