COVID-19: El rol de los estudiantes

La pandemia puso patas para arriba a toda la sociedad, también a los estudiantes. Abundan las inquietudes acerca de cuestiones académicas de continuidad pero también de qué rol podemos jugar para combatir la pandemia. Desde las universidades, el gobierno y el CIN de los rectores alientan los voluntariados. El país espera todavía su pico y el colapso del sistema de salud. Nuestra posición.

La universidad masiva en Argentina por su gratuidad, su calidad académica, su historia de luchas, su inserción social a nivel nacional es lo que permite pensar un plan masivo de reforzamiento de combate al COVID-19 que involucre a los estudiantes. De otra manera podría ser un desaprovechamiento de recursos humanos e intelectuales. La incógnita es cómo tiene que ser ese plan. Veamos ejemplos de propuestas a diferentes niveles:

  • En España se llamó a un voluntariado a los estudiantes de las universidades para ayudar en tareas de recepción y tareas ambulatorias
  • En la UBA, la Facultad de Medicina habilitó un voluntariado y se anotaron 7000 estudiantes que serían incorporados a los Triage[i], logística, seguimiento y vacunación en los hospitales
  • En la UNR se está produciendo Alcohol en gel y la Municipalidad de Rosario junto con la UNR impulsan un voluntariado de asistencia y acompañamiento a adultos mayores
  • En la UNLaM se están elaborando insumos como mascarillas, barbijos y piezas de respiradores para hospitales de la zona, aunque sin participación estudiantil
  • Conocemos iniciativas individuales de estudiantes que tienen impresoras 3D u otros recursos y producen sin fines de lucro

Los datos anteriores, demuestran los niveles de predisposición y solidaridad que prima en nuestro pueblo en general y en el sector estudiantil, de la juventud en particular.

  

El gobierno y el CIN

Partiendo de valorar positivos las muestras de predisposición de los estudiantes, queremos poner sobre la mesa nuestras opiniones y propuestas hacia los proyectos que nos proponen desde los niveles de gobierno y los rectores. Entendemos que la incorporación de estudiantes a jugar un rol en esta crisis podría ser clave para evitar el colapso del sistema de salud, y para poder dar respuestas rápidas y efectivas a los problemas que se empiecen a plantear fruto del Covid-19 y de la cuarentena, que genera dificultades de tipo económico para todo un sector de nuestro país.

Hay un decreto que elabora el gobierno y el CIN (Consejo Interuniversitario Nacional) que sería anunciado en las próximas horas, es un voluntariado que incluye a estudiantes universitarios de los últimos dos años de las carreras de los Deptos. de Salud. También se contemplan las medidas de protección, los viáticos, seguro de vida y un reconocimiento del tipo “mención de honor” por parte de las universidades a los estudiantes involucrados. Las contemplaciones son correctas. Pero tenemos algunas propuestas más.

La izquierda propone

Creemos que todas las carreras pueden verse involucradas en un plan integral. Algunas ideas, varias que tomamos de ejemplo de experiencias que se están desarrollando:

  • Los estudiantes de Ingeniería junto a los estudiantes de los talleres del 7° año de las escuelas técnicas podrían enfocarse en la producción de insumos básicos para generar un stock a bajo costo y evitar las extorsiones de los sectores privados
  • Los estudiantes de Humanidades junto a los estudiantes de Abogacía y de terciarios puede jugar un rol clave en el relevamiento en los barrios para elaborar un plan de testeos masivos, y además, para asistir (o encaminar necesidades) a las familias  que necesitan alimento, medicina, contención, asesoramiento y otros recursos. Sabemos por ejemplo que han aumentado las llamadas por violencia de género, porque hay muchas mujeres conviviendo con agresores. Sabemos también que para el alimento el gobierno elabora un plan: Que no sea el ejército, los estudiantes lo podemos garantizar
  • Los estudiantes de economía y administración serán los que ayuden a elaborar y eleven los presupuestos necesarios fruto de los relevamientos y la producción de insumos a las oficinas de Estado correspondientes
  • Los estudiantes de Ed. Física pueden estar involucrados en los planes de rehabilitación de personas infectadas de este u otros padecimientos
  • Los estudiantes de arquitectura podrían estar involucrados en la planificación de reubicación de los sectores hacinados, lo cual es un problema para el contagio y un caldo de cultivo de la violencia
  • Los estudiantes de la salud, especialmente los de nutrición pueden ayudar a elaborar planes de alimentación con un cálculo nutricional acorde para asistir a las familias que necesiten. Esto se puede materializar con estudiantes de todas las carreras en los comedores universitarios preparando viandas o Kits alimentarios
  • Los estudiantes de comunicación pueden diseñar una propuesta comunicativa efectiva para llegar a los barrios y además, socializar de manera masiva a toda la sociedad lo que se hace, y garantizar el derecho a la información. Además, las universidades con medios o multimedios que tengan antenas, deberían liberar su señal para permitir que la comunicación en las zonas sea más fluida

Por la gravedad no sólo sanitaria, sino social y económica que transitamos y que prevemos se va a agravar consideramos que es necesario anticiparnos, no desperdiciar recursos y elaborar un plan integral con la incorporación de todos Departamentos.

En este sentido, es necesario aclarar que la juventud es el sector que más padece el desempleo y la precarización. En muchas de nuestras universidades vemos un gran porcentaje de primera generación, de barrios populares que con mucho esfuerzo intentan el paso por la universidad, la mayoría en combinación con el trabajo. Hoy la cuarentena profundiza los problemas, con flexibilización laboral, despidos, suspensiones o la imposibilidad de generar ingresos. Esto plantea al sector una incompatibilidad material con poder ejercer la solidaridad de forma voluntaria.

El plan integral tiene que considerar una remuneración acorde a la canasta básica a todos los estudiantes que se inscriban. Esta medida la creemos esencial por tres motivos:

El primero es que representa un incentivo que puede masificar el número de inscriptos y evitar las posibles bajas en servicio

El segundo es que la remuneración contribuye a resolver dos problemas: la desocupación y parálisis de un sector precarizado a la vez que fortalece un plan integral contra la pandemia

Por último, evita que los nuevos voluntarios contribuyan (objetivamente, no por voluntad propia), a “competir”, invisibilizar y desjerarquizar los reclamos de los trabajadores de la salud de insumos, aumento de sueldos, pase a planta y reconocimiento de residentes y enfermeras

Bueno pero ¿Se puede?

Somos categóricos: si. Y explicamos cómo. Es evidente que un plan integral como el que proponemos requiere poner a disposición muchos más recursos no solo humanos sino también económicos de los que están contemplados en el decreto que prepara el gobierno y en los voluntariados en curso desde ministerios, secretarías y universidades. Lo que debemos preguntarnos es si es necesaria esa inversión. Nosotros otra vez, creemos que sí. Ayer conocimos que Farmacity acaparó un millón de pesos en alcohol en gel, incumpliendo la Ley de Abastecimiento. También conocimos que el Ministro de salud le entregó el monopolio de los tests a Roemmers, un poderoso laboratorio. Bueno, creemos que hay que poner fuertes impuestos a los especuladores, y declarar de utilidad social los laboratorios, no puede ser que la “tolerancia cero” sea solo en los barrios contra los jóvenes pobres. Eso nos daría recursos, pero además, si le sumamos impuestos a los ganadores del gobierno macrista: los bancos, los sojeros, el FMI (con el no pago de la deuda), tenemos aún más recursos a disposición.

Con estas medidas podría materializarse una definición con la que insiste el gobierno en su discurso: jerarquizar la salud. Lo vamos a decir más claro, la política del voluntariado en manos del estado es precarización masiva, por eso los tenemos que tomar en nuestras manos y cambiarles el carácter, organizándonos en Comités de Emergencia junto a los trabajadores del sector y sus sindicatos para proponer todas estas medidas y levantar además sus reclamos. Llamamos a todos los estudiantes del país que estamos ansiosos ser parte del combate al COVID-19 a qué exijamos un plan integral que nos incluya en condiciones dignas.

Escribe: Ana Paredes Landman

[i] Método de selección y clasificación de pacientes empleado en la medicina de emergencias y desastres. Evalúa las prioridades de atención