¿Vuelve el fútbol en la Argentina este año?
La situación sanitaria a nivel país con aumento de casos y muertes, la saturación de los sistemas de salud en las distintas provincias, los contagios masivos en la burbuja de Boca, la fallida vuelta a los entrenamientos y la pelea por la televisación del torneo ponen este interrogante sobre la vuelta al futbol, una actividad no esencial.
Escribe: Leonardo Rando
Si bien somos millones los futboleros que vamos a los estadios a ver a nuestros equipos y queremos que el fútbol vuelva para festejar, sufrir o amargarnos como lo hacíamos cada fin de semana la situación sanitaria del país nos frustra ese deseo y es con cierta lógica. La realidad muestra que los casos diarios van en aumento, ya superamos los 500 mil contagios y la triste cifra de 10 mil muertes desde que comenzó la pandemia, algunas provincias están sufriendo la saturación de los sistemas de salud. Todo esto nos lleva a pensar una vez más y con razón que quizás no sea lo mejor la vuelta al fútbol en la Argentina.
La pelota para octubre
El día lunes se reunió el comité de la AFA donde participaron todos los dirigentes del futbol argentino para definir cuándo sería la vuelta a la actividad. El presidente de la actual Liga Profesional de Futbol Argentino Marcelo Tinelli, el titular de la AFA Claudio “Chiqui” Tapia y el Ministro de Salud de la Nación Ginés Gonzales García hablaron horas antes de esta reunión y acordaron no volver, como estaba estipulado el 25 de septiembre, debido a la situación que está viviendo el país en materia sanitaria. En esta reunión entonces se barajó una posible fecha para que la pelota ruede, pero sin ningún tipo de precisión, el próximo 11 de octubre o en su defecto el 18 del mismo mes, debido a que el próximo lunes la Conmebol tendrá una reunión en la que definirá si el fin de semana del 11 inicia, como está programado, la eliminatoria Sudamérica para el mundial de Qatar 2022. Argentina adelanto que su posición en dicha reunión será aplazar el comienzo de la misma para noviembre o directamente que el comienzo sea en 2021 cosa que llevaría a la Conmebol a cambiar todo lo programado.
¿Cómo y por dónde?
Otros dos puntos que se discutieron en la reunión del último lunes fueron cómo y por dónde. Sobre el cómo se sabe que ya hay un formato aprobado de una primera instancia con 6 grupos de 4 equipos y una segunda instancia con dos zonas de 12 equipos. Este formato está en discusión ya que las empresas de televisión quieren que si se pasa el comienzo para octubre en el inicio se incorpore la fecha de los clásicos para ese mes a cambio de desembolsar el dinero de televisación del mes de septiembre a todos los clubes. En cuanto a la televisación hay una propuesta que tiene que ver con que todos los partidos dejen de ser transmitidos por dos señales premium de cable y que 5 de los 12 partidos de la fecha sean transmitidos por la tv pública, esto parece estar encaminado aunque aún no hay nada confirmado.
Todo esto se está discutiendo para los clubes de primera, los clubes de las distintas categorías de ascenso tienen los lógicos inconvenientes sobre los testeos y los protocolos por ser clubes con menor presupuesto cosa que se pudo ver en las primeras instituciones que volvieron a los entrenamientos y que ya han presentado casos y aun no tienen confirmación de la vuelta del torneo. El futbol femenino también aguarda para volver a los entrenamientos y a las competencias.
El ojo en la copa y el temor de la vuelta
La próxima semana vuelve la Copa Libertadores, la competición máxima del continente a nivel clubes. El inicio será el día 16 de septiembre y los 5 equipos argentinos que están en la competición volverán a jugar el día jueves siguiente. River visita a San Pablo en Brasil (uno de los epicentros de la pandemia), Boca y Tigre viajaran a Paraguay para jugar contra Libertad y Guaraní, y Racing y Defensa y Justicia recibirán en Argentina a Nacional de Uruguay y Delfín de Ecuador respectivamente. Los ojos están puestos en cómo se desarrolle esa vuelta, por ahora llamó muchísimo la atención la cantidad de casos en Boca la semana pasada en su preparación para la competición.
El presidente Alberto Fernández en la entrevista que dio al programa A Dos Voces de Todo Noticias fue claro al ser consultado por la vuelta al fútbol: “Es muy difícil en este contexto. Es muy difícil jugarlo, miren lo que está pasando en Boca. En el mundo hay una pandemia, lo que tenemos que evitar es la circulación y el contacto y el fútbol es un deporte de fricción que parece contradecir esa lógica”. Lo cierto es que como viene pasando con los bonistas, con la expropiación de Vicentin, con la unificación del sistema de salud, con el conflicto de la policía bonaerense ante el menor apriete el gobierno recula. Parece estar pasando lo mismo en el fútbol. Los dirigentes de los clubes, basados en la decisión que tomo el ministro de turismo y deportes Matías Lammens junto con la Liga Nacional de Básquet de la vuelta a la competición en noviembre, dicen que si ellos pueden, porque nosotros que venimos entrenando desde principios de agosto no podemos volver en la última semana de octubre, aunque sea.
Desde este medio hemos sido claros y lo hemos planteando incluso antes de la vuelta a los entrenamientos, de la explosión de los casos y de la situación crítica que estamos viviendo en estos momentos en el sistema de salud. El futbol al igual que cualquier actividad que no sea considerada esencial no debería volver menos en un contexto donde el personal de salud está perdiendo su vida, donde alertan a través de comunicados que están saturados de tanto trabajo y no dan abasto, plantean que faltan recursos y que no ven una respuesta desde el gobierno ni sanitaria ni económica ya que muchos de ellos tienen salarios por debajo de la línea de la pobreza. Son esenciales para la pandemia pero descartables para el gobierno.
Todos deseamos volver a abrazarnos después de un gol, pero por ahora hay que esperar. Hoy hay otras prioridades.