IVA con mala leche

En el marco de una nueva iniciativa legislativa por parte del gobierno para ampliar el Presupuesto 2020, se prevé el regreso del IVA a la leche. Mientras tanto, el impuesto a las grandes fortunas continúa archivado.

Nicolás Zuttión

El ministro de Hacienda elevó un nuevo proyecto al Congreso para discutir la extensión del Presupuesto 2020, con la aspiración de que diputados y senadores aprueben un aumento de $ 1,8 billones para lo que resta del año.  Con el argumento de la pandemia, el Ejecutivo tiene la intención de ampliar el gasto para paliar la emergencia.

La novedad, o mejor dicho el dato de color, es que lo que esbozan en su discurso se cae en lo presentado en el papel. En primer lugar, porque sobre lo que se trabaja es una extensión del presupuesto macrista de 2019, ley que como hasta denunciaron varios funcionarios actuales estaba orientada a destinar montos onerosos al pago de la deuda externa (casi 800 mil millones de pesos).

Pero lo nuevo y propio del gobierno de Alberto Fernández es que ahora se piensa anexar a la leche, un producto esencial para las mayorías de las familias, al impuesto más regresivo del país: el IVA.

El nuevo impuesto

Como refiere el título de este artículo, la iniciativa que será presentada hoy en la Comisión de Presupuesto, presidida por Carlos Heller, incluye la extensión del Presupuesto 2020 que consigo trae la unificación del IVA a la leche en 10,5%.

La discusión se podría desglosar de la siguiente forma: se reduce la tasa de IVA de un 21% al 10,5% para las leches con aditivos, pero se pasa del 0% al 10,5% para la leche común, sin aditivos, que había sido eliminada del mercado por el empresariado del sector. Esto a su vez demuestra la necesidad de regular la concentrada industria láctea a través de mecanismos de control social, por parte de sus trabajadores y las organizaciones de consumidores.

Haciendo una analogía con una técnica periodística, se podría sostener que el gobierno de Fernández profundiza una especie de pirámide invertida con respecto a los impuestos. Incluye nuevamente a un producto de primera necesidad dentro del IVA, mientras sigue archivando medidas que afecten a las grandes fortunas para atender la emergencia económica que existe en el país.

Eliminar el IVA y gravar las grandes fortunas

Desde hace tiempo venimos sosteniendo que hay que aplicar nuevas medidas fiscales, pero opuestas por el vértice a las presentadas. Partiendo de la eliminación del IVA a todos los productos que componen la canasta familiar básica, hay que avanzar con la aplicación del proyecto presentado por el FITU para gravar a los grandes patrimonios, los bancos privados, las altas rentas, la gran propiedad agraria y las viviendas ociosas de mayor valor. Con esta medida se podrían recaudar 15.000 millones de dólares, que sólo afectarían a 15.000 personas, los dueños de grandes fortunas.

Sólo tomando medidas de este tipo se terminaría con las políticas de desigualdad de un gobierno que no para de empujar a grandes franjas de la sociedad hacia la pobreza y se descargarían los déficits existentes sobre los sectores que han ganado y continúan en esa senda a pesar de los tiempos de pandemia.