Absolvieron a la joven trans Luz Aimé Díaz

El viernes 2 de octubre, el Tribunal Oral Criminal N°8 porteño absolvió a Luz, quien pasó dos años injustamente detenida por un asesinato que no cometió. Un triunfo del reclamo de la comunidad LGBTI+.

Hasta el jueves, Luz ya contaba con dos años sin libertad. Luego de cumplir ocho meses de prisión en el penal de Ezeiza, le fue otorgada la prisión domiciliaria por cuestiones de salud en el Hotel Gondolín[1]. Desde ese momento, la lucha por su absolución se transformó en una campaña que integramos junto a numerosas agrupaciones de nuestra comunidad.

En julio de 2018 Aimé fue acusada de “robo agravado y privación de la libertad agravada”. En realidad había sido contratada por dos hombres para realizar un servicio sexual en Palermo. Lo que ella no sabía es que dichas personas antes habían asesinado a un hombre de 50 años, cuyo cuerpo se encontraba en la habitación contigua. Por una grabación que sólo muestra el ingreso de Luz al edificio, la justicia la acusó de un crimen que no cometió.

La defensa, encabezada por la abogada Luciana Sánchez, logró apartar del caso a dos jueces transodiantes que formaban parte del tribunal. En el expediente, habían descripto a Luz como “el imputado con tendencias homosexuales”. Mediante un supuesto análisis religioso también llegaron a decir que es una persona con una “inclinación objetivamente desordenada”.

El juicio iniciado el 11 de septiembre resolvió, luego de cuatro instancias, su absolución. “Siendo las 13.50, el Tribunal resuelve absolver y ordenar la libertad de la señorita Luz Aimé Díaz y que se le retire el dispositivo electrónico”[2]. Una vez más, la presión de nuestro colectivo logró arrancarle a esta justicia capitalista y patriarcal un fallo justo.

 

¡Ley integral trans ya!

 

En el Congreso se inició el debate sobre proyectos de ley hacia la comunidad travesti-trans. El cupo laboral decretado por el gobierno es insuficiente. Como la exclusión a la comunidad trans es integral, desde la niñez hasta la adultez (ya que el promedio de vida no supera los 40 años), reclamamos una ley de inclusión integral como la que presentó la FALGBT.

El caso de Luz es una razón más que impulsa nuestra lucha. Es salteña y tiene 27 años. Desde que tiene 13 años tuvo que acudir a la prostitución para sobrevivir. Estando así más expuesta a la violencia, fue víctima de tres ataques transodiantes que la dejaron ciega de un ojo. A sus 20 años vino a Buenos Aires y estudió en el Bachillerato Trans Mocha Celis.

Se vuelve urgente entonces cambiar la realidad de las futuras generaciones y que el Estado repare los daños que provoca en las vidas de nuestras compañeras por acción u omisión. Celebramos este triunfo y seguimos batallando por una solución integral, como parte de nuestra pelea por un cambio social de fondo.

 

Micaela Escobar

Libre Diversidad-MST

[1] Hotel-cooperativa en CABA por y para travestis y mujeres trans.

[2] Juez Alejandro Sañudo, presidente del Tribunal Oral en lo Criminal y Correccional N°8.