Clinica Ciarec: la negligencia organizada

EPP inadecuados, ocultamiento de casos e información dieron los resultados obvios: Un foco de contagio enorme en una clínica de rehabilitación. Lo veníamos denunciando y no escucharon, solo para seguir facturando. Buscaron ahorrar en insumos, buscaron no dar bajas médicas, negaban que a la institución llegaran casos. Un negacionismo acientífico para justificar lo injustificable. Ahora la Clínica corre riesgo de ser evacuada. El Estado debe hacerse cargo, con el control de los únicos a los que sí les interesa la salud: Los y las trabajadoras

La crónica de los hechos

El 28 de marzo, los trabajadores se enteraron que el papá de un paciente pediátrico quedaba en cuarentena por contacto con infectado, cuando preguntamos a supervisión se nos niega información poniéndonos en peligro.

El 29 de marzo, hacemos nota para pedir barbijos al departamento de Enfermería, donde Juana De Montis (jefa del mismo), nos lo niega. Por orden de la Infectologa Zito Teresa, seguimos trabajando sin protección alguna, conscientes del peligro que corríamos pero con impotencia y mucha angustia por no poder hacer nada.

El 9 de Abril, ingresa el paciente cero (0) covid+, sin protección colegas asistieron al paciente porque se les oculto información de la patología del ingreso. Directamente un crimen.

Trasladan al paciente, deberían quedar en cuarentena 14 colegas pero solo aislaron a 6 de ellos en sus domicilios.

El 11 de Abril se hace una reunión con la infectólga Zito Teresa, Director Sibila, Mario; Subdirector Bayona Gastón; Jefa de dpto. de enfermería Juana De Montis, donde se siguen insistiendo con el insólito argumento de que no es necesario usar barbijo porque la clínica iba a estar libre de Covid por la complejidad de los pacientes que se encuentran en la institución.

El 17 de abril, se confecciona otro petitorio donde colegas de todos los turnos y sectores pedíamos EPP, seguimos sin respuestas.

El 20 de Abril, nos organizamos con varias colegas e hicimos Amparo intimando a la ART y Clínica para que se nos brinde seguridad entregarnos el EPP correspondiente los recomendados por la OMS. (Solo entregaron TAPABOCAS)

En paralelo a esto había ingresos donde los pacientes quedaban aislados por 14 días destinados a que 1 enfermero se quede encerrado toda la guardia totalmente expuesto, ya que los obligán a ingresar con EPP inadecuados para las prácticas requeridas.

El día 12 de mayo, se descompensa una compañera, la internan y se confirma el resultado positivo para covid. Desde esa fecha creció exponencialmente el contagio entre colegas y pacientes

Cómo sigue

Hasta el día de la fecha ya hay 9 colegas contagiados, 3 esperando que los hisopen por no presentar fiebre.

Los delegados de la celeste y blanca nunca se acercaron a preguntar por la situación, aceptaron ocultamientos y concordaron con la patronal, dejándonos sin herramientas gremial para reclamar nuestro derecho a la salud, literalmente miraron hacia otro lado.

Nunca nos dejaron participar para una solución colectiva por el bien de la institución nos dejaron al libre azar de las decisiones de la infectóloga Zito Teresa y los resultados están a la vista.

Hoy hay colegas que tienen hijos pequeños y están amantando que no pueden siquiera verlos por estar contagiadas, debido a la negligencia de la clínica.

Se nos subestimo tomándonos de exagerados, cuando en el mundo está muriendo gente, esta institución negó la pandemia mundial.

Reiteramos que es necesario que nos testeen a la totalidad del personal y pacientes de manera inmediata para ver el nivel de contagio y contener la propagación de la enfermedad

Ahora corre el rumor de que la empresa puede cerrar, los y las compañeras tienen temor a lo que pase con su salud y con su trabajo. Nosotros lo advertimos: el riesgo de que la clínica cierre no era por las denuncias que hacíamos los trabajadores, sino que el riesgo estaba en no tomar las medidas de protección necesarias. La realidad nos da la razón.

Los responsables de este escándalo tienen que sufrir las consecuencias de su accionar. Por otro lado si la clínica cierra debería el Estado hacerse cargo de la misma tomando todo el patrimonio de esta empresa para mantener  las fuentes de trabajo, se hagan cargo de los salarios (ya se hacen cargo de la mitad) y la pongan en función de las necesidades de las y los trabajadores y la sociedad. Ojo, eso sí, tiene que haber un comité de crisis integrado por los propios trabajadores y trabajadoras que fuimos quienes podríamos haber resguardado la salud de trabajadores y pacientes. Y asimismo, que una futura clínica estatizada este bajo el control de trabajadores y usuarios.

 

Trabajadoras y trabajadores de la Clínica Ciarec