Sobre la campaña de firmas que impulsa un sector del FAP

En estos días Binner y otros sectores del FAP han lanzado una campaña de firmas. Coincidimos con ellos en el rechazo a la re-reelección. Porque repudiamos como millones el intento de perpetuar un gobierno y un modelo que mantiene los aspectos esenciales de la política de saqueo y entrega sostenida en los ´90: concentración de la riqueza, deuda externa, precarización laboral, y criminalización de la protesta, por nombrar algunos de los puntos importantes.
Pero no compartimos que dentro de las consignas que motivan esa campaña, se plantee la defensa de la constitución de 1994. Consideramos que se trata de una propuesta equivocada defender la reforma surgida del Pacto de Olivos, aquél tristemente célebre acuerdo entre Menem y Alfonsín. Justamente, el andamiaje jurídico que sostiene esta matriz semicolonial que nos mantiene arrodillados frente al imperialismo.
Correctamente, a nuestro modo de ver, integrantes del propio FAP, como la Unidad Popular y Buenos Aires para Todos, no se han sumado a esta campaña, compartiendo una visión crítica y contraria a defender esa Constitución.
Cristina pretende perpetuarse con la maniobra de la re-re. Y debemos sumar la mayor cantidad de esfuerzos para derrotarla.
Pero hacia adelante deberemos encarar una discusión de fondo.
Porque para democratizar de verdad el país y producir el cambio que se necesita se deben atacar la raíz del modelo, cambiando la constitución, pero no con una maniobra como la de Cristina para perpetuarse. Sino con una asamblea constituyente libre y soberana, donde se debata y decida realmente sobre todo, para reorganizar el país sobre nuevas bases al servicio de los trabajadores y el pueblo.

Guillermo Pacagnini