G20 en Argentina: Un acuerdo global para el ajuste y las reformas antiobreras
Acaba de concluir la reunión de ministros de finanzas y presidentes de bancos centrales del G20. Supervisada por distintos organismos internacionales, entre ellos el FMI, la cumbre tiene varios objetivos en agenda y varios fuera de está, todos de difícil concreción. Disputas comerciales, cautela y algunos roces en un evento que solo aporta malas noticias para el pueblo trabajador.
Multilateralidad dirigida
El G20 surgió en 1999 como respuesta a los primeros episodios de crisis y desmanejos financieros generados por las potencias imperialistas que se trasladaban de un punto a otro del globo. De esa primera instancia, más acotada, pego un salto luego del estallido de la crisis económica mundial, allí por 2008, para transformarse en una de las tantas “redes de contención” con el que el imperialismo pretende retomar algún orden. Sin embargo, lejos de aportar a ese objetivo, las cumbres de este espacio se han transformado en el terreno de las disputas comerciales y los reclamos, fundamentalmente entre las potencias económicas, mientras que el resto de los países intenta conseguir alguna migaja que caiga de la mesa aceptando para ello todas las “reformas” estructurales que apuntan a desmontar la industria, la educación y la tecnología, para lanzarse al abismo del endeudamiento para infraestructura.
El documento de “La visión de la presidencia argentina” describe el clima en el que se desarrolla la cumbre, aunque arranca de un optimismo poco objetivo, rápidamente aclara que la fiesta, puede transformarse rápidamente en velatorio “Hoy, a diferencia de 2008, el crecimiento global es firme. Sin embargo, debemos tener un optimismo cauteloso debido a la persistencia de algunos riesgos. Errores en las políticas, la materialización de riesgos geopolíticos, o correcciones súbitas en los mercados financieros pueden alterar rápidamente la calma actual” (https://g20.argentina.gob.ar/es/vision-de-la-presidencia-argentina)
En definitiva, el disfraz de la multilateralidad esconde una feroz disputa entre EEUU, que a pesar de sus problemas sigue imponiendo condiciones y una serie de bloques más o menos sólidos que batallan por lo suyo y en el fondo de estas disputas una contraofensiva económica brutal contra el pueblo trabajador, que enfrenta en todos los extremos del globo las “reformas” y “planes” que surgen de estos eventos imperialistas.
La presidencia argentina: garantizando los negocios de los poderosos
Previo al comienzo de la cumbre, Lagarde, la jefa del FMI se deshizo en elogios para con Macri y su gobierno y dejó unas cuantas definiciones interesantes sobre la actualidad y las perspectivas de la economía mundo, como así también sobre los planes impulsados por el FMI y otros organismos al servicio del gran capital. «se observan riesgos desfavorables en un futuro que hay que atender y el más inminente es un riesgo que se relaciona a un desarrollo positivo«.[1] No hacen falta grandes aclaraciones, la máxima autoridad del FMI entiende que hay poco por lo que entusiasmarse, incluso, los que hoy son “motores” de recuperación pueden transformarse en nuevas burbujas.
En la charla que compartió con el Ministro Dujovne, gran parte de su gabinete y reconocidos economistas del régimen, Lagarde explicó que es el momento adecuado para el ajuste en profundidad, como bien lo retrata ambito.com “con una economía mundial que creció 3,7% en 2017 y espera hacerlo al 3,9 este año, Lagarde entendió que «la perspectiva es positiva y es un momento justo para hacer las reformas que se tienen que hacer. Reforzar la productividad, impulsar el cambio de la fuerza laboral y concentrarse en reducir las desigualdades que vemos aumentaron en muchos países». Asi, las reformas planteadas van directamente en contra del objetivo enunciado. Justamente es el ajuste y las reformas estructurales sugeridas por el FMI (Reformas laborales, previsionales, pactos fiscales, despidos, etc) las que generan más y más desigualdades entre los que más y menos ganan en el mundo, empujando a enormes sectores a la pobreza y la indigencia.
La presidencia del G20 para Argentina no es para nada una casualidad, sino una muestra de que a nivel global, la tónica es de ajuste y contraofensiva económica. Lo que no pueden ocultar a pesar de ello, es la resistencia creciente que también tiene carácter global y que es un freno objetivo a los planes imperialistas.
Esta presidencia para el gobierno, pretende ser aprovechada en dos sentidos: por un lado para seguir con su discurso de atraer inversiones para destinarlas esencialmente a infraestructura “hacer de la infraestructura un nuevo activo” balbucean en los pasillos de economía, a costa de un fuerte endeudamiento. Por otra parte, intentar negociar bilateralmente algunas medidas tomadas por EEUU que significan un problema para los exportadores, como los aranceles al acero y otras medidas “proteccionistas”, similares intenciones tienen con la UE, con quienes vienen intentando avanzar en un acuerdo desde hace meses, sin resultados favorables.
Mucha rosca y pocos resultados
Pocos los resultados que pueden mostrar los participantes de esta cumbre. Podemos decir que lo único que todos se animaban a prever era la imposibilidad de resolver los graves problemas de la macro economía.
A pesar de las leves recuperaciones, el mundo es un lugar inestable, con múltiples conflictos abiertos para el imperialismo y la apuesta a este tipo de organismos multilaterales no es suficiente para despejar las nubes de tormenta que se acumulan en el horizonte.
La consolidación de referencias alternativas, hoy inexistentes a nivel internacional, surgirá sin dudas de los futuros enfrentamientos entre los pueblos del mundo y los ocupantes de los sillones de todas estas convenciones. Al servicio de intervenir en esos procesos, de generar nuevos canales de organización y unidad de los revolucionarios a nivel internacional es que desde el MST Nueva Izquierda apostamos fuerte a construirnos y construir una corriente que en todo el mundo sea vanguardia en la lucha contra los planes del imperialismo y sus lacayos nacionales. Sumate a esta importante tarea.
Martín Carcione
[1] http://www.ambito.com/915374-fuerte-apoyo-de-lagarde-al-gradualismo-del-gobierno