Congreso de Conaduh: Fortalecer la lucha y discutir democráticamente cómo seguimos

El viernes 17/3 sesionó el congreso de la Conadu Histórica. Se tomaron importantes definiciones en relación al plan de lucha de los docentes universitarios, convocando a paro de 48hs para los días 21 y 22/3 adhiriendo a la marcha federal educativa, y de 72hs para los días 28, 29 y 30/3. Sin embargo, hubo elementos claves de la actual coyuntura que estuvieron prácticamente ausentes del debate. Esta ausencia implica también limitaciones a la hora de pensar el plan de lucha. Desde estas líneas buscamos aportar al análisis de la coyuntura actual, y de las tareas que de la misma se desprenden para fortalecer la pelea que estamos encarando.

Debates sobre la nueva coyuntura

Un primer e importante debate al que queremos aportar es al análisis del escenario nacional en el marco del cual sesionó el congreso. Entendemos que nos encontramos en una nueva coyuntura marcada por un cambio cualitativo en la relación del movimiento de masas con el gobieno de Macri. Éste se desgasta a un ritmo acelerado y por abajo crece la ruptura. Esto tiene una clara expresión en las luchas en curso contra el ajuste. Las históricas jornadas del 6, 7 y 8, con cientos de miles en las calles, y luego el ascenso sostenido de la lucha de los docentes son claras muestras de esto. La movilización del 7 expresó ademas un salto en la crisis de la burocracia sindical que enfrenta un enorme desborde de sus bases que les ha obligado a poner fecha a un paro nacional. Esto último se expresó también al interior de Conadu cuyas bases enfrentaron la vacilación ante el paro del 6 y 7/3, haciendo que 9 de sus asociaciones de base convoquen a parar.

Es necesario señalar, también, la determinación del gobierno nacional y los gobiernos provinciales de aplicar el ajuste sobre los trabajadores en general, y sobre la educación y la ciencia pública y sus trabajadores en particular. Nuestra paritaria es una clara muestra de esto y también el incumplimiento de lo firmado en la paritaria de 2016. Nos enfrentamos a un gobierno que quiere profundizar la ofensiva neoliberal sobre la educación y la ciencia pública. Los intentos de los rectores con complicidad del ministerio de educación de frenar la implementación de nuestro Convenio Colectivo de Trabajo, y la ofensiva privatista sobre el Conicet son elementos de esta orientación estratégica.

Lamentablemente no fue así como se ubicó el debate desde la conducción de la federación (Naranja – PO, Marrón – PCR, y Germán Abdala). La evaluación que se realizó sobre la situación en curso subestima tanto la gravedad de la ofensiva privatista, como la impresionante respuesta de los trabajadores y el fuerte desgaste del gobierno nacional y sus pilares de apoyo para el ajuste: los gobiernos provinciales y la burocracia sindical.

Las tareas por delante

Este debate se expresa también en las tareas que tiene por delante la Conaduh en esta lucha. Estamos en un momento clave, y ante una oportunidad y una responsabilidad excepcional. Nuestra federación puede y debe postularse como referencia para el conjunto de la lucha educativa. En este escenario el debate de plan de lucha no puede limitarse a la cantidad de días de paro. Ese es un debate importante y esta clarisimo que necesitamos un plan de lucha contundente, continuado con paros progresivos y que este es el momento para llevarlo adelante. Pero ademas debemos debatir cómo fortalecemos la unidad desde abajo para luchar. Cómo hacemos para convocar plenarios con las bases de los diversos agrupamientos, sindicatos y federaciones universitarias y de trabajadores de la educación y la ciencia. Construir tambien ámbitos de intercambio con el movimiento estudiantil para salir juntos a dar esta pelea. No solamente existe la oportunidad de lograr esto, es también una necesidad clara para poder ganar.

Debemos debatir, por ejemplo, que orientación nos damos frente al mencionado desborde a la conducción de la Conadu. Limitarnos a una política de denuncia de su conducción y delimitación propagandistica es un grave error en este escenario. Tenemos que encontrar los mecanismos para poder facilitar la unidad de las bases que estan decididas a pelear y que van a chocar, y ya estan chocando, con esa conducción. Debemos tomar la iniciativa y convocar plenarios de base u otras instancias que funcionen como puente entre nuestra federación y ese activismo que quiere dar pelea.

En la medida en que lo que existe es un ataque global sobre la educación y la ciencia pública, no podemos limitarnos a dar una respuesta sectorizada. Debemos dar una pelea unificada y global. Hay que construir esa respuesta junto al movimiento estudiantil y los trabajadores de Ciencia y Técnica. Actuar de manera sectorizada ante un ataque global es una respuesta conservadora que no esta a la altura de las circunstancias. Por eso desde Alternativa Universitaria, proponemos que se llame a un Encuentro Federal de trabajadores y estudiantes de la Universidad, la Ciencia y la Técnica, para poner en pie una coordinación federal democrática que organice esa respuesta global.

Un aspecto ligado a esto es el debate en torno a cuales deben ser las instancias de debate, evaluación y resolución de nuestras medidas de lucha. Esto se expresó en una votación del congreso en torno a si el 31/3 debía ser un plenario de secretarios generales o un congreso el que evalue la situación y resuelva como seguir. Desde nuestra agrupación sostenemos que momentos de lucha cómo estos requieren del mas amplio debate democrático para fortalecer las medidas de lucha. Es por eso que creemos que un congreso era sin dudas una mejor opción que un plenario de secretarios generales. Lamentablemente no fue esa la resolución.

¡Todas las fuerzas al plan de lucha!

Sin dudas este es el momento para salir a pelear. No es un plan de lucha más, no estamos en un momento igual a cualquier otro. Todos nuestros esfuerzos deben orientarse a derrotar la politica privatista y el ajuste que impulsan el gobierno de Macri, los gobernadores y los rectores. Y hay condiciones de lograrlo. La lucha docente debe crecer y transformarse en una verdadera rebelión educativa, y podemos tener un papel importante en que esto suceda.

Por todo esto, el 21 y 22/3 debemos parar todos y copar las calles, volcandonos con fuerza a la marcha federal. Del 28 al 30/3 el paro tiene que ser masivo y acompañado por acciones impulsadas en cada asociación. Luego debemos seguirla, con progresividad, y construir para el mes de abril una gran movilización en defensa de la universidad y la ciencia pública.

Luis Meiners (congresal por Sitradu), José Mini (Congresal por minoria de ADICUS)

Alternativa Universitaria