Comuna 9: a pesar de las actitudes intimidatorias El Consejo Consultivo tiene normas democráticas
Declaración
El miércoles 18 se realizó la segunda reunión del Consejo Consultivo Comunal en el Club Alberdi. Asistieron más de 300 personas, pero la presencia de grupos extraños enrareció el ambiente desde el inicio.
Representantes de la Comisión de Normas presentaron el Proyecto para ser sometido a debate y votación. A poco de comenzar la lista de oradores hubo una moción de orden para que se votaran las Normas de funcionamiento en general y seguir el debate, ante lo cual una amplia mayoría decidió votar a favor, mientras que el PRO pretendía que se vote artículo por artículo. Finalizada la votación grupos ajenos a los vecinos impidieron la continuidad del debate, ante lo cual se llamó a un nuevo cuarto intermedio, quedando citada la continuidad del Consejo Consultivo Comunal para el 16 de mayo en el Club Liniers.
Nuestra opinión sobre lo que pasó
El reglamento del Pre Consejo Consultivo defendido por el PRO tenía un articulado tan cerrado que los vecinos le dieron la espalda y nunca se sumaron. Por el contrario, las Normas consensuadas en Comisión y luego votadas en la asamblea del actual Consejo Consultivo son democráticas y permiten la participación.
Nosotros reivindicamos el trabajo democrático de la Comisión de Normas votada en la primera asamblea, que se logró con la participación de vecinos independientes, de distintas pertenecías políticas y, en alguna medida, de unos pocos del PRO hasta que decidieron autoexcluirse (o recibieron la directiva de hacerlo).
Se llegó al consenso luego de varias reuniones abiertas en las que nadie le impuso nada a nadie. El proyecto se terminó de redactar faltando dos días para la realización de la asamblea y un día antes fue enviado por correo electrónico a los inscriptos. En la asamblea se leyó artículo por artículo y se distribuyeron ejemplares impresos. Nosotros opinamos que lo ideal hubiera sido que se avanzara más en la lista de oradores antes de votar en general, pero la presencia amedrentadora de grupos vinculados al PRO desvirtuó el funcionamiento normal de la asamblea y puso en riesgo la posibilidad de que se pudiera llegar a votar. La votación fue muy clara: hubo una amplia mayoría de vecinos levantando la mano a favor de las Normas, como había presiones, se volvió a votar a mano alzada y con los papelitos de acreditación en la mano, con idéntico resultado.
Luego de la votación volvieron a la carga y apagaron las luces. Después, los coordinadores llamaron a calmar la situación y continuar con la lista de oradores, pero el apagón se repitió en dos oportunidades causando miedo en los vecinos y dejando en claro que estaban dispuestos a impedir la continuidad de la asamblea si perdían sus posiciones. Esto motivo que se diera por finalizada la reunión pasando a un nuevo cuarto intermedio hasta el 16 de mayo. El debate debe continuar, las Normas tienen una clausula transitoria que estipula un plazo de 90 días más para permitir reformar lo que fuera necesario a partir de la opinión mayoritaria de los vecinos y la aplicación en la realidad, así que las Normas son perfectibles.
Sí el Consejo hubiera funcionado normalmente los vecinos hubieran abordado, entre otros asuntos de importancia, los siguientes temas: la actuación del gobierno de la Ciudad antes y después de la tormenta del 4 de abril, la falta de clases y respuestas en la Escuela Nº 10 producto de los destrozos, la voladura del techo del Cine El Plata por su pésima construcción, la inseguridad en el barrio Parque Avellaneda, etc. Pero el macrismo no quiere esto ni en la Comuna 9 ni en la Ciudad, por esto también impidió que se debata en la Legislatura.
Como dato complementario, al finalizar la votación sectores del Frente Para la Victoria cantaron la marcha peronista (también lo hicieron algunos del PRO). Nosotros respetamos las distintas expresiones, pero nos parece que esto no tenía nada que ver con el desarrollo de una Asamblea vecinal de carácter amplio.
Por la democracia para que el vecino decida
Los vecinos genuinos que fueron a participar de buena fe, se encontraron con un panorama distinto al que esperaban y algunos se fueron molestos o decepcionados. Esto es comprensible, pero la única forma de cambiar las cosas en con una presencia vecinal masiva. Hay que defender el derecho a debatir y votar democráticamente, sin presiones ni violencia.
Y a la luz de los hechos hay que tomar medidas entre todos los que rechazamos estas situaciones como establecer mecanismos para que el registro sea controlado por la Junta Comunal en conjunto con integrantes de las distintas expresiones políticas e independientes del Consejo Consultivo y organizarnos para cuidar la integridad de los asistentes, en espacios amplios y seguros.
Para nosotros es un gran paso adelante que el Consejo Consultivo se haya dotado de Normas democráticas de funcionamiento, pero de ninguna manera damos por cerrado el debate con la aprobación en general. No cabe duda que los vecinos van a enriquecer y mejorar el articulado con sus aportes, hay que tener paciencia con una experiencia que recién comienza y requiere de un ejercicio democrático permanente. Llamamos a los que tengan aportes a las Normas a realizarlos para que se puedan debatir y votar en la próxima sesión y el Consejo Consultivo pueda funcionar normalmente.
Es necesario fortalecer al Consejo Consultivo para que empiece a trabajar sobre los problemas comunales, el presupuesto para los barrios, las prioridades y la inseguridad, entre otros temas. Hay un gran desafío por delante, no será fácil, pero con la organización y la participación popular y democrática se puede lograr la descentralización y que en nuestros barrios empiecen a decidir sus verdaderos dueños, los que viven en ellos: los trabajadores y el pueblo.
MST en el Movimiento Proyecto Sur
Rubén Tzanoff, Comunero (C9)