Sanatorio Plaza de Escobar: que el municipio y la provincia se hagan cargo

El 7 de setiembre, una delegación de Alternativa Salud zona norte, junto a la compañera Ruth Leites (trabajadora despedida de Centro Médico Talar) nos hicimos presentes para brindar nuestra solidaridad y acompañar a lxs trabajadores del Sanatorio Plaza, quienes están siendo protagonistas de una enorme lucha contra la patronal explotadora y la desidia del gobierno, decidiendo permanecer en las instalaciones del Sanatorio desde el pasado 31 de julio, con el único objetivo de lograr su continuidad laboral y evitar que la empresa FERWAL S.A., dueña del sanatorio, retire los bienes y vacíe la clínica.

 

Un solo grito recorre el municipio de Escobar “Los trabajadores del Sanatorio Plaza de Escobar ¡QUEREMOS TRABAJAR!”, pero parece que el intendente Ariel Sujarchuk sigue sin escuchar, o peor aún, decide ignorar la lucha del personal de salud, imitando el comportamiento de sus compañeros de fórmula del Frente de Todos Axel Kicillof y Alberto Fernández, quienes en plena pandemia mundial ajustan a los trabajadores de la salud y premian a las fuerzas represivas del Estado, demostrando una vez más cuáles eran las verdaderas prioridades de este gobierno.

Historia de la destrucción de un centro de salud

El Sanatorio Plaza es una clínica privada radicada en el partido de Escobar hace más de 40 años, cuenta con 48 camas de internación, de las cuales 8 son de terapia intensiva y 4 de terapia intermedia, a su vez cuenta con respiradores, oxígeno y aspiración central, elementos claves para dar batalla al covid–19, que hoy yacen al fondo de una clínica al cuidado de sus trabajadores, que desean ponerlos a disposición de toda la comunidad.

En el año 2017 el sanatorio empezó a ser administrado por la empresa FERWAL S.A. y se dedicó exclusivamente a la atención de pacientes de PAMI, que mensualmente le destinaba seis millones de pesos. El día 25 de febrero de 2019 la empresa presentó la solicitud de apertura del concurso preventivo y desde el pasado 1 de julio, PAMI le transfirió la cartera de afiliados al Hospital Municipal Néstor Kirchner de Maquinista Savio (ex Sanatorio San Carlos) y los pacientes que estaban internados en el Sanatorio Plaza, fueron trasladados.

El día 31 de julio del corriente año, la empresa se ha retirado del inmueble sin volver a comunicarse con sus empleados, dejando a la deriva a su personal médico, técnico y administrativo.

Hablan lxs trabajadores del Sanatorio Plaza

Desde Alternativa Salud en ANCLA /MST estamos acompañando la lucha de lxs trabajadores y ahora les damos voz a sus protagonistas, quienes nos cuentan en primera persona este largo camino:

• ¿Cuáles son sus nombres y por qué están hoy acá?

Erica: Hola, mi nombre es Erika, hace dos años que trabajo en el Sanatorio Plaza como camarera. Y hoy estamos acá porque ya hace tiempo que teníamos problemas con el tema de los pagos de los sueldos, no cobrábamos más de $20.000.

Estela: Yo soy enfermera del Sanatorio Plaza, trabajo acá hace un año y como te contó Eri, estamos en la lucha.

• ¿Cómo fue que comenzó el conflicto?

Erica: Lo que cobrábamos, lo cobrábamos en cuotas semanales de $5.000, hasta hay compañeros que cobraban menos. Había semanas que la plata no aparecía y esa es la deuda que empezaron a tener con nosotros, entonces había meses que no cobrábamos ni $18.000 ni $20.000, terminábamos cobrando $10.000 y de ahí iba variando.

• ¿La empresa nunca se acercó a darles algún tipo de explicación?

Erica: Es una lucha que veníamos teniendo hace meses con ellos, hasta que el 31 de julio la empresa no apareció más, no tuvimos ni un llamado ninguno de los 65 compañeros, solamente apareció un representante legal antes de que se vayan de apellido Mingrone, diciendo que el Municipio se había llevado la única obra social que manejaba el Sanatorio, que era PAMI, hacia su nueva clínica ex San Carlos, que hoy es Néstor Kirchner y el Hospital Erill, entonces la clínica no tenía ingresos.

• ¿Cómo tomaron la decisión de permanecer en el edificio?

Erica: El 31 de julio se fueron y un grupo de compañeros quedó al resguardo de la clínica, después nos fuimos sumando el resto de los demás compañeros y bueno, ahí empezó todo. Había que sacar la lucha para afuera, salimos a buscar apoyo de distintas organizaciones y de los vecinos, estamos subsistiendo en base a su solidaridad que nos traen mercadería y todo su apoyo.

• ¿Desde el Municipio tuvieron alguna respuesta?

Erica: Tuvimos 5 reuniones con el municipio, las 5 siempre se mantuvieron con la misma postura, que no podían ayudarnos, que no era su intención ayudarnos a hacer lo mismo que hicieron con la ex San Carlos y la última que fue en un tono más elevado de parte de ellos, además de mantener esa misma respuesta, se sumaron las amenazas de desalojo, no sé con qué intenciones lo hicieron porque en el expediente no se ve nada de eso.

Estela: El Municipio desde un principio nos mintió, la primera reunión que conseguimos fue a través de una marcha que hicimos, conseguimos una reunión con el intendente directamente, porque no queríamos intermediarios, él nos dijo que aguantáramos hasta septiembre, que ahí iba a ver si podía hacer algo por nosotros, sentimos que querían ver si llegábamos, y nosotros llegamos hasta septiembre. Cuando volvimos a pedir la reunión fue cuando mis compañeros fueron y les dijeron que el dueño había empezado el trámite para desalojarnos, pero averiguamos y no hay nada hecho, son todas amenazas de ellos.

• ¿Por qué consideran que es importante la difusión de esta lucha?

Erica: Porque creemos que es muy importante que la clínica esté abierta en época de pandemia, la gente hace horas de colas en las guardias esperando camas que se vacíen para poder utilizarlas y acá el sanatorio cuenta con 48 camas, terapia intermedia, terapia intensiva, respiradores, oxígeno central y aspiración central, y lo más importante es que hay personal capacitado en distintas áreas dispuestos a seguir trabajando. 

Estela: Nosotros vamos a seguir firmes acá, no nos vamos a ir, es lo que decidimos desde un principio y en cada asamblea que tenemos tratamos de unirnos y decidir hacer lo mejor para todos, queremos trabajar y que se abra el Sanatorio, creo que hoy en el volanteo viste como los pacientes se acercan a nosotros, nos saludan y agradecen la buena atención. Queremos trabajar, que se reabra el lugar y que nos escuchen. Los medios de comunicación nacionales no nos quieren prender las cámaras para que la podamos difundir, andamos por todos lados, vamos a las marchas y nos ponemos adelante de las cámaras y nos la apagan o nos dicen “sí, sí, ahora te hago una nota” y no nos hacen nada, es porque el gobierno no quiere que se sepa nada de lo que está pasando. El intendente está por armar una carpa más en el polideportivo de Escobar porque no tiene camas, porque el sistema de salud está saturado, nosotros tenemos acá 48 camas, entonces nos están dejando en el abandono, tanto a los pacientes, como a nosotros que tenemos familias para mantener y necesitamos trabajar. Nos hace pensar que es como un capricho del intendente hacia nosotros, ya no sabemos que pensar.

• ¿El gremio nunca se acercó a ustedes?

Erica: ATSA tuvo contacto con nosotros antes de que se vaya la empresa Ferwal, por el tema del pago de sueldos, de parte de ellos nunca tuvimos respuestas, es más, tuvimos amenazas porque la empresa todavía estaba acá y siempre arreglaban entre ellos y nunca tuvimos ningún apoyo. Hasta el día de hoy, varios saben que la clínica está cerrada y nunca se acercó ninguno de ese sindicato, para comunicarse con nosotros o ver cómo estábamos, pero no, nunca tuvimos ninguna respuesta, abandono total. Hay denuncias en el Ministerio de Trabajo, una de marzo y otra del año pasado por irregularidades que venían teniendo los dueños de la clínica con nosotros los trabajadores, tenían gente no registrada, los pocos que estaban en blanco no tenían ART ni obra social, entonces se venía denunciando todo eso, pero nunca hubo respuestas ni apoyo de ellos, que supuestamente son los que nos tienen que defender. Sería muy importante su apoyo y que estén acompañándonos, pero es una lucha que estamos dando solos.

Mientras charlábamos con las compañeras, se nos acercó otro de los trabajadores que está llevando esta lucha al hombro y nos contó:

“Mi nombre es Enzo Barreto, hace cinco años que trabajo acá de administrativo al igual que mi compañera. Para nosotros cualquier opción es válida, queremos trabajar y que se nos paguen los meses adeudados. En mi caso particular yo me quedé sin casa, debíamos ya dos meses, tuve que cerrar el contrato para que no se me siga acumulando más deuda y yo me mude acá con mi compañera y el bebé de dos años y medio.”

¡El municipio y la provincia deben poner el Sanatorio Plaza a funcionar ya!

Estamos en una situación de extrema gravedad en el país, los números de infectados y fallecidos no paran de aumentar, las medidas del gobierno nunca son suficientes y las clínicas privadas han demostrado una vez más que son empresas que sólo les interesan sus ganancias, porque no le tiembla la mano a la hora de cerrar un sanatorio y dejar a más de 65 familias sin ingresos. Cerrar establecimientos de salud es algo que no nos podemos permitir, toda clínica que despida o cierra debe ser puesta al servicio del Estado municipal, provincial o nacional y garantizar a sus trabajadores salarios dignos y las condiciones de trabajo que se merecen.

No queremos seguir llorando muertos, ni escuchar hablar de héroes y heroínas, ni de sacrificios y vocación, queremos que se cumplan todos y cada uno de los derechos de los trabajadores de la salud, porque como lo dijimos antes y lo repetimos ahora: ¡nuestras vidas valen mucho más que sus ganancias! Por eso junto a lxs trabajadores del Sanatorio exigimos que el gobierno municipal y provincial pongan a funcionar el Sanatorio Plaza ya mismo, poner toda la capacidad instalada y la calidad de su personal al servicio de la comunidad y abonar los salarios de todxs lxs compañerxs.

Candela Ramírez