Debate en enfermería: democracia sindical para ganar

Como sosteníamos en artículos anteriores, el impresionante proceso de movilización de enfermería (el 2001 de la enfermería), enfrentó el obstáculo de conducciones que pretendieron controlar el proceso. Surgieron dos“coordinadoras.Nuestra postura fue participar en ambos espacios para unir por la base la lucha. Hoy, el debate vuelve. Nuestro punto de vista.

La semana pasada, se convocó asamblea Interhospitalaria en el Hospital Garraham al contrario de lo que se había votado en su momento de que las asambleas se realizaran en los hospitales de CABA. Esto no es una casualidad.En dicha asamblea al inicio el control lo tenía la Junta Interna de ATEGarraham que pretendió, fiel a su lógica, echar a Christian Acosta que, (nos guste o no), es uno de los representantes votados del H. Ramos. La lógica que representa esta moción es la del pensamiento único, la de solo aceptar a quien piensa igual. Es la lógica del modelo sindical monolítico y burocrático. Después de una discusión la moción fue retirada y se pasó a votar a la mesa coordinadora de la asamblea. Para decidir quienes la conformaban se produjeron todo tipo de irregularidades que no tienen nada que ver con la democracia sindical. Votaban militantes políticos que no trabajan siguiera en el sistema de salud, todos los miembros de la Junta Interna ATE Garraham presentes que naturalmente estaban en la asamblea. En vez de votar por un solo postulante, votaban tantas vecescomo amigos tenían postulados. Un mamarracho que denunciamos pero que al haber mucha gente que no era verdaderamente representante de su hospital (votaba cualquiera) le impusieron las votaciones a la mayoría de les representantes.

Un punto de quiebre

En un giro burocrático los conductores de la interhospitalaria determinaron que no podían votarse cosas que ya se habían votado, por más que varios hospitales llevaron mandatos de sus bases con resoluciones contrarias al pase de los tres niveles. Ahora, esta regla inventada se exceptuaba para las cuestiones que eran de su interés, como lo fue la resolución sobre la prerrogativa del uso de la bandera interhospitalaria. Totalmente inconsistentes.

Esta discusión pegó un salto de calidad al presentarselos resultados de una consulta del Hospital Álvarez. Dos representantes informaronque habían hecho una consulta sector por sector y a fondo con enfermería que, había dado un resultado distinto al pase de los tres niveles. En una actitud repudiable en todo sentido, otro de los representantes se levantó para deslegitimar la intervención,llegando a decir que por consultar se dividió al hospital. Más claro imposible.

Cuando se iba a pasar a la votación con los referentes esta minoría apeló a que directamente voten supuestos referentes del sector privado sin mandato ni nada.De la asamblea en donde había 19 representantes de hospitales de CABA se retiraron 13, de los que se quedaron el Álvarez no votó y delGutiérrez votó una compañera que no tiene mandato. Para llegar a los 14 votos que muestran en su comunicado votó gente sin ser representante sino solo participantes individuales y otros directamente se autoproclamaron representantes cuando no fueron votados por nadie o habían renunciado a su representación. Un verdadero fraude.Estos métodos aplastan la participación y son contrarios a la necesidad de fortalecer la movilización para poder lograr los objetivos. Bajo una jerga radical en la que plantean todo o nada lo único que logran es ser funcionales a Larreta, AMM y SUTECBA.

El debate del pase a la carrera profesional

El pedido de pase de los tres niveles directamente a la carrera profesional en vez de ayudar a avanzar el proceso lo hace meterse en un callejón sin salida. Plantear un objetivo que no comparte una mayoría de los enfermeros que se han movilizado es contrario a lograr avanzar. En ningún lugar del mundo puede ser reconocido como profesional un auxiliar de enfermería. En ninguna de las provincias de la Argentina en donde están reconocidos los enfermeros como profesionales se incluye a los auxiliares. Ni en la propia Ley de Enfermería se le reconoce si no se profesionalizan en un período de tiempo dado. Esto lo comparten la mayoría de los propios auxiliares.Por eso mismo, el argumento de que se los excluye y que eso hace que no se movilicen no solo es falaz, sino también una estafa para los propios auxiliares que les crean. De hecho, en comunicados emitidos luego de la asamblea por parte de estos individuos empiezan a ser contradictorios al respecto.

Sacaron un flyer invitando a la movilización del 1/3 pidiendo solo el pase de licenciados y profesionales y en trípticos que sacaron para ciertos hospitales sostienen que deben pasar todos. O son un grupo inconsistente o en realidad sus posturas tienen que ver con la rosca más que con la necesidad de las y los enfermeros que dicen representar.Es real que hacen las mismas tareas y por eso mismo hay que pelear porque los auxiliares tengan las mismas condiciones laborales,que no es lo mismo que el reconocimiento profesional. Por eso la propuesta transicional que incluye al colectivo de enfermería es el pase de los licenciados, facilidad para que se licencien los enfermeros completando su carga curricular en horario laboral y mismas condiciones laborales para los tres niveles.

En la lógica del todo o nada ya sabemos lo que pasa. Y eso pasa porque para llegar al todo, un tipo de sociedad distinto es el que necesitamos. Lamentablemente este grupo razona con un sistema binario: solo tienen el 0 y el 1. Pero para llevar adelante los procesos de lucha hay que partir de la realidad y utilizar toda la escala numérica. Sabiendo que entre el 1 y el 0 existen infinitos números y lo importante es avanzar tomando en consideración la globalidad de los problemas a resolver.

La necesidad de un espacio nuevoy las tareas estratégicas

Esta realidad (desprecio por la opinión del colectivo de enfermería y propuesta de salida que constituye un callejón sin salida) colocó objetivamente la necesidad de tomar otro camino. La lucha necesita buscar la forma de masificar la movilización y avanzar en un plan de lucha que tome como punto de partida lo que piensan los propios enfermeros. Porque no hay verdadera forma de avanzar en la inclusión si no es en la calle y con la presión de la movilización. Por eso una mayoría de representantes legítimos se propusieron conformar una nueva coordinación: “La Coordinadora Interhospitalaria”

Hay que profundizar el rumbo de la consulta en cada lugar de trabajo. Buscando activamente la participación del conjunto de enfermería e incluso sumando a las otras profesiones excluidas. Fortalecer la Coordinadora interhospitalaria con un método claro que respete la opinión de las mayorías, se incluya a las minorías y se sepa convivir con diferentes apreciaciones, ideologías y puntos de vista. Volviendo a motorizar la movilización masiva. Tenemos por delante, de manera inmediata la marcha del 1° de marzo, contra el ajuste, y también la convocatoria de paro el 8M en el cual las enfermeras debemos ser vanguardia dado que en nuestra profesión somos la absoluta mayoría y que, las tareas de cuidado feminizadas por esta sociedad capitalista y patriarcal, también constituye uno de los obstáculos por los cuales la enfermería no es reconocida comoprofesional.

Para llevar estas tareas adelante es fundamental agruparnos y construir una herramienta sindical y política alternativa de los que coincidamos con este punto de vista.

La Bordó de Sanidad / Alternativa Salud en ANCLA