Los teleoperadores de call center se organizan

En el día de ayer, les trabajadores de call center de la provincia de Córdoba protagonizaron una concentración frente a la sede de la ATACC, el Sindicato de los Centros de Contacto de Argentina. La iniciativa callejera convocó a muches empleades con la consigna #ATACCHaceteCargo, las exigencias incluyen aumento salarial, basta de descuentos por cortes de luz y que las empresas se hagan cargo de los gastos que insume la práctica laboral.

Esenciales pero pobres

Desde el inicio del Aislamiento Social Preventivo y Obligatorio, les operadores se encuentran en modalidad de teletrabajo, o para ser más precisxs: trabajando desde casa como pueden. Las empresas multinacionales de centros de contacto jamás les aseguraron las condiciones necesarias para poder realizarlo. Veamos:

Los empleados prestan sus servicios utilizando su propia luz e internet; en la mayoría de los casos, con sus propias computadoras y herramientas, porque las empresas se desligaron por completo aduciendo que “no había para todos.”

En el sector no se han discutido paritarias desde Abril del 2019, por lo que se encuentran con el salario un 50% devaluado, con el cual tienen que hacerle frente a las boletas de luz e internet que, por las tareas laborales, se les han incrementado. Los cortes de luz o inconvenientes con las herramientas para trabajar son descontados del presentismo.

El DNU 329/2020 lanzado por el Gobierno Nacional que “prohíbe despidos y suspensiones por 60 días” habilitó que los gremios firmen un acuerdo con las empresas para poder suspender o reducir salarios. Eso hace que quienes estén suspendides, vean reducidos sus ingresos un 35%.

El verso del teletrabajo

Las empresas y patrones pintan un modelo de ensueño cuando hablan del teletrabajo. Que es más cómodo y práctico, que nos permite conciliar lo laboral y la vida personal, que reduce los tiempos y hace nuestro el laburo más ligero. Pero la realidad es que se trabaja mucho más, aumenta el estrés con les niñes y familias en casa, suben las presiones de los directivos para cumplir con los objetivos que cada vez son más difíciles.

Consultades por este punto les operadores organizades en Dar Vuelta Todo expresaron: “No se puede seguir así, además de un salario igual a la canasta básica es necesario pelear por una real ley de teletrabajo, no como la aprobada por el PJ y la derecha que regirá 90 días después de finalizada la pandemia. Exigimos que tenga aplicación inmediata y un marco regulatorio de cumplimiento efectivo, donde las empresas se tengan que hacer cargo de tecnología, dispositivos, conectividad, el pago de las compensaciones por gastos y uso de servicios, la entrega de mobiliario, elementos de salubridad y seguridad. Además de reacondicionar o proveer un lugar adecuado para teletrabajar y preservar la intimidad. Fijar los días y horarios, el derecho a la desconexión y a no recibir pedidos o mensajes a cualquier hora o día, invadiendo la intimidad y el tiempo libre. Se debe asegurar también la protección de los datos, donde la patronal no tenga más que la imprescindible, porque el trabajo remoto agrava los dispositivos de control. Garantizar los derechos gremiales, ante la tendencia a la atomización de trabajadores por las patronales. Sin todo esto, lo que se sigue legalizando es la precarización”.

Franzone, del que nada se esperaba, nada está haciendo

Walter Franzone, secretario general de ATACC Córdoba parece estar más preocupado en hacer campaña de afiliaciones en Tucumán que por preocuparse por atender las demandas de los operadores cordobeses que ya se encuentran afiliados al gremio. ATACC como muchos otros gremios sostiene una estructura verticalista y burocrática. Todos los años se votan delegados, a quienes les trabajadores ni siquiera conocen, no dan respuestas por las medidas que toman y muchas veces es el gremio quien marca a la patronal cuáles son les trabajadores que reclaman. Consultada por este punto una de las trabajadoras de Dar Vuelta Todo expresó: “Creemos que este modelo sindical no va más y hay que ir por otro, con autonomía y democracia sindical, las cosas serían totalmente diferentes si en vez de descontarnos el aporte al gremio, tuvieran que ser los mismos representantes quienes vinieran a cobrarnos a la entrada o salida del call. La conducción del gremio debería rendir cuentas a lxs trabajadores. Tendrían que estar obligados a convocar asambleas periódicas para que podamos decidir colectivamente. Así nos aseguraremos de que el gremio no pacte con las empresas acuerdos que nos terminan afectando. Además ¿Hace cuantos años que Franzone no trabaja en linea? Hay que modificar el estatuto del gremio para que después de dos mandatos vuelvan a laburar como el resto, como así también ser revocadxs si no cumplen con las tareas para las que fueron elegidos”

 

Alexander, Vera y Natalia