Les estatales y el nuevo gobierno: Por mal camino
El gobierno de Macri, en su afán de achicar el denominado “el gasto público”, llevó adelante un brutal ataque contra les trabajadores del Estado. Contó con el apoyo mediático que día a día taladraba la cabeza de millones acusando a les estatales de “ñoquis”,”vagos” y de servir al aparato político del anterior gobierno.
Así Cambiemos terminó su mandato con 35 mil despidos en organismos del Estado nacional más miles de despedides en organismos provinciales y municipales.
Esta persecución buscó esconder un modelo de país dependiente y presa fácil de los monopolios nacionales y extranjeros. Los ejes de esta política fueron:
- Acotar el control del Estado sobre los entes privados
- Desfinanciar los organismos encargados de la investigación y desarrollo científico
- Aumentar el desempleo para reducir los salarios en la competencia del mercado laboral
- Fomentar la precarización laboral y la tercerización de sectores, cercenar derechos adquiridos.
- Menguar las condiciones laborales, como medicina laboral, herramientas de seguridad, días de estudio y capacitación.
Todo esto no pasó sin la reacción de miles de trabajadores que resistimos con movilizaciones callejeras, ruidazos, ocupación de sectores (como en Agroindustria o el Astillero Río Santiago), cortes de rutas y avenidas como el Hospital Posadas o los trabajadores del INTI, enfrentamientos con las fuerzas de represión. Y lo hicimos frente a la mirada cómplice de muches dirigentes sindicales, que en su afán de no perder sus privilegios optaron por justificar abiertamente este atropello, como fue el caso de UPCN. O el rol de ATE, de amagar pero nunca ir a fondo y centrar en la construcción del “entramado político” de su interna por sobre las necesidades inmediatas de miles de familias que quedaban en la calle. Por abajo, el discurso de que merecíamos atravesar el vaciamiento por “no saber votar” junto a la constante desmovilización y el llamado a “votar bien” en octubre de 2019. Este accionar ayudó a la concreción de miles de despidos, y como contraparte tuvo el costo político de una atomización cada vez mayor de la ATE.
Alberto Fernandez, ¿del dicho al hecho?
Aires de esperanza surgieron con el fin del gobierno macrista. Discursos de recomposición salarial, recuperación de puestos de trabajo y un supuesto plan estratégico de desarrollo de un Estado nacional y popular del Frente de Todos calaban hondo en sectores de la clase trabajadora que, tras haber enfrentado el avance neoliberal, necesitaba apostar a un proyecto distinto.
Desde Alternativa Estatal, advertimos y seguimos sosteniendo que un plan de desarrollo de políticas públicas para mejorar la calidad de vida de las y los argentinos, junto al financiamiento de toda una estructura que pueda llevar adelante semejante tarea es completamente incompatible con los acuerdos leoninos con especuladores como el Fondo Monetario Internacional. Y toda la orientación del gobierno de Fernández es destinar los pocos recursos que tiene a cumplir con los compromisos adquiridos por anteriores gobiernos de manera ilegal, ilegítima y fraudulenta. Si la prioridad es cumplir los compromisos de una deuda impagable, ¿Cómo piensan llevar adelante la reincorporación de decenas de miles de despedidos de la era Macri?
Que vuelvan todes
Por ejemplo, mediante la organización y la movilización, les compañeres despedides del INTI recuperaron 150 de 260 puestos de trabajo tras el recorte de la etapa Macri. Tienen una ubicación importante para ser punta de lanza en la coordinación por la reincorporación de muches compañeres que están en situación similar ya que aún, lugares emblemáticos como el hospital Posadas o el ministerio de Agricultura no hay ni noticias sobre las reincorporaciones, ni hablar en municipios y provincias. Lamentablemente hasta ahora la junta interna de ATE del Instituto no ha lanzado una verdadera campaña para que vuelvan todes. Pero estos avances muestran que la organización es la única salida y que entre les trabajadores hay fuerza para conseguirlo. Nuestra propuesta es que vuelvan todes les despedides de la era Macri que quieran hacerlo.
No sobramos trabajadores, faltan políticas públicas.
El decreto 132/2020 que congela las contrataciones en el Estado nacional por seis meses, trae consigo el discurso de la dotación óptima de personal. Y no es menor tampoco el decreto 156/2020 donde con el argumento de que se excluye a altos directivos jerárquicos de la doble indemnización, también afecta al conjunto de trabajadores del Estado que son parte de la planta permanente. Remarcamos esto último ya que a pesar de que el gobierno dejó trascender que en los próximos 4 años pasarían 10 mil empleades a planta permanente; son más 70 mil compañeres quienes continúan precarizades, sin estabilidad ni derechos laborales. Lo que hace falta es un plan de pase a planta permanente para que de forma urgente se elimine por completo la tercerización y precarización en el Estado.
Salario y paritarias: pocas (y malas) noticias
En el Estado nacional estamos sin fecha de paritarias, con recortes de beneficios puntuales de cada repartición o la quita de la posibilidad de horas extras, vitales para llegar a fin de mes. El mínimo aumento salarial hasta ahora fue por decreto, en cuotas y como adelanto de paritarias. Similar situación en CABA con el 16% en dos cuotas. Y el peor caso es el decretazo miserable del 7% de Kicillof en Provincia de Buenos Aires. Por el contrario en todos los ámbitos necesitamos una urgente recuperación de lo perdido con un aumento general de salarios para igualar la canasta básica y una verdadera cláusula gatillo para no volver a quedar por detrás de la inflación. Los fondos alcanzan y sobran si se deja de pagar la fraudulenta deuda externa.
El gobierno comenzó mal su gestión con respecto a los trabajadores y trabajadoras del Estado. Cambió el discurso pero sigue viéndonos como un número a ajustar, cuando en realidad somos les que posibilitamos el acceso de la población a ejercer sus derechos. Las posibilidades de obtener condiciones laborales adecuadas y reincorporar a les despedides están congeladas para cumplir con los intereses económicos de sectores como el FMI y los bancos, hostiles a la clase obrera y los sectores populares. La única manera de garantizar el trabajo y una vida digna a cada une de nuestres compañeres sólo será con organización, democracia y lucha poniendo por delante nuestros derechos por sobre cualquier interés patronal. Para eso construimos ANCLA y Alternativa Estatal y te invitamos a ser parte.
Andrés Martínez
Alternativa Estatal en ANCLA – MST
CABA