8 de Marzo. Un día que conmovió al mundo

Este 8M hizo historia. En su primer paro internacional, millones de mujeres salieron a las calles en todo el planeta por sus derechos. Una primera mirada sobre esta jornada inédita.

“Las mujeres llenan este mundo con su belleza y su energía vital. Se preocupan por sus hijos y nietos, por su familia, sin tomarse un día para descansar. Pero necesitan el apoyo del hombre. Haremos todo para que nuestras amadas mujeres sonrían más a menudo.” Esta sarta de estereotipos machistas lanzó el presidente ruso Putin para el 8M. Días antes, a pedido de la Iglesia Ortodoxa, hizo aprobar una ley que redujo las penas en los casos de violencia doméstica contra la mujer y los hijos.
Similar, el presidente brasilero Temer dijo que “nadie mejor que las mujeres para detectar los desajustes de precios en el supermercado” y destacó “todo lo que ellas hacen por la casa y por los hijos”.
El 8M, Macri desayunó en un comedor religioso de Florencio Varela con un grupo de voluntarias. Alabar la beneficencia y la tarea gratuita simboliza bien el rol que les asigna a las mujeres. Con él estuvieron su ministra Stanley y su gobernadora Vidal, que promueve “voluntarias” para atacar la lucha docente.
A su vez, Trump tuiteó: “Tengo un tremendo respeto por las mujeres y los muchos roles que cumplen, que son vitales para la estructura de nuestra sociedad y nuestra economía”. Aun este hipócrita y reaccionario tuvo que reconocer la realidad: sin el trabajo doméstico cotidiano y no remunerado de las mujeres, que reproducen y cuidan la mano de obra, el capitalismo no podría funcionar.

Una ola feminista radicalizada

Frente a semejantes gobernantes, el 8M en más de 54 países las organizaciones de mujeres coordinaron un paro internacional activo, a lo que hay que sumar las tradicionales marchas en varios otros países. De una u otra manera, el Día Internacional de la Mujer Trabajadora el mundo tembló. Entre otras, se destacaron las movilizaciones en los EE.UU., Polonia, el Estado español, Italia, Turquía, Perú, México y nuestro país.
Según algunos sectores, la ola feminista actual es de carácter defensivo. Es real que, en sintonía con sus planes de ajuste, el capitalismo desarrolla una ofensiva contra las mujeres: busca precarizarlas aún más y restringir derechos civiles conquistados hace décadas. Pero el fenómeno político y social novedoso no son tales ataques, que más bien son permanentes, sino la poderosa respuesta de las mujeres. Para “defenderse”, se organizan, salen a las calles por miles y en su lucha interpelan y cuestionan todo el orden establecido. Este enfrentamiento es más abierto y más consciente que en las oleadas feministas anteriores.
Nos parece que este nuevo ascenso global de las mujeres se caracteriza por algunos rasgos específicos: 1) las acciones son de una alta masividad y combatividad; 2) es internacionalista y se nutre de un país a otro por sobre las fronteras; 3) se vincula con las demandas de la clase trabajadora, lxs migrantes, la diversidad sexual y otros sectores oprimidos; 4) la dinámica del movimiento no sólo apunta contra el modelo patriarcal sino además contra los gobiernos, las instituciones, el régimen y el Estado en su conjunto; y 5) fruto de lo anterior, la vanguardia de las mujeres -en especial la juventud- tiene cada vez mayor conciencia de que el enemigo a enfrentar es el sistema capitalista y patriarcal.
Este protagonismo y radicalización del movimiento feminista se plasmó de mil maneras en los cánticos, carteles y banderas que se levantaron este 8 de Marzo. A las habituales consignas contra los femicidios y la violencia machista, por el derecho al aborto o por la igualdad salarial, se agregaron otras acerca de la soberanía sobre el propio cuerpo, la separación de la Iglesia del Estado y la necesidad de valorizar el trabajo doméstico femenino. En nuestro país, donde el 7M en una marcha masiva la burocracia de la CGT fue repudiada por no ponerle fecha al paro general, el 8M las mujeres cantaron una y otra vez “sí se puede, el paro a Macri se lo hacemos las mujeres”.
Dejando atrás toda postura escéptica, reformista o propagandista abstracta, hay condiciones inmejorables para que las mujeres se sigan organizando en base a un programa transicional claramente antipatriarcal, anticlerical y anticapitalista como el que proponemos.

Chile

Nuestra compañera Maura Gálvez, actriz y dirigente de Juntas y a la Izquierda y del Bloque de Anticapitalistas Movilizados (BAM), es una de las cinco voceras de la Coordinadora Ni Una Menos. Dicha Coordinadora surgió el año pasado y nuclea a más de 20 agrupaciones feministas, independientes de los partidos del sistema y a la izquierda del tradicional PC. Preparan un proyecto de ley de emergencia en violencia de género.
En Santiago, Maura condujo el concurrido acto del 8M en la Plaza Baquedano, con decenas de miles de mujeres. “Contra el capitalismo y el patriarcado” decía la bandera violeta de Juntas y el BAM, cuya columna agrupó a muchxs jóvenes. Y su volante señalaba: “Nuestra estrategia es desmantelar el actual sistema para instalar uno nuevo y radicalmente distinto: desde un feminismo revolucionario, anticapitalista y ecosocialista”. También marcharon en otras ciudades. Ahora las mujeres se coordinan con la lucha anti-AFJP.

Venezuela

En Caracas, nuestras compañeras Andrea Pacheco, Zuleika Matamoros y otras militantes de Marea Socialista participaron junto a varias organizaciones feministas de una concentración unitaria en solidaridad con el paro internacional de mujeres y en contra de la violencia obstétrica, que es consecuencia del abandono oficial al sistema de salud pública.
La acción se llevó adelante el 8M frente a la Maternidad Concepción Palacios, en el barrio Artigas Oeste de la capital venezolana, e incluyó danzas, tambores en vivo y declaraciones de las agrupaciones participantes.

Brasil

Juntas, la agrupación de mujeres de nuestro partido hermano el Movimento de Esquerda Socialista (MES-PSOL), participó activamente de las manifestaciones de mujeres realizadas en todo Brasil el 8 de Marzo.
En el caso de Porto Alegre, la combativa columna de Juntas estuvo encabezada por las compañeras Luciana Genro y Fernanda Melchionna, la concejal más votada de la ciudad. “Ni Temer, ni Trump. Contra los retrocesos y por más derechos”, señalaba la bandera. En la marcha hubo una fuerte presencia de las docentes, que van a entrar en huelga.

Paraguay

En Asunción, nuestras compañeras de Alternativa Socialista son impulsoras de la coordinación que organizó el paro internacional. El 8M miles de mujeres marcharon desde la Plaza Uruguaya hasta la Plaza de la Democracia.
Como expresa la compañera Asunción Collantes, “siendo el Estado quien pone las leyes de protección a las mujeres es quien las viola diariamente y omite el auxilio a las víctimas, con una Policía Nacional que encubre al agresor y un Ministerio de la Mujer sin presupuesto”. El sábado 11 de marzo, Alternativa Socialista organizó un cine-debate antipatriarcal.

Pablo Vasco