CTERA patalea en modo virtual. Trotta avanza en modo real
Cuando Trotta lanzó el crédito para computadoras con el Programa PC Docentes, dijimos que era para muy pocos. Y tuvimos razón, se agotó en horas. Ante la bronca docente, CTERA dijo que el Estado debería proveerlas, pero… ¿Y las medidas para lograrlo?
En la nota del viernes 31, ¿Créditos PC Docentes o poner fin a la brecha digital?, decíamos que -con suerte-, de cada 1.000 docentes, apenas 18 podrían llegar a un crédito. Por la inversión de la que hablaba el ministro de Educación, Nicolás Trotta, calculamos que podrían ser 25.000 las computadoras que pondrían a disponibilidad. Con eso, apenas el 1,8% del más de 1,1 millón de docentes argentinos tendría la posibilidad de aspirar a un préstamo. Es decir, más del 98% de la docencia no podría recibir ningún crédito, por más que quisiera y tuviera el sueldo para hacerlo.
Crónica de un bochorno anunciado: En horas se agotaron las PC
Esto fue lo que pasó. Y peor. Porque, como reconoce el gobierno, la posibilidad de anotarse para pedir un crédito se abrió el viernes por la mañana en la web del Banco Nación, pero hacia el mediodía ya tenía el cupo completo. Había gran malestar en la docencia con esta operatoria y el viernes explotó una ola de indignación. Es que la respuesta oficial, en el portal del Banco [1], reza así: “Lamentablemente tu solicitud no pudo ser procesada debido a que se ha alcanzado el cupo máximo de computadoras que se había definido para el programa…”.
Por eso, en los grupos docentes, pero también en los chat de publicaciones afines al gobierno de Alberto Fernández como Página 12 o la fanpage de CTERA, llovieron centenares de mensajes críticos. La pregunta más extendida en estos chat era si alguien había podido sacarlo… Porque no había nadie que dijera haberlo logrado, en tantísimos comentarios. O bien señalaban que la página les había dado error todo el tiempo o les decía que había sido rechazado, sin ninguna aclaración. O les rebotaba diciendo no reunir los requisitos para el préstamo, sin decir cuáles serían. Pero entonces, ¿se agotaron realmente o fue todo un gran bluf…?
Los comentarios que representan la opinión mayoritaria sobre estos créditos es que son una vergüenza. Con sentido de división, ya que muchísimos docentes no pueden acceder por las condiciones y la mínima oferta. Se agrega que el plan favorece a los fabricantes. Y el gobierno debería proveer las herramientas, ya que con sueldos magros, es imposible y no corresponde endeudarse para trabajar.
Agravios de obsecuentes defensores del gobierno
“Mucha bronca, no llego a 4 sueldos mínimos y fui rechazada, al igual que yo, todas mis compañeras… No entiendo”, decía un comentario repetido. “La verdad, muy mal manejado. Generó más descontento que otra cosa”, agregaba otro. Y el que más sintetiza el sentir docente, señala que es bochornoso que, como trabajadores, se deban comprar los elementos de trabajo.
Cada docente viene sosteniendo social, didáctica y económicamente la educación pública más que nunca, usando sus propios recursos, cuando el Estado debería proveer esos elementos. Acaso, ¿al volver a las aulas, habrá que pagar por los pizarrones, las tizas, el acondicionamiento o la electricidad de la escuela? Inaudito. Hoy la computadora es como el aula y el hogar, hace las veces de escuela. Esta responsabilidad debe correr por cuenta del Estado y los gobiernos gerentes del capital, que son la parte empleadora.
Lamentablemente, muchos obsecuentes defensores del gobierno “popular” de Alberto y el PJ salieron a atacar a quienes reclaman, con la triste muletilla de siempre: No te vi decir nada ante Macri o Vidal… A lo que, cada docente cuestionada, respondía que sí había luchado esos años. O cuestionar si se piden las cosas gratis por ser docentes, cuando les pibes no tienen acceso ni equipos para conectarse (¿!). O señalar acusatoriamente: “ahora se quejan, pero sí estaban felices cuando a los pibes no les daban compus…”, suponiendo que toda docente que se queje es de derecha o troll macrista.
Así como otras afirmaciones agraviantes de sectores afines al kirchnerismo, diciendo: “¿Quieren computadoras gratis, pero cuando vuelvan las clases presenciales, las van a devolver? No! Si a los chicos se les da gratis es porque ellos no cobran un sueldo por ir a la escuela!” (¿!). Todas cosas inadmisibles.
Esta pobreza de argumentos y la sarta de agravios, no tapan lo engañoso de la publicidad oficial. Ya en la nota del viernes (ver aquí) explicamos el verso de las cuotas fijas con el supuesto 12% de interés. Porque si alguien tuvo la suerte de sacar un crédito por $100.000, terminará pagando $27.000 más al final, lo que implica un 27% más real. Y hay otras mentiras de este anuncio. Veamos.
Pocas PC, al precio de mercado y limitadas
La calidad de los equipos puesta a disposición por las empresas fabricantes fue modesta en general. Así puede comprobarse al ingresar a la plataforma https://tiendarg.com.ar/, el sitio de compras montado por las cámaras de fabricantes. La que aparece en la web del Banco Nación para conectar a empresarios que quieren vender, con trabajadores de la educación que necesitan comprar para trabajar, ya que el Estado no provee las computadoras como debería ser.
Pese al elevado monto del préstamo, ante salarios docentes de pobreza, no es posible acceder a los equipos mejor preparados para la edición audiovisual, muy requerida en tiempos de virtualidad educativa. En su mayoría se trata de “clones”, es decir, equipos armados con distintos componentes genéricos, y algunas pocas computadoras o notebook que sí serían de marcas reconocidas.
Además, la oferta más accesible de notebook es lo que se conoce como “cloudbook”, un formato que si bien es económico, a duras penas sirve para trabajar con Word (procesador de textos) o hacer una videollamada, como si fuese una Tablet. Tampoco hay variedad de primeras marcas. Incluso en los pocos equipos más caros (alrededor de $90 mil) que sí son de marca, se debe revisar para comprobar que no tienen sistema operativo, es decir, no te dan una computadora lista para trabajar.
Cuando la promoción dice que, sin moverse de casa, uno recibe la computadora. Pero si la quieres sacar de la caja, enchufar y ponerte a trabajar, no será posible. Si no que deberás poner más plata encima, apelar a un técnico, poner un software gratuito o “piratear” uno. Ninguna de estas máquinas son de gama alta o con los últimos procesadores. Y que puedan asegurar que, ante los constantes problemas de conectividad, logren evitar “tildarse” y funcionar como es necesario. Tampoco ofertan muchas con gran rango de memoria, sino más bien con escasa memoria (4GB), lo que dificulta trabajar con varios programas o que demanden mayor requerimiento.
En cuanto al precio, no hay gran diferencia con el mercado ya que están en el rango de precios que se puede conseguir en otras plataformas privadas. Incluso buscando, se pueden conseguir mejores precios. Y aquí viene otra estafa del anuncio. Porque el ministro Trotta y el presidente del Banco Nación nos dicen que se llegó “a 25 mil computadoras aportando un descuento del 20% en el precio”, cosa que es totalmente falsa. No hubo ningún descuento y menos del 20% como dice Trotta. Lo que puede verse, comparando precios y características con cualquier casa de computación.
Por la bronca docente, la CTERA se expresa en modo virtual
Es tanta la bronca que hasta la oficialista cúpula Celeste de CTERA tuvo que salir a criticar. No sin tener que reconocer que recibieron un alud de presiones de la base docente, criticando la línea oficial de tener que pagar la propia herramienta de trabajo. Así lo reconocía la burocracia kirchnerista de CTERA, ante el anuncio de Educación de dar préstamos, frente a “los numerosos reclamos recibidos en los sindicatos docentes provinciales”. Desde CTERA afirman “que es el Estado el que debe proveer en forma gratuita los insumos necesarios” para trabajar.
Ante la ola de indignación, la conducción de CTERA salió a aclarar también que esto “lo ha manifestado CTERA en diversas reuniones con el ministerio de Educación y el Consejo Federal de Educación ante los ministros provinciales”. Un posicionamiento con un aspecto correcto, pero que no rechaza estos créditos. Es que ya el 9 de mayo el ministro Trotta anunció [2], después de reunirse con CTERA y los gremios de la CGT (ver nota), que esto lo habían acordado con los gremios y estaban “trabajando una línea de crédito del Banco Nación para la compra de computadoras” (Página 12, 9 de mayo).
Por eso la Celeste de CTERA solo opina en modo virtual, pero no convoca a ninguna medida real para lograrlo. Cuando lo que hace falta y se debe exigir desde cada escuela, grupo docente, distrito o seccional, son las medidas para pasar de declaraciones virtuales a los hechos. Para que lo que se dice, sea realidad.
Un negocio para reactivar a las empresas
Como decíamos entonces, esto fue pactado con la burocracia de la UOM de Caló y las tres cámaras del sector informático en esta iniciativa (Cadieel, Camoca y Cadmi), que celebran el aporte estatal. Como reconocen en un medio oficialista como Página 12, que difunde el comunicado patronal: “Este proyecto es un claro ejemplo de cómo las políticas públicas pueden contribuir a la reactivación de la economía: Educación articula la demanda y apoya con recursos para acceder a una tasa preferencial, el Banco Nación provee las condiciones financieras para facilitar el acceso, y el Ministerio de Desarrollo Productivo junto a la industria argentina responde”, halagó el sector empresario. También el Banco Nación festejó el “gran impulso para la industria nacional” con estos créditos [3].
Solo que se hace con la plata del pueblo y de la docencia que debe sacar de sus magros bolsillos para incrementar la ganancia empresaria. Así festejaba Educación el verdadero objetivo pro patronal de este lanzamiento [4]: “el éxito verificado en esta línea para docentes es el puntapié inicial para poner en marcha las capacidades del sector”.
La excusa de Educación es que costó conseguir ese stock, por no haber disponibilidad, relatando las dificultades empresarias. Pero, ¿es tarea del ministerio de Educación resolver la situación de las patronales privadas de la computación? Claramente no. Además, con la pandemia aumentó mucho la demanda y el negocio con los equipos informáticos, duplicando y más los precios en poco tiempo de modo claramente especulativo, ya que ni el dólar ni otros productos se fueron tanto por las nubes.
Propuestas socialistas para garantizar educación y acceso al pueblo
En lo inmediato, si el gobierno apela a estas empresas, a través del ministerio de Trabajo debería fiscalizar dicha producción, con salarios dignos, sin suspensiones ni despidos, con condiciones de trabajo, seguridad y salubridad para el personal y la apertura de los libros contables, para un control obrero de sus ingresos y la producción, evitando sobreprecios y toda fabricación deficiente.
La salida de fondo, como venimos planteando, es que el Estado implemente un plan de producción de notebooks y computadoras, a partir de la capacidad y recursos propios, prescindiendo del lucro empresario que encarece y resta calidad a los productos, a la vez que precariza a sus trabajadores.
Para asegurar la conectividad a millones, si las empresas de tecnología e informática pueden ofrecer plataformas gratis para conectar a docentes, estudiantes y familias, ¿por qué no lo garantiza el Estado desde el ENACOM (Ente Nacional de Comunicaciones) y ARSAT (empresa de Telecomunicaciones y soluciones satelitales del Estado)…?
Es que la búsqueda por maximizar tasa de ganancia capitalista, lleva a estos gobiernos gerentes de las corporaciones, a descargar en los bolsillos docentes y de las familias el acceso a internet y telefonía, con elevadas tarifas. Pero el gobierno puede y debe exigir esa provisión gratuita para asegurar la educación pública a todo el país a Telecom, Telefónica y Claro que amasan fortunas. Si se niegan, reestatizar estas empresas, bajo control de sus trabajadores, técnicos y usuarios, recuperando el monopolio estatal de las comunicaciones, con soberanía y autonomía.
Así se podrán garantizar los dispositivos necesarios y una conectividad gratuita y segura para cada docente, estudiante y familia que lo necesite. Y facilitar el acompañamiento pedagógico a cada integrante de las comunidades educativas de todo el país.
Mientras se demanda a CTERA y los gremios que llamen a instancias democráticas para definir medidas para lograr estos reclamos, te invitamos a participar este sábado 8 a las 16hs del 6º Encuentro Educativo Nacional, ONLINE. Como en los anteriores, será con modalidad Taller, con lectura previa de materiales para la formación y debate de un modelo social y educativo socialista en nuestro país y el mundo.
Alternativa Docente, ANCLA
Agrupación Nacional Clasista Antiburocrática
MST en el Frente de Izquierda-Unidad
REFERENCIAS:
[1] Banco Nación. Programa PC Docentes [https://www.bna.com.ar/AB/AltaProducto/MiCompuWeb]
[2] Figueroa Díaz, Adrián. Página 12, 9 de mayo, 2020. El ministro Trotta se reunió con los gremios docentes por teleconferencia [https://www.pagina12.com.ar/264788-el-ministro-trotta-se-reunio-con-los-gremios-docentes-por-te]
[3][3] Télam, 31 de julio, 2020. INCENTIVOS. El Banco Nación renovará la línea de créditos subsidiada para docentes tras cubrir el cupo
[4] Ministerio de Educación, 31 de julio, 2020. Educación renovará la línea de créditos subsidiada para docentes [https://www.argentina.gob.ar/noticias/educacion-renovara-la-linea-de-creditos-subsidiada-para-docentes]