Klaukol contamina, los vecinos luchan

La Matanza. El pasado 9 de septiembre, vecinos autoconvocados contra la contaminación de Klaukol y distintas organizaciones, desarrollamos una jornada por el cierre de la fábrica contaminante que perjudica a la vida de cientos de vecinos. 

Leiza Benitez

Once años lleva la incansable lucha de los vecinos del Barrio Las Mercedes ubicado en la localidad matancera de Virrey del Pino. Pasan los años, cambian los gobiernos, pero la contaminación por las partículas de Sicilicato -compuestos minerales utilizados para la fabricación de materiales de construcción- que emanan las chimeneas multinacional Sika Klaukol.

Cien vecinos muertos, otros cientos enfermos de cáncer, más de 80 escuelas de la zona afectadas, son algunas de las consecuencias que atacan directamente a los vecinos mientras los empresarios se llevan millones.

Esta planta, que está de manera ilegal en nuestro barrio por ser de categoría 3, permanece de manera impune, los gobiernos miran para otro lado ante nuestro reclamo porque somos pobres…” Expresa Susana Aranda, vecina que lucha por el cierre definitivo de la empresa suiza y que participa del acampe que se encuentra en su puerta con una huelga de hambre que sostiene hace ya más de un mes.

Klaukol, la gigante que mata

Klaukol es una multinacional líder en su mercado. Esta marca, que producía bajo la empresa Parex -de origen francés- y que, luego de ser comprada en el 2019 -por unos 2600 millones de dólares- por la productora de químicos suiza, Sica, produce materiales para la construcción “de primera calidad”. Actualmente tiene instaladas cinco plantas industriales en Argentina, siendo su fábrica más grande en Latinoamérica, la que se encuentra a metros de “Mercedes Benz”, la imponente autopartista ubicada en Virrey del Pino, al sur de La Matanza.

En el año 2009, cuando explotó una tolva que dejó por tres días una especie de “ceniza volcánica” en el aire, los vecinos del barrio Las Mercedes comenzaron a preocuparse y a asociar las enfermedades, los problemas respiratorios y las muertes por cáncer. Con paquete de químicos que emanada constantemente la multinacional -que funciona desde el año 2000-, por sus catorce chimeneas. Ese año, Recursos Humanos de Klaukol regalaba productos a las casas afectadas a cambio de firmar planillas y no denunciar lo que estaba sucediendo.

Ante esta preocupación, los vecinos que hoy siguen luchando por la salud y la vida de sus familias, denunciaron la situación en el año 2009 ante Juzgado Federal en lo Criminal y Correccional N° 2 de Morón a cargo del juez Jorge Ernesto Rodríguez -investigado por corrupción en otros hechos- y en el Juzgado N° 1 de Morón subrogado por el juez Juan Pablo Salas. La Justicia sólo clausuró la fábrica dos días y le impuso cumplir con siete metas que, según el Juez Rodríguez, hicieron con efectividad. Sin embargo, los vecinos denuncian que las inspecciones se hacen de manera planificada, con previo aviso para que la empresa, en ese momento, no ponga en funcionamiento toda su producción y así sortear las revisiones.

Los vecinos, además llevaron su denuncia para el control sanitario y medioambiental al Organismo Para el Desarrollo Sustentable de la Provincia de Buenos Aires (OPDS) y a la Autoridad de Cuenca Matanza Riachuelo (Acumar) que analizaron la zona. En el 2014, el relevamiento dio como resultado que el 100% de los niños de entre 0 y 14 años del barrio, presentaban plomo en sangre y ninguno de ellos pasó la Prueba Nacional de Pesquisa (Prunape), un instrumento de detección de problemas inaparentes del desarrollo psicomotor en niños menores de seis años creado por el Hospital Garrahan. El análisis también encontró metales pesados en el agua.

La lucha sigue

Esta incansable lucha que vienen llevando los vecinos contra la contaminante empresa sigue. Bajo la consigna “La vida vale más que Klaukol” vecinos autoconvocados contra la contaminación de Klaukol, convocaron a una concentración y escrache a la puerta de la municipalidad, ubicada en el centro de San Justo. Esta convocatoria denunciaba al gobierno municipal y provincial por el silencio cómplice que hay ante la grave situación socioambiental de provoca Klaukol. Organizaciones ambientales, políticas y sindicales se sumaron a la jornada que se desarrolló por la tarde del miércoles 9, por nuestra parte, junto a la Red Ecosocialista-MST participamos con una delegación con pancartas y pegamos carteles que exigían la reconversión laboral de la fábrica y la reparación socioambiental por el daño provocado todos estos años. La acción de lucha tuvo una convocatoria importante, con mayor presencia de jóvenes que llenaron la plaza con carteles que contaban la situación de Klaukol, la complicidad de los distintos gobiernos y también la denuncia a otros conflictos como los desalojos a las familias sin techo. Además, se sumaron docentes de las más de 80 escuelas que se encuentran a 10 km a la redonda de la gigante contaminadora que vienen juntando firmas para parar con las escuelas contaminadas. También se entregó un petitorio al intendente Fernando Espinoza por el cierre inmediato de la empresa que contamina, enferma y mata.

Espinoza defiende a Klaukol y reprime al pueblo 

Luego de la intervención por micrófono de Susana Aranda referente de esta lucha, que expresó cómo a pesar de la entrega del petitorio y denuncia a la municipalidad por los daños que produce la empresa y el silencio que hay ante esto, se desarrolló un escrache con pintadas y una intervención que consistió en la quema de una maqueta que simulaba ser las grandes chimeneas que despiden el polvo mortal que ya se llevó la vida de familias enteras. Luego de ese escrache y ya desconcentrando la movilización la policía bonaerense junto a la local desató una cacería de manifestantes, llevando a 11 personas detenidas y que finalmente fueron liberadas esa misma noche. Repudiamos este accionar represivo con el que responde el intendente Fernando Espinoza frente a un reclamo totalmente justo y que muestra que su orientación es priorizar y garantizar la ganancia por sobre la vida.

Nuestra vida vale más que Klaukol 

Desde la Red Ecosocialista y el MST creemos imprescindible seguir con esta lucha en defensa propia. Todos estos años muestran que Klaukol mata. Es inadmisible que esta fábrica de categoría 3 que, según la ley provincial 11.459 de Radicación Industrial, es la que incluye “aquellos establecimientos que se consideran peligrosos porque su funcionamiento constituye un riesgo para la seguridad, salubridad e higiene de la población u ocasiona daños graves a los bienes y al medio ambiente”, siga funcionando a metros de las casas de familia de Virrey del Pino. Por eso nuestra propuesta y lucha es por el cierre inmediato de Klaukol, con indemnización a cargo de la empresa para todas las familias afectadas, por otro lado, creemos fundamental la reconversión laboral para que sus trabajadores no se queden en la calle. El gobierno tanto municipal como provincial y nacional deben crear un plan de remediación socioambiental de la zona, con la consulta e inclusión de los vecinos afectados y organizaciones socioambientales.

Para todo esto, creemos fundamental que se desarrollen asambleas y espacios de coordinación unitaria, que sean democráticas para poder tomar las acciones a seguir y golpear con un solo puño. La lucha de Klaukol es de todos, si los vecinos y trabajadores nos organizamos y movilizamos en las calles podemos ganar.