Cipolletti / Barrio Obrero: basta de abandono

 

Escribe: Jere Zalazar

La situación de las tomas en Cipolletti es crítica. Además de estar expuestos a un virus con circulación local también tienen que enfrentar la desidia del Estado. Estamos hablando de 36 asentamientos, un total de 6.574 familias según el ReNaBaP.

Entre el abandono y la pandemia…

En el contexto que estamos atravesando, el Barrio Obrero es una de las tomas que padece arduamente la situación por su condición de no estar regularizada. Es decir, no cuenta con los servicios básicos como luz, agua, gas, cloacas, etc. Todo lo que podemos ver en sus distintas manzanas que lo conforman son fruto del trabajo de vecinxs que durante años se organizaron y lucharon por tener una vivienda propia. Un derecho, que en esta provincia, donde las inmobiliarias levantan edificios como si nada, es tan difícil lograr. Son lxs vecinos lxs que en el día a día se encargan de solucionar los problemas que surgen, son lxs que enfrentan como pueden el abandono del Estado. El día 2 de junio falleció Aldana, una niña de 11 años, tras el incendio de una casa del sector “A”. Dos hermanxs y su papá aún se encuentran internadxs en grave estado. Las pericias indican que el fuego pudo haberse generado por el desperfecto de una garrafa con la que se calentaban para no pasar frío. En la Patagonia de Vaca Muerta, esto no puede considerarse como un accidente, esto es consecuencia de un Estado que decide mirar para otro lado. La pandemia también golpea fuertemente, y es que las consecuencias siempre la pagan lxs más carenciadxs. El 8 de junio falleció un vecino por Covid-19 y en el lugar sigue habiendo familias aisladas. Todo se relaciona con lo mismo: la desidia estatal.

Soluciones, ahora

Mientras las pandemia sigue avanzando sobre los asentamientos la única medida del Gobierno es flexibilizar cada vez más la cuarentena habilitando la apertura de actividades no esenciales. Esto es una incoherencia total cuando sabemos que en nuestra ciudad hay circulación local del virus. Por otro lado, la situación de las tomas no puede seguir siendo postergada. Entendemos que la muerte de Aldana se pudo evitar de no ser por la irresponsabilidad de quienes toman las decisiones. No se puede permitir que más vecinxs sigan pagando las consecuencias sobre el abandono al que están sometidxs.

Frente a esta situación rechazamos la flexibilización de la cuarentena y reclamamos testeos masivos, medidas que ayudan a la prevención y a la localización de los focos de infección. También pedimos asistencia alimentaria para los comedores a través de las organizaciones sociales y un ingreso de $36 mil para lxs trabajadorxs informales del lugar. Sumado a esto, se hace más necesario que nunca la regularización y urbanización de las tomas. Lxs vecinxs no pueden seguir esperando.