LANUS: Trabajadores esenciales en riesgo

En estos últimos días, se empezaron a conocer varios casos de COVID en el sector estatal en el distrito de Lanús. En el Registro civil cabecera de distrito de la calle Miguel Cané, en la Municipalidad y en diferentes entidades del sector público. Los trabajadores estatales somos uno de los sectores más golpeados, con una paritaria cerrada por decreto, con sueldos de hambre, y condiciones de trabajo absolutamente deplorables. Algunes cumpliendo guardias, otres, con un teletrabajo excesivo sostenido únicamente por les trabajadores.

Quienes debemos cumplir guardias, en el marco de la esencialidad de nuestra tarea, nos vemos expuestos, además, a hacerlo en algunos casos sin ninguna protección, ni bioseguridad de nuestra salud. Ante los casos de COVID relevados ni siquiera se cumple el protocolo para resguardar a les trabajadores que han estado en contacto cercano con quien dio positivo. Sólo se desinfecta el lugar, pero no se resguarda a les trabajadores y a sus familias, quienes se ven obligades a seguir trabajando en las mismas condiciones, sin saber si son o no portadores del virus hasta que pasen los 10 días estipulados.  Así, los funcionarios de la provincia aplican un protocolo paralelo de silenciar al enfermo para mantener las oficinas abiertas. ¿Eso no es acaso jugar con nuestras vidas?

¿Cómo cuidan a quienes nos cuidan?

La primera línea dentro de les trabajadores esenciales es la que más sufre todas estas condiciones. Arriesgando su vida a cada momento, en muchos casos haciendo hasta diferencia entre medicas/os y enfermeras/os, en la distribución de elementos de bioseguridad. Es por eso que aumentan cada vez más el número de infecciones de COVID entre les trabajadores de la salud.

Claramente, el gobierno hace un discurso que intenta mostrar empatía con estas cuestiones, pero que luego no lleva a la práctica en medidas que realmente prioricen nuestra vida. Sus prioridades están puestas más en resguardar los intereses de un sector privilegiado y enriquecido que de proteger y garantizar los derechos de les trabajadores y de los sectores más pobres que vienen cada vez más golpeados por esta crisis brutal.

El problema siempre es el sistema en el que vivimos. El capitalismo no da lugar a otro tipo de políticas y sólo profundiza la brecha entre aquellos que más tienen y los de abajo. Es en este contexto en el que nuestros derechos van quedando de lado, trabajando en una situación tan difícil y cambiante, adaptando nuestro trabajo y vida a esos cambios. Hemos tenido que inventar nuevas formas de accionar frente al COVID-19 ante tanto abandono, falta de recursos e incumplimiento sistemático de protocolos. La vida del trabajador esencial cambió radicalmente, pues tenemos que jugarnos la vida cada día en nuestro laburo sin que se nos tenga ninguna consideración de ningún tipo.

Nuestro trabajo día a día 

Vivimos en una trama social cargada de incertidumbre, rodeados de precarización en los diferentes sectores del estado, cargados de angustia, con temor a lo desconocido, con miedo a la muerte, expuestos a todo sin ninguna protección, en medio un clima de romantización de nuestra tarea y trabajo como si fueran acciones de héroes en lugar de lo que somos: trabajadores a los que hay que cuidar. Como si fuera poco, se nos exige solidaridad con las patronales que viven llorando que no dan abasto ¿y con nosotros quién es solidario? Bajo el paraguas de la crisis económica pretenden silenciar nuestras voces y que no enfrentemos a una patronal que quiere seguir ganando a costa nuestra y frente a un gobierno que ni nos protege, ni les cobra un impuesto a los ricos que permita dar la ayuda necesaria a los millones que la necesitan de verdad.

Esta situación es igual en casi toda la provincia y Lanús no escapa a esa lógica. Es por eso que crecen la lista de infectades en todos los hospitales y también crece el silencio ante esa situación, para no tener que cumplir con los protocolos establecidos de hacernos el hisopado, mandarnos 15 días a todo el personal a su casa y dar intervención a la ART.

Mientras los sindicatos estatales…

Esta semana, diferentes gremios “festejaban” los próximos pases a planta de trabajadores precarizades dejados por los sucesivos pésimos gobiernos de Scioli y de Vidal. Nosotres también nos alegramos porque una gran cantidad de trabajadores cambien su situación laboral. Pero no podemos dejar de señalar que esta forma de contratos de total precariedad siguen siendo una práctica habitual incluso hoy y no se observa hasta el momento una decisión y acciones concretas que den finalidad a la precarización laboral en el Estado. Más aún, los nuevos ingresos a la administración pública para paliar la pandemia se dieron bajo ese marco de precarización.

En comunicación con diferentes sectores estatales, les trabajadores hacen los mismos reclamos que ya deberían ser oficialmente una denuncia. El trabajo esencial es cada vez más peligroso y con el aumento de contagios en el AMBA los sectores laborales no son una garantía para nadie. Hoy en día no sabemos quiénes podemos ser portadores del virus y se comienzan a dar los contagios internos. Hemos recibido el testimonio de compañeros del sector salud, personal que está en la primera línea, que estuvieron expuestos a pacientes con COVID-19 y no fueron testeados por no tener síntomas. Esto nos parece una actitud criminal pues que se incumple el propio protocolo provincial de COVID-19 que indica de manera expresa como actuar y llegamos a la terrible conclusión de que no hacen los test al personal porque no quieren quedarse sin trabajadores. Los gremios burocráticos no dan respuestas, ni soluciones. Sólo saben sacarse fotos fingiendo recorrer hospitales, algún que otro sector, pero jamás les interesó saber lo que padecemos les estatales en los diferentes sectores.

El decreto del gobernador de la provincia de Buenos Aires, quien emitió el comunicado al principio de la cuarentena, dejó expuesto al personal de salud con enfermedades preexistentes. Dolorosamente, seguimos sumando compañeres fallecidos por causa del virus por abandono del Estado y los gremios que, en vez de reclamar y luchar por nuestras vidas, solo buscan no agitar las aguas para conservar sus privilegios políticos. En este sentido, seguimos sin respuesta sobre las licencias al personal menor de 60 años con factores de riesgo. Algunes delegades mencionaron arreglos internos de los gremios con los directores, otros compas han sufrido los descuentos del SAMO y otras bonificaciones mientras los ñoquis amigos de las patronales hace meses que no laburan. ¿Paritarias? Más adelante ¿Recategorizaciones? Esa te la debo.

El IOMA un gran agujero negro, donde miles de compañeres se encuentran afectados por la falta de prestaciones, en muchos casos dejándolos sin  tratamientos, pésima gestión y  manejo pocos claros de la obra social. Mientras les estatales no tenemos opción de poder elegir, acá se da nuevamente el doble discurso, ante los recientes rumores en los medios de comunicación sobre el gobernador de la provincia de Bs. AS. Quien a pesar de su defensa sobre IOMA,  Kicillof  y la mayoría de su gabinete optaron por contratar OSDE, lejos estarían de quedar sin atención médica en tiempos tan difíciles. Es por eso que desde Alternativa Estatal –ANCLA planteamos que la salida es un Sistema Único de Salud.

Compañeres; la situación de la pandemia es muy crítica y estamos en el peor momento por el aumento exponencial de contagios. En ese sentido, nos parece relevante visibilizar las problemáticas que padecemos en lo cotidiano no solo para quedarnos en la queja, sino para encontrar estrategias sindicales en defensa de nuestras condiciones laborales. Por eso la importancia de repensar nuestras prácticas como trabajadores en un sentido amplio y buscar puntos en común para unificar los reclamos. Desde Alternativa Estatal y la Multicolor creemos que el camino es la organización y un plan de lucha que surja desde las bases, exigiendo a los sindicatos asambleas para discutir en todos los sectores y en cada lugar para enfrentar la crisis sanitaria y la fuerte crisis económica que también sacude nuestras vidas. Urge un plan de lucha, es necesario enfrentar esta situación para preservar nuestras vidas. Cuidar a quienes nos cuidan, a les trabajadores y a toda la comunidad en su conjunto, no puede ser una declamación sino una fuerte política pública.

Roxana Szyszko, directiva de la CTA-Autónoma Lanús

Nazareno Mujica,  referente estatal de Registro Civil Pcial