Alberto los suma a su gobierno ¿El cielo por asalto con la “gloriosa” CGT?
Pasaron las elecciones y se confirmó el triunfo de Alberto y Cristina a la presidencia y Kicillof a la gobernación bonaerense. Muchos votaron al PJ/Frente de Todos para sacar a Macri y a Vidal, con la expectativa de que con ellos si irán también el FMI y el ajuste. Que la heladera volvería a llenarse, que acaban los bajos salarios, recortes presupuestarios, devaluaciones y subas de precios, despidos y suspensiones…
Pero aun sin asumir, se reiteran los gestos de Alberto Fernández y encumbrados burócratas de la CGT y de la CTA corroborando lo que alertamos: que Macri y Vidal se van, pero el ajuste y el FMI quedan. La visita de Alberto a la CGT, acompañado por Kicillof y el PJ, lo confirma. Al reforzar allí su propuesta de “pacto social” donde salarios, jubilaciones, planes y presupuestos sociales sean la variable de ajuste, ante precios disparados, como base de un supuesto “despegue” económico.
Alberto y el “cielo por asalto” con la traidora CGT…
En esa negociación vienen hace rato, pero en un salón Felipe Vallese lleno de burócratas octogenarios, Alberto les confirmó que serán parte de su gobierno, arrancando el aplauso apasionado de lo peor del sindicalismo corrupto y traidor.Esa afirmación no es una frase. Porque nos van a entregar a cambio de cargos, espacios de poder, plata, prebendas y negociados desde el Estado.
En la reunión privada con la mesa chica de la CGT, Moyano pidió saber qué cargos ocupará su sector. Aspira a que Facundo ocupe la secretaría de Deportes, lugar que pretende también UTEDyC. Y que su hijo Huguito vaya a Trabajo. Más un lugar clave en AFA.
Ya Maturano (La Fraternidad) lo había dicho sin vueltas: “En el futuro gobierno debemos ocupar un lugar en organismos como el PAMI, la Superintendencia de Servicios de Salud o Anses”. El PAMI es el quinto presupuesto del país, muy apetecible para este sindicalismo corrupto.
También piden cargos en Transporte y subsecretarías como la de Transporte Ferroviario. En Trabajo “los Gordos” aspiran a direcciones y cargos en las 41 delegaciones regionales. Además de Salud y Desarrollo Social o la Superintendencia de Riesgos del Trabajo (SRT) con las ART, donde se maneja dinero y poder.
Quieren cobrarse estas facturas por adelantado porque Alberto y colaboradores como Santiago Cafiero aclaran que necesitarán mucho más que 100 días de paz social. Ante esto, Hugo Yasky de la CTA y promotor de la unidad con la CGT, fue más allá al declarar a Infobae:“Alberto va a necesitar dos años de paz en las calles para sacar al país adelante”.
Por eso, como alertamos con Guillermo Pacagnini, dirigente de ANCLA y la salud en la Mesa del Sindicalismo Combativo, Alberto fue a la CGT a dejar claro que “necesita de sus servicios para evitar todo conflicto y conseguir ese ‘Pacto Social’ que viene a salvarle las ganancias a los grandes empresarios y a garantizar el acuerdo con el FMI”.
Alberto y sus 15 jerarcas con 422 años atornillados
Estos traidores cobran a varias puntas, al seguir prendidos del control de las obras sociales y las cajas sindicales. Tal es el “enamoramiento” con sus sillones, que la mayoría de estos burócratas pasó las bodas de plata, de perla y de estaño.Solo 15 de esos jerarcas suman 422 años atornillados a sus sindicatos.
Entre los que rodeaban a Fernández, con más años en el poder gremial, estabanViviani (Taxistas, 36 años), Genta (Municipales, 36), Astrada (Petroleros, 35), Barrionuevo (Gastronómicos, 40), Rodolfo Daer (Alimentación, 34), Cavalieri (Comercio, 33), Lingeri (O. Sanitarias, 33), Moyano (Camioneros, 32), Rodríguez (UPCN, 29), Piumato (Judiciales, 29), Maturano (Fraternidad, 25), Héctor Daer (CGT) apenas pasó la “mayoría de edad” como burócrata, con 18 añitos comandando Sanidad, Caló cumplió los 15 en la UOM, Acuña (CGT Estacioneros, 14) y Fernández (UTA, 13 años).
Toda una vida de regentear gremios como si fueran suyos. Esa loza burocrática, patotera, mafiosa, aliada del poder de turno y las patronales, no va más.Es un cáncer que debemos extirpar del movimiento obrero. Pero Fernández los premia, al hacerlos parte de su gobierno.
Ni bono, ni aumento ni lucha
Andrés Rodríguez de UPCN había dicho que no van a pedir siquiera ni un bono navideño ni de fin de año “porque la situación es muy difícil. Tenemos que acompañar”. Ya el 29 de octubre en Tucumán, Alberto se reunió con la CGT para avanzar en el “pacto social” para congelar salarios y precios por seis meses o más.
Caló de la UOM se sinceró: “si le dimos una tregua a Macri, mirá si no le vamos a dar una tregua a Alberto…”. Es claro que nada bueno saldrá de pactos a espaldas del trabajador. ¿Qué mandato tienen? ¿A quién consultaron? ¿Qué asambleas o congresos realizaron?
El mismo 29 de octubre, Baradel, dirigente de CTERA, SUTEBA y la CTA, estuvo en A24 planteando que las clases deben iniciar, sin reclamar por el deterioro salarial, presupuestario y edilicio de la escuela estatal. Al contrario, afirmó:”tienen que empezar las clases. Tiene que ser un compromiso de todos. Como está la situación del país, creo que todos tenemos que hacer los mayores esfuerzos…”.
Cabe preguntarse, ¿dónde y con quién lo debatió? En un Congreso Pedagógico Nacional como venimos reclamando, seguro que no. En asambleas y congresos docentes tampoco. ¿Será entonces en el Frente de Todos que integra? Parece que sí… Pero tal fue la bronca ante estas declaraciones que Baradel debió aclarar que la cosa no iba a ser tan así… La historia de entregas Celeste, incluso con el macrismo, nos lleva a creer más al Baradel que habló por A24 que al que dice que se lo malinterpretó.
Días antes, Yasky de la CTA y diputado de Cristina, apoyó el congelamiento salarial que pide Alberto, al asegurar:“hay gente que no llega al final del día. No sabe qué va a comer mañana cuando tenga a sus hijos a la mesa… Si para resolver eso hay que plantear, por un determinado período, un congelamiento de precios y salarios… es absolutamente lógico y razonable…”. ¡Escandaloso!
Las declaraciones de Andrés Rodríguez, Caló, Baradel y Yasky para que trabajadores y sectores sociales “hagamos el esfuerzo” dejan claro quien tiene que pagar la crisis para ellos.
No al pacto social. Aumento general de salarios, jubilaciones y planes
Alberto quiere un tiempo de gracia, sin paros ni protestas a la Rosada, aTrabajo ni a Desarrollo Social. En la CGT piden que no se llame “pacto” porque “los pactos son para mafiosos”. Lo dicen los burócratas coimeros, mafia enquistada en el movimiento obrero hace más de 30 años.
Hablan de aumentar 20% y congelar salarios y precios. Pero las patronales remarcan y la banca, agroexportadores, mineras y energéticas suman ganancias.Siguen los cierres y despidos, mientras la CGT ni aparece por Kimberly Clark, Mondelez, la línea 60, Palmar, Despegar, Unilever, 3M, Arcor, Ledesma, Carboquímica del Paraná o Massalin.
Alberto propicia Vaca Muerta que arrasa derechos laborales. Sintoniza con las empresas que exigen más flexibilización, rebajas impositivas y ataques a la jubilación. El vicepresidente de la UIA, Funes de Rioja, alertó que sin esas reformas estructurales, el pacto social será “un pactito que durará hasta el siguiente Rodrigazo”.
Aunque la disposición a pactar la ratifican hasta en el 55° Coloquio de IDEA. Allí Daer lo dejó claro a los CEOs y ejecutivos del país: “Vine a pedir un acuerdo social. No tengo duda que se va a lograr, sino yo no estaría en IDEA”. También Yasky estrenó ahí ante los CEOs, al compartir panel con Sergio Palazzo de la Bancaria, el gerente de Ledesma y el presidente de Toyota. La conciliación de clases del PJ, al palo.
Ante esto, como planteó Pacagnini: “Esos dirigentes colaboraron con Macri y ahora dicen que hay que darle tregua a Fernández. Que no hay que pedir aumento, ni siquiera un bono. Nosotros pensamos lo opuesto: hay que salir a reclamar y a movilizar. Por eso estamos organizando una reunión nacional de dirigentes del sindicalismo combativo para convocar a una gran movilización, jornada de cortes y marchas en todo el país para diciembre. Reclamamos romper con el Fondo y un aumento general de salarios, jubilaciones y programas sociales”.
Es el camino. Llamamos a hacer asambleas en cada lugar de trabajo, exigir plenarios y congresos para organizarse contra el pacto social. Por paritarias libres, pase a planta, contra los despidos y cierres. Y dar paso a las conducciones clasistas, sectores de izquierda y luchadores hacia la nueva dirección del movimiento obrero y el pueblo que necesitamos.
Francisco Torres