Coronavirus: Argentina en el top ten de contagios

31 agosto, 2020

De acuerdo al reporte del Ministerio de Salud de la Nación, durante las últimas 24 hs, la cifra de contagios fue de 9.309 casos. Con estos números en cuenta, el total de contagios en el país asciende a 417.735, mientras que los fallecimientos contabilizados hasta la fecha son 8.660.

Argentina ahora es el cuarto país del mundo con más casos diarios registrados de Covid-19. A su vez, ya nos encontramos entre los 10 países con más contagios en el mundo. Esto no pudo haber sido posible de no ser por la continua flexibilización de la cuarentena, política que Fernández, Kiciloff y Larreta, junto a los demás gobernadores, llevan adelante en complicidad. Las alarmantes cifras parecen no tener efecto sobre nuestros funcionarios, que eligen ceder a la presión empresarial antes que proteger la salud de la población.

En materia de testeos, la posición del país a nivel mundial es la inversa. Argentina está en el puesto 123° en cuanto a pruebas realizadas por millón de habitantes. Si bien el gobierno se vanaglorió del desarrollo autóctono de un método de pruebas, lejos estamos de ser una de las naciones que más testea con tan solo 26.000 pruebas por millón.
Alberto Fernández apuntó hacia las manifestaciones como causa del incremento de los contagios alegando: “Cada vez que hubo marchas, 15 días después crecieron los casos de coronavirus”. Una excusa poco creíble y sin basamento científico, que desvía la atención de los patrones y los protege cuando, en función de garantizar sus ganancias, estos fuerzan a sus trabajadores a asistir incluso cuando presentan síntomas. Tales son los casos de Ledesma, Coto y Toyota, por citar unos pocos. Mientras tanto, en Río Negro, el sistema de salud de Cipolletti y General Roca colapsa. Solo en estas dos localidades hay 721 casos activos. No quedan camas de terapia intensiva y empiezan a discutirse “criterios bioéticos” para la asignación de camas.

La cuarentena de 164 días que iba a permitir el fortalecimiento del sistema de salud no está cumpliendo con su objetivo; es más, parecemos no haber alcanzado el pico de casos diarios y ya nos encontramos con la saturación de la capacidad instalada en varios sectores del país. Resulta imposible no recordar que el grueso de las camas disponibles es acaparado por la medicina privada, situación que se mantiene así por el peso del lobby de estas compañías sobre las decisiones del gobierno. Menos de 24 hs duró el anuncio de Ginés González García sobre la centralización del sistema de salud, que rápidamente fue desarticulado por la presión de empresarios como Belocopitt (Swiss Medical).
Desde el MST somos categóricos en cuanto a las medidas necesarias para afrontar esta crisis: hace falta destinar todos los recursos disponibles para el testeo masivo de la población, de modo que puedan aislarse selectivamente -con todos los derechos garantizados- a los sectores más afectados y evitar la propagación del virus. Para lograr esto es fundamental desconocer la comprobada estafa que significa el pago de la deuda externa, mecanismo de saqueo que coarta nuestra soberanía en tiempos de emergencia como los que corren. Solo así puede asegurarse una cuarentena con un ingreso universal equivalente a la canasta básica y un shock de inversión en materia sanitaria. Además, es indispensable avanzar con firmeza hacia un sistema único de salud, ya que el sector privado acapara insumos y recursos que son fundamentales para evitar el colapso al que peligrosamente nos asomamos.

Jeanette Cisneros

Categoría: Política Etiquetas: coronavirus, jeanette cisneros