La presión de las bases pudo más. Que el paro del 25 sea activo y tenga continuidad

Finalmente la CGT resolvió convocar al paro nacional para el 25 de junio. Pese al tremendo retraso y al carácter pasivo y dominguero que le quiere imprimir el triunvirato cegetista, el paro es un triunfo del movimiento obrero. Expresa la tremenda bronca y disposición a la pelea que hay en la base obrera y popular del país frente al ajuste en curso, los tarifazos, las medidas represivas y el repudio al pacto de hambre y entrega de Macri con el FMI. Ahora los trabajadores tenemos que reclamar que todas las centrales se sumen y tomar la preparación de la medida en nuestras manos transformándola en activa.

Pararle la mano a Macri y el FMI

El gobierno está en crisis. Es evidente que fracasó su plan económico. Trajo más miseria para trabajadores, sectores medios y populares. Pero no le alcanzó porque no pudo meter a fondo el ajuste y las reformas reaccionarias que había prometido. Por ello pese a la transferencia de recursos a las corporaciones y el festival de especulación financiera, creció la  desconfianza de los grandes capitales en nuestra economía no solamente por el descontrol inflacionario y el déficit en las cuentas públicas, sino por la imposibilidad de aplicar el ajuste en la velocidad y profundidad que le exigían. La resistencia de los conflictos por despidos y el salario y sobre todo las jornadas de rebelión obrera de diciembre, donde la izquierda y el clasismo jugamos un papel de primera línea, fueron factor decisivo en ponerle palos en la rueda, hacerlo retroceder con la reforma laboral y empujarlo a la crisis.

Si no lo derrotamos pese a tamaño desgaste político y pérdida de apoyo de amplias franjas de la población, fue por el rol de la oposición política que lo apuntaló y el papel connivente que ha jugado la burocracia sindical.

Ahora Macri pretende salir de la misma descargando los costos sobre los de abajo y apelando al “préstamo” del FMI, que siempre trajo miseria y desocupación. Vetó la ley antitarifas, devaluó, anunció nuevos despidos. Y se viene el brutal ajuste del FMI que pretende nuevos tarifazos, liquidación de la obra pública con mayor desocupación, hundimiento de las provincias y los presupuestos públicos y un programa recesivo y de entrega que traerá más miseria y endeudamiento usurero.

Pero una vez más la bronca obrera y popular, pese al aval del FMI y el imperialismo, no lo dejó hacer buena letra y mostrar gobernabilidad y paz social.

Pese a las dilaciones y las maniobras de mesas de negociación de la CGT para desmontar las medidas, pese a la falta de unidad en las convocatorias que realizaron las CTA y Moyano, en días diferentes, no lograron descomprimir la olla a presión del movimiento obrero y evitar esta convocatoria al paro que es una victoria de la fuerza de la base.

Preparemos un parazo activo para el 25

El paro está lanzado, pero no podemos depositar la menor confianza en estos dirigentes que dilataron una eternidad este llamado y no van a mover un  dedo para que salga con fuerza. Empezando porque lo llaman sin movilización. Por eso desde ANCLA/MST, llamamos a que los trabajadores lo tomemos en nuestras manos para que se transforme en un duro golpe al gobierno y al FMI.

  • Hay que reclamar que todas las centrales y sindicatos se sumen a la medida del 25. La CTA Autónoma ya pasó su llamado del 19 para el 25. El paro ya convocado para el 14 por la CTA de los Trabajadores y los camioneros y las medidas de 48 hs que hacen otros sindicatos, tienen que ser una antesala del paro general, un primer escalón de un plan de lucha que debe tener continuidad. Desde los sectores sindicales combativos y la izquierda, resolvimos conformar una columna independiente para marchar el 14 a Plaza der Mayo con la bandera del paro nacional activo.
  • Hay que transformar el paro en activo. Debemos rechazar la propuesta desmovilizadora de la CGT que pretende derrochar las energías del paro en una medida dominguera para descomprimir. Ese día hay que llamar a todos los sectores que acuerden con darle este carácter activo al paro, a realizar cortes y acciones conjuntas en todo el país y preparar una gran marcha en la Capital.
  • Hay que proponer un programa para levantar en el paro. No alcanza, como plantea la CGT, decir que el paro es “contra el programa del gobierno”. Hay que llevar al debate en asambleas y plenarios un pliego que no solamente contemple los aspectos más urgentes, sino medidas de emergencia y de fondo que respondan a las necesidades de los trabajadores y el pueblo. Planteando la prohibición de despidos y suspensiones, pero también la nacionalización bajo control obrero de toda empresa que igualmente cierre o despida; paritarias sin techo pero también un aumento general de salarios, jubilaciones y planes sociales actualizados automáticamente según inflación; la nulidad de los tarifazos, pero también la reestatización de los servicios públicos con control social; asimismo la nacionalización de la banca y el comercio exterior para frenar la fuga de divisas y la especulación financiera y la ruptura con el FMI y la suspensión de los pagos de la deuda fraudulenta. Parte de las medidas de un programa obrero y popular para responder a la crisis y que la paguen las corporaciones y los especuladores y no los trabajadores.
  • Hay que preparar el paro desde ahora y desde abajo. Convocando y/o reclamando asambleas y plenarios para resolver programa y medidas de movilización. Y reuniones de activistas para organizarlas.
  • Hay que plantear la continuidad con un plan de lucha conjunto y decidido democráticamente en la base.

Nuestra corriente sindical y todas sus agrupaciones de gremios privados y estatales, nos ponemos en campaña para que el paro sea un éxito y proponemos que el plenario sindical combativo del 23J también trabaje para organizar acciones conjuntas y que el paro nacional sea un golpe contundente para pararle la mano al virrey ajustador y sus lacayos.

 

Guillermo Pacagnini

Dirigente de CICOP y referente de ANCLA/MST (Agrupación Nacional Clasista Antiburocrática)