Cristina e hijos, Báez y Cristóbal… Procesados
El juez Claudio Bonadío resolvió ayer procesar por tercera vez a la ex presidenta acusándola de ser la “jefa de una banda criminal concurrente con los delitos de lavado de dinero y negociaciones incompatibles con la función pública”.
Es evidente que luego de doce años de gobierno, la familia Kirchner y muchos empresarios amigos, se enriquecieron a costa del estado. Es evidente también que las “campañas judiciales” desatadas sirven a la estrategia de polarización de cambiemos más que alcanzar la “justicia”.
A continuación algunas opiniones y propuestas para que el entramado actual no termine, como otros que involucran funcionarios, ex funcionarios o empresarios amigos, impunes.
Corrupción estructural, justicia adicta y devolución de favores
El gobierno de los Kirchner se encontró con una coyuntura económica excepcional que les permitió manejar una enorme cantidad de recursos. Miles de millones de dólares ingresaron (y salieron) del país sin control alguno.
Esta coyuntura fue aprovechada por los sectores dominantes para fortalecer sus arcas como nunca. “La juntaron en pala”, como afirmó la propia Cristina.
Desde las máximas esferas del Estado, es evidente que la familia Kirchner aprovecho estos años para hacer lo mismo, haciendo crecer exponencialmente sus fortunas y facilitando que un sector de empresarios amigos como Lázaro Báez, Cristóbal López y otros avanzaran notoriamente beneficiándose de los contratos de obras y servicios pagados por el Estado.
Esta corrupción estructural no fue exclusiva de los Kirchner sino que también incluye a Macri y sus funcionarios, que durante el mismo periodo gobernaron la ciudad de Buenos Aires al margen de que las empresas de las cuales son Ceos y accionistas fueron parte del festín.
En ese marco, el poder judicial que hoy acorrala a CFK lo hace desde la lógica de ser parte del problema y no la solución. Por eso es que la disputa tiene más peso mediático que judicial, se juega en los titulares de Clarín y en la pantalla de C5N y es fogoneado por la polarización política que propone el macrismo para reducir a todas y todos los que cuestionan su plan de ajuste al molde del kirchnerismo. Esa misma lógica binaria es la que antes utilizaron los k para plantear que eran ellos o la derecha. Ambas explicaciones apuntan a salvar el régimen político y garantizar una alternancia al servicio de los poderosos.
Nuestra propuesta
Atentos a esta situación y lejos de caer en esa falsa polarización, desde el MST venimos proponiendo todo tipo de medidas que apuntan, no solo a ir a fondo contra la corrupción k, sino también la que envuelve al macrismo y sus socios.
Proponemos construir una CONADEP contra la corrupción, que investigue de manera independiente y pública a todos los funcionarios involucrados en hechos de corrupción (actuales o del gobierno anterior). Al mismo tiempo entendemos que se debe impedir que los delitos cometidos por funcionarios contra lo público prescriban y si son hallados culpables paguen con sus bienes.
También creemos fundamental que los jueces sean electos por el voto popular y se constituyan tribunales populares.
Estas medidas deberán ser parte de una profunda reforma política para que el pueblo decida y no un puñado de funcionarios privilegiados.