Multitudinaria marea feminista del 8M: mujeres en revolución
Hubo paros y acciones en más de 60 países. Las marchas en la Argentina dejaron atrás toda previsión. Junto al no al ajuste, el reclamo central fue el aborto legal. No faltaron ni faltan debates. Desde Juntas y a la Izquierda y el MST aportamos fuertes columnas en todo el país. ¡Venite a militar en nuestra organización, para lograr la ley de aborto y avanzar juntas en la batalla contra este sistema capitalista y patriarcal!
Los diarios hablan de 200 mil a medio millón en la Ciudad de Buenos Aires, desbordando toda la Avenida de Mayo desde la Plaza hasta el Congreso con una ola verde y violeta. A eso sumale Córdoba, Rosario, Mendoza, Tucumán, el país entero. Imposible saber la cifra exacta, pero toda la Argentina tembló.
Fuimos miles y miles de mujeres de toda edad, con mayoría de jóvenes. Con carteles y banderas, con los rostros y cuerpos pintados, unas más alegres, otras más combativas, unas más independientes, otras más organizadas, todas empoderadas. Este 8M confirmó que acá ya no hay vuelta atrás para la marea feminista.
Entre esa gran diversidad de presencias todas coincidimos en poner el cuerpo en la calle el 8M, pero no todas fuimos por los mismos reclamos.
Burocracia sindical: anti-aborto y pro-Iglesia
Cuando en la asamblea preparatoria del 8M en CABA apareció una “comisión sindical” montada bajo cuerda ya fue una mala señal. Que encima aparatearan el orden de la marcha poniendo a los sindicatos antes que las organizaciones feministas empeoró el clima. Y con su conferencia de prensa por separado y su cita adelante de la cabecera unitaria terminaron de marcar las diferencias: la convocatoria de la CGT, las dos CTA, la Corriente Federal, el trío “San Cayetano” (CTEP, Barrios de Pie y CCC) y otros socios1 critica el ajuste macrista… ¡pero no reclama el aborto legal!
La razón de esa omisión grosera no es secreta: toda la burocracia sindical tiene lazos estructurales no sólo con el PJ, el massismo y el FPV -fuerzas que en mayor o menor medida se oponen al derecho al aborto-, sino también con la cúpula de la Iglesia y el Papa. O sea, anteponen su pertenencia o sus acuerdos con sectores retrógrados a la pelea central de las mujeres hoy. Y lo mismo pasó en otras ciudades del interior. Y lo mismo con los siete tuits de Cristina el 8M: de aborto, nada. En algunas asambleas previas, sectores K hasta propusieron que los textos del 8M no incluyan críticas a la Iglesia ni al Papa. Lamentablemente, en el tema aborto, toda esta dirigencia quedó y queda a la derecha de Macri.
Llamamos a las compañeras de estas organizaciones a exigir que se cambie y se plantee lo que corresponde: el derecho al aborto.
Anti-hombres: funcionales al patriarcado
En las asambleas preparatorias del 8M en Santa Fe, Rosario y otras ciudades hubo otra polémica: algunos grupos, como Mala Junta-Patria Grande, plantearon excluir a los varones de las marchas.
Lo vemos muy errado. Desde ya, las protagonistas en las luchas feministas somos las mujeres y los hombres acompañan. Pero considerarlos enemigos o casi, debilita nuestra propia lucha y entonces, de hecho, favorece al patriarcado.
Nuestra divergencia de fondo es que para esos grupos u otros, “autonomistas” o “anarquistas”, el enemigo es sólo el patriarcado, que de una u otra manera encarnaría todo varón por origen genético. No ven que el enemigo de nuestros derechos es el sistema capitalista y patriarcal, que es indivisible. Eso implica dos cosas: primero, que a la lucha feminista la fortalece tener de aliado a todo sector que enfrente al sistema, y segundo, que sin compartir la lucha con los hombres es imposible derrotar a este sistema explotador y opresor. Ciegamente, a esos grupos les da igual un varón machista que uno antipatriarcal.
Ese divisionismo es como decir que alguien blanco y de ojos claros (¿Santiago Maldonado?) no debe apoyar la lucha de los pueblos originarios porque pertenece a la raza colonizadora. O que las mujeres y los hombres heterosexuales no deben apoyar la lucha LGBTI porque son parte del modelo heteronormativo binario. O que sectores medios o estudiantiles no deben apoyar las luchas obreras por ser de otra clase social. O que el pueblo trabajador y la juventud de las grandes potencias no deben apoyar las luchas antiimperialistas porque pertenecen al imperio opresor. ¡Es ignorar la realidad de todos los avances logrados a lo largo de la historia!
Sumate a Juntas y a la Izquierda y el MST
Nuestro feminismo es antipatriarcal, anticlerical, anticapitalista e inclusivo de las disidencias sexuales y de género. Por eso también el 7M, día de la visibilidad lésbica, con nuestra agrupación Libre Diversidad participamos de distintas iniciativas en todo el país. Sabemos trabajar con unidad en la diversidad y militamos con debate constructivo y acción colectiva. También hacemos cursos de formación sobre feminismo, marxismo, trotskismo y otros temas. Somos parte de la construcción de un partido revolucionario precisamente porque queremos revolucionar toda esta sociedad y avanzar al socialismo.
En lo inmediato, en Buenos Aires y en todos lados estamos organizando asambleas y encuentros para profundizar el tema del aborto y planificar acciones de movilización para lograr la ley. Si compartiste con nosotras la marcha del 8M, venite a nuestras actividades y sigamos juntas adelante.
1. Tupac Amaru, SiPreBA y CNCT.