Movilización del MST en Merlo: el hambre no se toma cuarentena
Más de quinientos vecinos y militantes organizados en asambleas del Movimiento Socialista de los Trabajadores y en el Movimiento Sin Trabajo Teresa Vive nos movilizamos hoy al edificio de la Municipalidad de Merlo. La protesta fue en requerimiento de atención a las crecientes necesidades de los diferentes barrios de nuestro distrito, en medio de una pandemia que no cesa y una crisis económica y social agravada por esta, y que castiga duramente a los denominados barrios populares.
En la numerosa columna, que salió desde la plaza frente a la estación y ocupó varias cuadras de la Avenida Libertador, principal avenida de esta ciudad, podían leerse pancartas que decían “El hambre no espera”, “Basta de ollas vacías”, “Los barrios también existen” y “Exigimos alimentos en variedad, cantidad y calidad”, entre otros, mientras la batucada acompañaba el grito de “que la crisis no la pague el pueblo trabajador” además de otros cánticos. A su paso la movilización iba recibiendo la adhesión de algunos transeúntes mientras otros registraban la escena con sus celulares. La realidad de muchos a quienes ya se nos ha agotado hasta la paciencia.
Los organizadores arrancaron saludando a los diferentes barrios presentes: Barrio Nuevo, El Fondo, Villa Magdalena, Los Aromos, El Ceibo, El Ombú, Pontevedra, Matera, Merlo Norte, Petrachi, Santa Marta fueron algunos de ellos. Además del saludo de delegaciones de Moreno y Marcos Paz. Luego incitaron a continuar la lucha para conseguir respuestas a las crecientes carencias de los barrios, entre las que se destaca la falta de alimentos para las ollas populares, merenderos y hogares, el abandono que sufren las salitas, en medio de una crisis sanitaria, la falta de iluminación y asfalto, el anegamiento de algunos barrios y hasta la falta de suministro eléctrico, como en el Barrio Ombú..
Es que la crisis, acentuada por la pandemia, golpea con particular fuerza a estos barrios postergados. Mientras los gobiernos nacional, provincial y municipal, priorizan el pago de la fraudulenta deuda externa, a los usureros bonistas y al imperialista FMI, o riega con generosos subsidios las arcas patronales, a través de las ATP, por ejemplo. Fondos que salen de los aportes de los mismos trabajadores y termina cubriendo responsabilidades que deberían corresponder a los patrones, entre los que se cuentan grandes corporaciones. Mientras la mayoría de los trabajadores no han tenido paritarias frente a una inflación incesante. Y ni hablar del desempleo estructural, o el trabajo informal que es lo que predomina en nuestros barrios. En el contexto de la cuarentena, a veces no queda otra que optar por salir a buscarse el mango arriesgándose a contraer la enfermedad.
Susana Verón, referente local denunció que como respuesta a la demanda vecinal las autoridades municipales dieron una respuesta ridículamente insuficiente, “un cajón de pollo para los comedores que atienden a quinientas personas”, y que “nos quieren enviar a un comité de crisis donde se reúnen las organizaciones para repartir que productos necesitan. Eso significa que nos tendríamos que ir a pelear con las otras organizaciones para dividirnos lo poco que da el municipio. No nos vamos a ir a pelear con otros compañeros. Queremos que las cosas salgan de acá”, refiriéndose a las autoridades municipales.
Hoy, y luego de la combativa movilización, ofrecieron un bolsón con una decena de productos para cada familia. Creemos que sigue siendo completamente insuficiente, pero pondremos la oferta a consideración de las asambleas que durante los próximos días realizaremos en cada uno de los barrios y comedores. Y nos prepararemos para continuar y profundizar nuestro plan de lucha.
Un primer gran logro es que, fruto de la lucha en la calle, se ha logrado abrir un canal de dialogo con las autoridades municipales, tendiente a ir resolviendo los problemas que arrastran nuestros barrios. Pero dependerá de que continuemos organizados y organizadas y prestos a dar las luchas que hagan falta, que estás demandas se concreten.
El saldo de la jornada de lucha ha sido la vitalidad de nuestro movimiento y nuestro partido, que ha sido desplegada en pleno en el centro del distrito, aún cuando no se movilizó la totalidad de los organizados y organizadas en nuestras asambleas. Y la resolución renovada a continuar la lucha por todo lo que estamos necesitando. Hemos puesto en evidencia que hay una gran disposición en nuestros barrios para dar las peleas que hagan falta por dar vuelta todo a nuestro favor.
Vico Burgos