Debates de cara al 24 de Marzo No a la impunidad, el ajuste y la represión de Macri y sus cómplices
Sobran motivos para que el próximo sábado 24 de Marzo, a 42 años del golpe genocida y en defensa de los derechos humanos de ayer y de hoy, desbordemos de movilización popular la Plaza de Mayo y todas las plazas de nuestro país contra el gobierno y sus socios.
Desde que Mauricio Macri llegó a la Rosada hay un avance cualitativo en materia represiva y antidemocrática, no visto desde la caída de la dictadura militar en 1983. Desde ya, no es que con el gobierno kirchnerista la situación fuera un “paraíso” en cuanto a derechos ni mucho menos: entre otros hechos, tuvimos la segunda desaparición de Julio López, el Proyecto X de espionaje de Gendarmería, nuevas leyes “antiterroristas”, al represor Berni y palos contra luchas sociales, y la barbaridad de poner al genocida Milani al frente del Ejército, hoy preso.
No obstante, la ofensiva de Macri implica un salto en el autoritarismo y así hay que denunciarlo. Niegan el genocidio de ayer para alentar que hoy se les conceda prisión domiciliaria e impunidad a genocidas condenados, como Etchecolatz y otros. Fuerzas de seguridad asesinaron a Santiago Maldonado y Rafael Nahuel. Reprimen las protestas sociales, hay presos políticos y endurecen la criminalización de todos los que luchan, desde los trabajadores que enfrentan los despidos hasta los pueblos originarios. Tienen un blindaje mediático inédito. Y con la “doctrina Chocobar” habilitan más gatillo fácil policial.
El objetivo de esa avanzada represiva es imponer un plan de ajuste brutal, con miles de despidos; baja de los salarios, jubilaciones y planes sociales; más precarización laboral, tarifazos, endeudamiento externo y entrega de nuestros bienes comunes a las corporaciones.
Pero frente al ajuste de Macri, y pese a las traiciones de la burocracia sindical y el aval de los gobernadores, el PJ, la cúpula de la Iglesia y otros cómplices, la resistencia popular no deja de crecer. Así tuvimos las marchas contra el 2×1 y por Santiago, las jornadas del 14 y 18 de diciembre contra la reforma previsional, un reguero de luchas anti-despidos, la concentración del 21F en la 9 de Julio, los paros docentes y la enorme movilización feminista del 8M. El “hit del verano” que se extiende por canchas, recitales, movilizaciones y otros ámbitos populares confirma este clima de bronca social en aumento.
Este 24 de Marzo es entonces una nueva oportunidad para pegarle un duro golpe a esa política de impunidad, ajuste y represión de Macri y sus socios con una jornada nacional de protesta multitudinaria.
Unidad de acción y diferenciación
Justamente por la situación política arriba descripta, desde el MST y el CADHU llevamos a las reuniones del Encuentro Memoria, Verdad y Justicia para preparar el 24 de Marzo una propuesta que integra dos aspectos complementarios: buscar alguna unidad de acción con la Mesa de Organismos de Derechos Humanos -referenciada en el gobierno anterior- y, al mismo tiempo, preservar la independencia política del EMVJ mediante una columna y un texto propios en el acto en Plaza de Mayo.
La definición llevó más de cuatro reuniones plenarias, con fuertes debates. Se demoró por la obstinación del FIT en poner como consigna principal “contra Macri y los gobernadores”. Así no solamente diluían a Macri como enemigo principal, sino que buscaban impedir toda unidad de acción con la Mesa de Organismos. Es que el FIT no ve al 24M como una jornada de lucha y movilización, sino como “un balance político del año”. Y en una Plaza desbordante compartida entre el EMVJ y la Mesa, obviamente su columna sería menos notoria. Detrás de esta postura sectaria de priorizar la diferenciación y negar toda unidad de acción hay un marcado electoralismo, como ya lo mostraron cuando apareció el cuerpo de Santiago Maldonado pocos días antes de la última elección. ¿Y nos acusa de “querer lavarle la cara al kirchnerismo” el mismo FIT que ese día clave, junto a los K y al propio Macri, llamó a no movilizar? ¡Por favor!
El FIT tampoco presentó ninguna otra propuesta alternativa ni aceptó la propuesta de consenso “contra Macri y sus cómplices”, como quedó, y encima pretendía seguir el debate y que el EMVJ no definiera nada. Tampoco aceptó el llamado de Norita Cortiñas y Madres Línea Fundadora de hacer “una marcha y dos documentos”. Es decir, o imponen su política o la parálisis.
Finalmente perdieron y la amplia mayoría de organizaciones integrantes del Encuentro acordamos una convocatoria conjunta (ver convocatoria) y también buscar un acuerdo con la Mesa de Organismos en base al esquema “dos columnas, una plaza, dos documentos” u otro similar. A cada momento, dicha declaración sigue sumando nuevas adhesiones. Por supuesto, quienes firmamos la declaración cuestionamos a los gobernadores, tal como queda claro en las subconsignas y estará en el texto del EMVJ.
Los papelones del FIT
En realidad, en la última reunión del EMVJ los tres integrantes del FIT fueron un verdadero cambalache. Mientras el PO afirmó que si había acto aparte de los K aceptaba rever su consigna, el PTS en cambio mantuvo lo de los gobernadores pero planteó coordinar el esquema “dos una dos” con los K, e Izquierda Socialista propuso postergar todo. Estas fisuras en el FIT no son nuevas: por ejemplo, en la reciente presentación judicial que hizo el PTS en la causa Maldonado no sólo no invitó al EMVJ sino tampoco a sus socios del PO. O sea, utilizan al EMVJ cuando les conviene y si no les conviene lo ningunean.
El martes 13 en la sede de Madres Línea Fundadora se hizo una reunión entre los organismos del EMVJ que acordamos la declaración publicada y la Mesa de Organismos. Para “sorpresa” de casi todos los presentes, en la reunión apareció un miembro del PTS-Ceprodh… ¡invitado por uno de los sectores K de la Mesa! Como en política nada es casualidad, invitador e invitado plantearon exactamente la misma línea: no compartir ni acto, ni Plaza, ni escenario ni nada entre ambos espacios, sino sólo el “traspaso civilizado” y hacer todo por separado. Es decir, tanto ese sector K como el FIT coinciden en negarse a masificar la movilización y anteponer sus respectivos cálculos electoralistas. Son mutuamente funcionales. Entonces, ¿cómo era eso del “lavado de cara”?
A su vez algunos en la Mesa proponen que en la Plaza haya un único acto y un único documento, lo cual hoy resulta inviable por las diferencias existentes. Precisamente si algo hoy permite la unidad de acción es un esquema que pueda dar cabida a las divergencias.
Dos columnas, una Plaza, dos documentos
Mientras prosiguen los debates al interior del Encuentro, de la Mesa y también entre ambos, estamos convencidos de que la tarea prioritaria de todo luchador y de toda luchadora sindical, estudiantil, del movimiento de mujeres y demás movimientos sociales o independiente es seguir impulsando con toda fuerza la convocatoria para el 24M lanzada por la gran mayoría de las organizaciones que integramos el EMVJ. Y llamamos a los compañeros del FIT a cambiar su postura y aceptar lo consensuado por la amplia mayoría.
Es la única salida concreta para asegurar una movilización masiva el 24 de Marzo centralmente contra Macri y, asimismo, expresar las diferencias y matices de ambos espacios con dos documentos leídos en el acto en la Plaza. Sin hegemonismos ni aparateos de nadie, entrando por ejemplo el EMVJ y la Mesa a Plaza de Mayo por ambas diagonales en forma simultánea, compartiendo el espacio, la seguridad y toda la organización.
Desde el CADHU y el MST en Izquierda al Frente creemos que las divergencias políticas no pueden ni deben ser un obstáculo para impedir la unidad de acción y a la vez unidad no significa uniformidad, sino unidad en la diversidad. Lo dice la política y también lo dice la vida de distintas maneras: “golpear juntos, marchar separados” o “juntos, pero no revueltos”. No sólo es posible, sino necesario. ¡30.000 compañeros detenidos-desaparecidos, presentes!
Pablo Vasco y Gustavo Giménez