Vanesa Gagliardi: legisladora por el MST en la banca del FIT-U en CABA
Las elecciones del pasado domingo dejaron distintas conclusiones. A la vez, de los resultados generales de la izquierda, no queríamos dejar de señalar y festejar la conquista de una banca en la Legislatura de CABA para el FIT-U. La misma será rotativa entre las fuerzas del frente, y por el MST la ocupará Vanesa Gagliardi, dirigente docente y militante del MST, a quien entrevistamos.
En primer lugar, contanos de vos. ¿Cuándo empezaste a militar en el MST y en qué circunstancias te decidiste?
Yo era activista y delegada en el secundario, había conocido algunos partidos de izquierda, pero ninguno me convencía. En el 2001, empecé a cursar en la Facultad de Filosofía y Letras y ahí conocí al MST. Estudiaba Filosofía, y ahí el partido tenía una agrupación que se llama Tesis XI, por las Tesis sobre Feuerbach de Marx que dice “Los filósofos no han hecho más que interpretar el mundo, ahora bien, lo que importa es transformarlo”. Y me pareció que esa frase tenía mucho de cierto. Pero además, me interesaron mucho las críticas que la agrupación tenía sobre la carrera y qué cambios proponían por los que había que luchar. Así que me acerqué a las reuniones y empezamos a debatir, no sólo sobre filosofía sino también sobre la realidad social. Y me parecía que era muy coherente todo el planteo de lo que había que hacer para frenar con las injusticias que a mí más me dolían. Y así fuimos avanzando en los debates.
Sin embargo, lo que me terminó de convencer y enamorar fue el método con el que debatían y resolvían. Me acuerdo que me invitaron a una reunión donde estaban todos los militantes del MST de la Facultad. Se decidía qué postura tener sobre un fenómeno muy importante. Y el debate fue acalorado, pero respetuoso. Y después de discutir, se votó. Y todos, los que ganaron y los que perdieron la votación, salieron a implementar lo que se había decidido. Ese clima de democracia, donde todos podían discutir y ser parte de la definición, no lo había visto en ninguna otra corriente.
Y, además, fue el año del Argentinazo, donde miles salimos a la calle contra el ajuste de Cavallo y De la Rúa. Fue un proceso impresionante, todo se puso patas para arriba. Y en la calle, a diferencia de lo que se debatía en la facultad sobre si el hombre es malo o no por naturaleza, se notaba un clima de muchísima solidaridad. Si te caías en el medio de una corrida, había decenas de personas que te ayudaban, por ejemplo. Participamos de cientos de marchas, de asambleas barriales, y fui haciendo la experiencia con nuestra política en un proceso de mucha convulsión. Y en todo ese proceso, quedaba muy en claro que ninguno de los partidos del régimen iba a resolver las demandas de la población. Y que sólo desde el MST no teníamos miedo a desarrollar cada vez más la movilización popular, pero con medidas concretas y anticapitalistas para dar vuelta todo, que era lo que se necesitaba en ese momento. ¿Cómo no convencerse entonces de dedicarle la vida a la construcción de esta herramienta revolucionaria?
Sabemos que sos docente y dirigente sindical. Contanos de eso
Soy profesora de Biología en escuelas secundarias. Me recibí en el Joaquín V. González, que es uno de los 29 profesorados que el macrismo quiere cerrar con el proyecto que resistimos junto a miles de compañeres de las comunidades educativas, llamado Unicaba.
Actualmente trabajo en dos escuelas públicas, la Escuela de Danzas Nº1 y la Escuela de Teatro. En esta última, estamos también resistiendo un cambio de plan de estudios, la “Secundaria del Futuro”, que de futuro positivo no tiene nada. Al contrario, intenta vaciar los contenidos y preparar a nuestros estudiantes como mano de obra barata en el mercado laboral. Este plan, es continuación del que estamos padeciendo actualmente, la NES que el macrismo implementó en la Ciudad, amparándose en la Ley Nacional de Educación sancionada durante el gobierno kirchnerista, cuestión que en ese momento ya denunciábamos. Y propusimos siempre que no van más los planes inconsultos, y que por eso hay que llamar a un Congreso Pedagógico Nacional resolutivo, donde discutamos de conjunto qué educación necesitamos y para qué país. Congreso en el que no tengan injerencia instituciones retrógradas y antiderechos como la Iglesia Católica, que es una de las principales opositoras de que demos ESI en las escuelas. Y que no pueda impedir que avancemos hacia la ESI feminista, disidente y con presupuesto que actualmente en medio de la ola feminista necesitamos.
Yo llegué a la enseñanza ya convencida de que no hay salida sino es tirando este sistema capitalista. Pero el trabajo en las escuelas me lo confirmó, y por eso, no podía estar escindido de militar también en el lugar de trabajo y construyendo nuestra agrupación Alternativa Docente.
Entendemos que es fundamental la organización de toda la docencia, porque lo que parecen problemas aislados de cada escuela, es en realidad parte de un plan global de los sucesivos gobiernos para destruir lo público. Y que, para enfrentarlo, hay que debatir democráticamente planes de lucha que estén a la altura de las peleas que tenemos que dar. Y por eso, nos decidimos a participar y dar la pelea en los sindicatos, que es la herramienta que tenemos los trabajadores para que nos amparen en esas luchas.
Por eso nos definimos a dar la pelea dentro de ellos, peleando por otro modelo sindical también. Soy actualmente soy Secretaria Gremial de ADEMyS, sindicato docente de CABA. Y en cada uno de los lugares donde estamos, planteamos lo mismo: hace falta una nueva dirección de la docencia, que potencie la fuerza que en conjunto con las comunidades educativas y la población tenemos y que ya hemos demostrado. Que una los conflictos, que llame a asambleas todas las veces que sea necesario para que debatamos entre todos cómo seguir. Y que, en el caso de UTE, tenga proporcionalidad en el organismo de conducción de las corrientes de opinión y de género, porque no puede ser que el que gane se lleve todos los cargos y que encima en un gremio lleno de mujeres, la mayoría de los secretarios generales sean hombres. Y que tengan vocación de coordinar con el resto de los trabajadores, porque nos atañen las mismas políticas de ajuste.
Porque en la ciudad, estamos llenos de desafíos. Hay problemas gravísimos de infraestructura, las viandas son cada vez peores y en menor cantidad. Y ni qué hablar de los salarios docentes, que están muy por debajo de la inflación, y por debajo de la línea de pobreza. Todo esto, puede resolverse si en lugar de destinarle millones de pesos al pago de la deuda externa, le destinamos ese dinero a las escuelas. Y también, si destinamos los fondos que en subsidios se destinan a las escuelas privadas y confesionales.
Muchas veces mientras nos formamos nos quieren convencer de que, si en nuestra carrera logramos cambiar la realidad de sólo uno de nuestros estudiantes, nuestra tarea está cumplida. Pero ver la terrible realidad de las familias y de los chicos, y del abandono estatal, te confirma que, en el marco de este sistema, no hay salida. Por eso, sabemos que no nos podemos quedar solo en las peleas sindicales, aunque estas son muy importantes. Por eso, construimos además el MST, porque no vamos a lograr resolver los problemas educativos si no vamos contra este sistema capitalista que ya no tiene margen para darnos ninguna salida.
Qué expectativas tenés a partir de ocupar una banca socialista en la Legislatura
En primer lugar, quiero decir que esta banca no se hubiera podido conquistar si no fuera por la militancia incansable de todos los compañeros del MST no sólo en esta campaña, sino en todos los años previos. Todos esos años en los que fuimos consecuentes en la necesidad de la unidad de la izquierda. Y gracias a esa coherencia, es que logramos este año el FIT-Unidad y esta banca.
Y vamos a hacer lo que hemos hecho siempre, que es ponerla al servicio de todas las luchas, los trabajadores, la juventud, las mujeres y disidencias. Sabemos que es una institución retrógrada, que lejos de resolver los reales problemas de la población, se la utiliza para mantener los privilegios de unos pocos, de los negociados y acomodos. Pero justamente contra eso vamos a batallar.
Vamos a ir, como ya lo hemos hecho con Vilma Ripoll y Alejandro Bodart, mis compañeros que fueron diputados y que son una referencia para mí, contra todos los privilegios de la casta política. No puede ser que mientras los salarios están por debajo de la línea de pobreza, los legisladores puedan aumentarse el sueldo, y por eso vamos a volver a plantear que deben cobrar lo mismo que una directora de escuela. Además, hay que decir que el gobierno es uno de los principales precarizadores de los trabajadores. Queremos defender todos los derechos de los trabajadores, no solo los del sector estatal.
Es una vergüenza que si legislan sobre lo púbico, usen las escuelas y la salud privadas, y ahí se hace fundamental nuestro proyecto de que los funcionarios estén obligados a utilizar lo público. Y también queremos plantear fuerte que en la ciudad más rica del país, las escuelas y los hospitales públicos se estén cayendo a pedazos mientras le destinan miles de pesos por segundo a una deuda externa que es ilegal, ilegítima y fraudulenta.
Por supuesto que bancamos la pelea por el aborto legal, seguro y gratuito y por todos los derechos de las mujeres y las disidencias. En ese sentido, también vamos a plantear la defensa de la ESI obligatoria, feminista, disidente y con presupuesto. Y, obviamente, la separación de la Iglesia del Estado. No podemos olvidar que fuimos parte de la única lista 100% verde, que no unió pañuelos, como lo hizo el Frente de Todos, y que justamente por eso ahora habla de la trampa de la despenalización. Y claro, qe se destine presupuesto urgente a las leyes contra la violencia de género y la construcción urgente de refugio para mujeres violentadas. La ciudad sigue estando muy por debajo de las recomendaciones de la ONU.
Pero, estoy convencida de que ninguna de esas peleas se puede dar sólo desde ese lugar. Sólo con la movilización y la organización de los sectores afectados y de la población. Y eso es lo que con nuestra corriente, el MST nos vamos a jugar a fondo a desarrollar.
Un mensaje a la militancia del MST y la LIS
Vengo hablando de los problemas y las propuestas de la Ciudad. Pero sé que son los mismos en muchísimos de los países a nivel mundial. Porque son generados por el sistema capitalista, machista y patriarcal que saquea el medioambiente, que explota a los trabajadores y que oprime a las mujeres y a las disidencias.
Estamos en una coyuntura donde se demuestra que los pueblos van a salir a resistir esos ajustes. En estos últimos meses vimos como en todos los continentes se dieron movilizaciones de masas. Actualmente estamos vivenciando la enorme lucha del pueblo chileno contra las medidas económicas de Piñera.
Y en este marco, la fundación de la Liga Internacional Socialista, nos deja en muchas mejores condiciones para fortalecernos y fortalecer la lucha en cada uno de esos países. Hay que seguir apostando a hacer crecer la LIS, porque es la única manera para que, de una vez por todas el miedo cambie de bando, y que finalmente construyamos una sociedad socialista donde gobernemos los que nunca gobernamos.
Entrevistó: M. R.