Polémica con los sectores del PJ-K. De aborto poco, de paro nada
A muy poco del 8M, los debates se tensan. En la coordinadora de CABA, las referentes del PJ, del kirchnerismo, de las CTA, del Frente Patria Grande y de sus aliadas como Mala Junta y el PCR intentan desconocer consensos previos: quieren no exigir paro general a todas las centrales sindicales, no incluir a los gobernadores con Macri y el FMI como responsables del ajuste, y secundarizar la consigna de aborto legal. Lo mismo pasa en otras provincias. A eso le suman maniobras sobre la cabecera, el orden de la marcha y el documento conjunto. Llamamos al activismo independiente, a toda la izquierda y a las demás agrupaciones que no capitulan a trabajar juntes para mantener los acuerdos y la unidad en la diversidad.
Podemos disentir sobre si el fascismo hoy lo encarnan Trump y Bolsonaro, como planteamos nosotras, o las feministas radicales, como afirman las compañeras del PJ-K y su órbita. O si los anti-derechos son sólo a la Iglesia y los evangelistas, como dicen ellas, o también el Papa, como decimos nosotras. Pero lo que no cabe, a pocas horas del 8M, es tratar de echar atrás acuerdos ya logrados. Invitamos a las jóvenes feministas a reflexionar sobre estos debates.
Ya en la anterior asamblea, referentes de la CTA-Yasky y la CTA-A dijeron: “A nuestras centrales no nos exijan paro general porque ya lo convocamos, no hay paros a medias”. Pues bien, no es cierto: esas CTA sólo “adhieren” al paro de mujeres, lo que no es ni “a medias” ni a un cuarto. Es más: hacen una conferencia de prensa con la CGT, la CTEP y la CCC el mismo 8 a la mañana. Es evidente, maniobran para no llamar al paro general. A último momento buscan justificar a sus conducciones burocráticas y frenadoras, llenas de machirulos.
¿Macri, único enemigo?
Que Macri y el FMI son los principales ejecutores del ajuste ya lo sabemos de sobra. Pero Macri no tiene mayoría propia en el Congreso y sin el PJ no hubiera podido aprobar su Presupuesto 2019 de hambre y entrega que le ordenó el Fondo. Además, el PJ y el FPV gobiernan 15 provincias, en donde también aplican ajuste y represión. ¿Entonces? ¿Cómo no incluir a los gobernadores en la denuncia, como se hizo en los documentos unitarios del 3J o de la marcha del 1ºF? ¿Acaso los gobernadores no gobiernan?
Lo contradictorio, casi absurdo, es que ahora los sectores del PJ-K quieren anteponer la consigna contra el ajuste a la de aborto legal. ¡Mayor razón aún para llamar al paro general, ya que al ajuste no lo vamos a derrotar sólo las mujeres y las disidencias, sino toda la clase obrera, luchando junto a los compañeros varones! Cualquier activista sabe que esto es así. Pero para las referentes peronistas no: quieren poner la consigna anti-ajuste primero para dejar en segundo plano el tema aborto.
No a la unidad verde-celeste
Al servicio de su proyecto electoral, el PJ y Unidad Ciudadana proponen relegar el tan sentido reclamo de aborto legal. Este verdadero cachetazo a la marea verde se debe a que CFK ya planteó que la unidad “para derrotar a Macri” es con los anti-derechos adentro.
¡En estos días se reúne con sectores evangélicos, a quienes hasta los instó a formar el “peronismo celeste”!
Toda militante feminista o realmente progresista no puede ser indiferente hacia semejantes definiciones. Primero habría que ver qué se entiende por “derrota”, ya que Kicillof declaró que un futuro gobierno K no va a romper con el FMI. ¿Pero cómo, no era que el 8M decimos “fuera el FMI”? ¿O es pura pose, para cambiar este ajuste por otro parecido?
Lo más grave es resignar el lugar principal que debe tener la exigencia de aborto legal el 8M y después. Ya queda claro que Cristina no la va a proponer en su plataforma. Y el colmo es que encima la quieran diluir como una más para las marchas del 8M. En la solicitada de las sindicalistas peronistas es el punto 5 sobre 7…
No, compañeras. Ante barbaridades como los partos forzosos a las nenas de Jujuy y Tucumán, más alto que nunca tenemos que levantar nuestros pañuelos verdes, sin ninguna alianza con los celestes anti-derechos. ¡Con los que sí hay que unir los pañuelos verdes es con los naranjas, por la separación entre Iglesia y Estado!
Por estas razones, para seguir construyendo un feminismo antipatriarcal, disidente, anticlerical, anticapitalista e internacionalista, ¡el 8M marchá con nosotres!